Capítulo 21

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Tena miedo... algo tan franco y difícil de admitir, tenía miedo. Se sintió culpable, tal vez no debería ser así, pero no pudo evitarlo. Se sentía culpable, de todo. Ella respiraba... es todo lo que podía decir para calmarse, para que su alivio fuera tan intenso que le temblaron las rodillas. Ella le preocupaba, le preocupaba bastante. 

Se tomó solo cinco segundos para tomarse un respiro, no más. La ventana de la habitación de la rubia se encontraba abierta, dándole entrada libre al aire otoñal. Las cortinas suaves color crema ondearon con el viento y le alborotó el cabello rubio platinado.

El color rosa de la habitación la hacía verse mas morena, su rabia de mejillas sonrojadas y pelo enmarañado. La miró otra vez y resistió la ataque de ansiedad que amenazaba con hacerle trisas el estómago. El doctor había dicho que despertaría, que no tenía nada de qué preocuparse, lo cierto, es que estaba muy preocupado. Había pasado solo una hora cuando Jack llamó al doctor familiar de Helga alarmado. El doctor había dicho que se relajara, que ella despertaría, que ayudaría mucho el ponerle la inyección para que sus niveles de estrés se redujeran. Odiaba mucho drogarla, pero tenía que calmarla de alguna forma. Ahora yacía acostada en su cama matrimonial. Parecía dormida, tan tranquila... apenas llegó, la bajó del auto y la recostó en el sofá mientras hablaba con el doctor. Estaba preocupado, sí, pero no era la primera vez que pasaba. Ya tenían establecido un protocolo cuando cosas como esta pasaban. Sin embargo, no pasaban casi nunca. Helga era fuerte, debió haber pasado por niveles de estrés muy alto si provocó uno de sus ocasionales desmayos. Ya era el segundo en lo que va del mes. Y todo por ese estúpido Arnold. ¿Qué hacia el en el túnel del amor? ¿Por qué el destino era tan cruel con la rubia? Caer justo cuando el barco de Arnold y su hijo iban pasando...

Creyó que se le saldría el corazón cuando la vio tambalearse. Estaba seguro de que se aventaría tras ella si no fuera por ese viejo y entrometido encargado que lo detuvo. Se sentía culpable porque la había llevado a ese lugar, y la había expuesto de esa forma... de mirar a Arnold y a su hijo... No creyó que Arnold estaría en ese lugar, y mucho menos acompañado de un niño. Si bien la llegada de un bebe no es una desgracia, no creyó, sinceramente no creyó que Arnold se quedaría con él según las circunstancias. Pero eso fue su decisión y lo que decida hacer con su vida no le concierne, lo que sí le concierne es la salud de Helga.

Se lo había dejado claro a Arnold... se lo había dejado muy en claro... aléjate de Helga le había dicho. Su presencia le hace mal, sobre todo al verlo de la mano con ese niño. Debió de haber sido muy duro para ella soportar esos momentos con ambos allí. Respiró profundo tratando de aclarar sus ideas. No... no era un incomprensivo, probablemente Arnold también supuso que ellos no asistirían en ese lugar, por lo que sin ningún tapujo asistió... y todo hubiera salido bien si no se le haya ocurrido arrastrar a Helga al túnel del amor, o si la hubiera alcanzado cuando la vio caer, si se hubiera movido más rápido, o tomado con más firmeza. Ahora no sabía lo que haría cuando la dejase sola. Porque tendría que irse, eventualmente, tenía responsabilidades qué atender. Phoebe vendría a visitarla todos los días después del trabajo para revisar que se estuviera medicando correctamente, hablaría con ella, le haría compañía, Helga se había vuelto muy antisocial con los años. Pero ya no podría hacer nada, nada una vez que se fuera. Le preocupaba dejarla sola considerando que Arnold estaba cerca, no podría cuidarla... si ahora pasaba esto, que él estaba con ella... no quería ni imaginarse una vez que se fuera, como serían las cosas.

Las cosas se estaban poniendo muy, muy complicadas. Tendría que arreglarlas antes de irse.

Sintió la cama moverse. Rápido, giró su cabeza como un látigo. Los pálidos parpados de Helga se arrugaron para después abrirse con un parpadeo confundido. Sus labios se apretaron y soltaron un gruñido de molestia. Jack puso la mano en su hombro.

En Busca de una Familia (Corrigiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora