-¡¡Cris!! ¿Qué te pasa- dijo Andrea zarandeándome.
-Eh... Nada, nada- dije confusa secándome las lágrimas.
-Vamos, a mí no me engañas- dijo haciendo una mueca de enfado.
Resoplé y fuimos a la planta de arriba para que nadie más nos oyera. Le conté todo y se quedó flipando. Me estuvo aconsejado sobre qué hacer pero ni ella lo sabía.
-...creo que deberías de hablar con él y preguntarle si es verdad- continuaba Andrea mirando el mensaje de reojo.
-No sé... Pero me han jodido el cumpleaños tía- dije echándome las manos a la cabeza.
Me estremecí al escuchar vibrar el móvil igual que antes, miré a Andrea y ella cogió el móvil antes que yo. Suspiré al ver la cara de Andrea, me temía lo peor. Me puse las manos en la cara y me puse a llorar.
-¡Cris tranquila!- dijo Andrea dándome un golpe en el hombro- ¡Que no es Jesús!- concluyó.
-¿En serio?- dije esbozando una sonrisa.
-¡Sí! En el pensaje pone que se confundió de Cristina, pero no sé, es extraño- dijo Andrea haciendo una mueca.
En ese momento sonó la puerta y resoplamos las dos para aparentar tranquilidad. Escondí el móvil bajo mi almohada para que no sonara más.
-Chicas, ¿estáis bien?- dijo Jesús asomándose a la puerta.
-Sí tranquilo. Es que... Iba a darle el regalo a Cris- mintió Andrea.
-Ah vale, y... ¿Dónde está?- preguntó mirando a todos los lados sin encontrarlo.
-¡¡Vaya!!- dijo Andrea poniéndose las manos en la cabeza- Si se me ha olvidado abajo- concluyó.
-Qué despiste, ¿no?- dijo Jesús a carcajadas- Anda corre, que ya me quedo yo con Cris- dijo mirándome fijamente.
Andrea se levantó, me dio un beso y se fue a ''buscar el regalo''. Jesús se sentó conmigo en la cama y antes de irse, Andrea me guiñó el ojo. No pude evitar sonreír en silencio, pero Jesús lo notó. Me dió un beso en la frente y apoyé mi cabeza en su hombro.
-¿Te pasa algo?- preguntó jugueteando con mi pelo.
-No tranquilo, es que no he dormido muy bien- dije desganada- ¿Qué están haciendo abajo?
-Están echándose unas risas, pero yo no me podía reír pensando en por qué no estaba la fea de la cumpleañera- dijo sonriendo- ¿Quieres bajar?
-No- dije agarrándole la mano- Estoy muy bien aquí, contigo- concluí.
Noté cómo Jesús jugaba con la palma de mi mano, y luego me la agarró con fuerza.
-Quiero que sepas que por muchas cosas que pasen, siempre voy a estar aquí para todo, Cris. Te quiero más que a nada, joder- soltó.
Levanté la cabeza de su hombro y nos miramos el uno al otro fijamente, sonreímos los dos a la vez y creo que pensamos en lo mismo. Porque nuestros labios acabaron pegado el uno con el otro, intensamente.
-Te quiero, Jesús Oviedo.- susurré.
-Y yo a ti- dijo sonriendo.
Nos dimos un gran abrazo y nos tumbamos en mi cama. Pasó su brazo por mi hombro y yo apoyé mi cabeza en su pecho. Estuvimos hablando de todo, y nos reímos por todos los pósters de mis cantantes favoritos que había puesto en la habitación de su hermano, Juan Carlos.
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Serían ya las nueve de la noche y todos nos fuimos a dar una vuelta, después de todo lo que había pasado. Yo iba de la mano con Jesús, y Andrea y Dani iba muy juntitos, ¿habría algo entre ellos? Aunque también estaba con Marta muy juntito, vaya tío. Miri se fue a casa, ya que estuvieron en la piscina y cogió algo de frío, y Fati la acompañó por si se caía o algo parecido.
-Chicos, me han dicho Alex e Iván que quedemos con ellos- dijo Dani mirando el móvil.
-Me parece bien- dijo Jesús- ¿Tú quieres ir?- dijo mirándome y acariciándome la mejilla.
-Sí, sí quiere- dijo Marta riéndose- A ver si os despegáis un poco, tortolitos- ironizó.
La fulminé con la mirada y asentí. Llegamos donde habíamos quedado y ahí estaban Alex e Iván, unos amigos de la infancia de los gemelos. Me han hablado muchísimo de ellos pero la verdad es que nunca los he llegado a conocer.
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Aquí está el siguiente cap! Lo de siempre chicas, GRACIAS. Seguid comentando y votando. OS QUIERO GUAPETONAAS!!!
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Inolvidable (Gemeliers)
FanfictionCris es una chica de casi 14 años que va cada año a ver a su abuela a un pueblecillo de Sevilla, Mairena de Aljarafe. Enfrente viven dos chicos de su edad con los que ha estado desde pequeña, pero no se acordaba de ellos. Este verano marcará sus vid...