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Capítulo 73: Las madres y el amor

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-Aún así me parece extraño -Jason pasaba las páginas del periódico sin leer nada en absoluto pero así fingía estar ocupado.

-Te escribió una nota. Que había ido a ver a su amiga Chloe o no se que y que iba a quedarse dos dias -Louis cambió de postura en la cama.  El médico había ido esa mañana, elogiado la labor de María y le había quitado los puntos – ahora eres su alfa pero sigues siendo su hijo, déjala...

-Chloe está en Cuba, lo sé por su esposo.

-¿Dónde está Cuba? ¿ Lejos?  A lo mejor fue allí.

-Tenemos que hablar de cómo os enseñan Geografía en Inglaterra y no, mi madre no se ha ido a Cuba. 

-Solo lleva dos días fuera de casa y te advirtió.  Estás exagerando.

-Cómo echaba de menos pelear contigo.

-Yo también te amo, mi amor.

-Buenos días... tardes.

La puerta del cuarto matrimonial se abrió y María les dedicó una sonrisa que quizás a Jason le pasase desapercibida pero que Louis se conocía de memoria de tantas veces que él había logrado salirse con la suya a espaldas del tío William.

La de la falsa inocencia.

-¿Qué tal con Chloe?

-Divertido.  Me invitaron a una fiesta de última hora y luego hicieron un almuerzo de Año Nuevo.  Terminó tarde y...

-Jason, mi amor... ¿puedes hacerme un favor?

-¿Justo ahora, Louis?

-Necesito con urgencia que me traigas pluma y papel.  Olvidé escribir a los condes Malik y los duques Payne respecto a Hope...

-Yo lo hice.

-¿Puedes traerlo igual?

-Esperaba que mi madre me contase cómo fue y vino tan rápido de Cuba.  Ni que pudiésemos trasladarnos por el aire...

María abrió la boca y espero a que saliera.  Louis se sentó en la cama y señaló el sitio a su lado.

-¡Alguien aquí ha follado y yo no he sido! 

-¡Louis! -María se sentó a su lado. 

-Quítate la bufanda.  Quiero ver cómo de intenso fue.  Supe que estabas con Cathleen desde que saliste a hurtadillas en Fin de Año.

María se quitó la bufanda y Louis gritó.

-¡Serás guarra!  Me quedan meses de abstinencia y esta marca no parece la de alguien que va a divorciarse.  Parece que la han mordido, besado y chupado hasta que te desmayaste de gusto.

-Sí, estuve con Cathleen.  Y fue increíble.  Hacía mucho que no era tan increíble.

-Se nota en tu cara.

-Estaba en celo.  Iba a entrar en celo y me puse como furiosa, fui a gritarle...

-Y terminaste gritando que te diera más.

-Estaba borracha, no hicimos nada esa noche. La cuide, hablamos... y el lunes en la tarde empezó mi celo.

-Y por eso no has vuelto hasta el día tres. 

-Ella siempre evitaba mi celo.  No quería correr el riesgo de preñarme pero... esta vez solo me cubrió.  Desperté y dije que me iba porque mi celo se iba a descontrolar y me dijo quédate. 

-Me muero.  Y te pidió perdón por todo...

-Por todo y no solo lo de esta vez.  Empezó a besarme y luego me hizo el amor en todas y cada una de las posturas imaginables...

-Jason va a morirse cuando lo sepa.

-De momento no tiene que saber nada.  No es como si hubiésemos vuelto...

-¡María! Además quizás has concebido...

-Si he concebido eso es algo que tendré que hablar con Cathleen pero ella es la alfa y quien debe venir, cortejarme y pedirme que vuelva.

-Pues como tenga que pedirle permiso a Jason lo lleva claro.

-Tengo que dormir. Y esperar a que Cathleen haga el siguiente movimiento.

-¿Otro más?

-Ya estoy aquí -dijo Jason.  María se colocó la bufanda - ¿de que hablábais? ¿De lo bonito que es Cuba?

-Prefiero Venezuela pero si, es hermoso. Aunque no estuve allí ni en casa de nadie.  Estuve con tu madre y ahora me voy a mi cuarto antes de que empieces a gritar...

-¡Louis! No te rías... Louis, te estás riendo.

-Lo siento, es.... Tu cara.

-Son mis madres.  Han montando un escándalo con un divorcio y ni dos dias después están... están...

-Follando.

-¡Louis!

-Sólo trataba de ayudar.

-Son mis madres, pensar en ellas... así... ay, no.  Iré a tomar una copa.  Creo que a emborracharme.

-Hope y yo estamos bien. Ve, cariño,  lo necesitas.

Louis espero a que se cerrara la puerta.

-Y como vayas a tener un hermanito, lo vas a necesitar de verdad.