Buenas Noches

Día: Novilunio

Me senté en la mesa al lado de L.M , justo en el momento en que me senté escuché que abrieron la puerta, y después la cerraron.

-¿?: Hola amor ya llegué.

Era una voz grave la que hablaba, supuse que era la cabeza de la fama.

-Sra.: Hola amor,¿Cómo te fue?.

Después L.M se levanta a ayudar a su mamá con los platos, después de que terminó se sienta de nuevo la lado mío y empieza a mirarme, me sentía incómodo, el corazón me latía muy rápido, trataba de no mirarlo pero era imposible, solo lo miraba disimuladamente.

-L.M: ¿Nunca te presenté al chico de mi habitación, verdad?

En ese momento el chico que L.M había mencionado anteriormente hizo su aparición en el comedor.

-L.M: Bueno, Elieser él es Yegres, y Yegres él es Elieser.

Él chico solo se limitó a mirarme con superioridad, yo solo me limité a decirle un "Hola" en voz baja.

Apareció un señor en el comedor, al cual Elieser y L.M saludaron. Notó mi presencia y se extrañó la misma.

-Sr.: L.M, ¿Quién es él?

-L.M: Él es un amigo papá.

-Sr.: Mucho gusto, soy el padre de L.M

Extendió su mano para saludarme, hice lo mismo y solo me limité a agachar la cabeza y sonreír incómodamente.

-Sr.: ¿Desde cuándo se conocen? Poio

-L.M: Hace unos tres días, el estudia en mi colegio.

-Sr.: ¿Nunca habías mencionado a...?, ¿Cuál es tu nombre hijo?

-Yo: Yegres, Mi nombre es Yegres.

-Sr.: Interesante, ¿Ese no es un apellido?

-Yo: Realmente ese mi apellido, no me gusta que me llamen por mi nombre.

-Elieser: Así será de horrible tú nombre que no te gusta decirlo.

L.M que estaba al lado mío, le hizo una seña, no me importaba mucho lo que decía él, ya que no le prestaba atención.

La mamá de L.M sirvió la comida, yo empezé a comer mientras que los demás estaban hablando, estaba sumergido en mis pensamientos hasta que una pregunta me saco de ese trance.

-L.M: Mamá, ¿Yegres se puede quedar a dormir esta noche?

Vi como Elieser que están tomando agua se había ahogado con la misma,
yo abrí los ojos lo más que pude, ya que estaba muy sorprendido por aquella pregunta.

Sólo pensaba en que la señora dijera que no.

-Sra.: Bueno, sí su familia está de acuerdo, para mí no hay problema.

-L.M: Esa es la razón por la cual quería invitarlos a dormir aquí.

-Sr.: ¿Cómo así?

-L.M: Los padres de él, ellos están...

-Yo: Mis padres murieron.

Sentí como el ambiente se volvió pesado.

-Sra.: ¿Y quién está a cargo de tí?

-Yo: Mis abuelos pero ellos viven en otra ciudad y no quería mudarme con ellos así que, mis abuelos decidieron en alquilarme una casa.

-Sr.: Entonces, ¿Vives solo?

-Yo: Sí, llevo ya 3 años viviendo solo.

-Sra.: Y, ¿Cómo le haces para los gastos?

-Yo: Mis abuelos pagán los gastos del colegio y la casa, y me envían dinero mensualmente para la comida, más que mis padres me dejaron una cuenta con dinero y eso lo utilizo para emergencias.

Me sentía abrumado hablando de estas cosas, eran demasiadas preguntas.

-Sr.: Bueno, sí quieres quedarte eres bienvenido.

-Yo: Gracias.

-L.M: Entonces, ¿Te quedarás?

Me quedé en blanco por un momento no sabía que responder, después de unos segundos en ese estado involuntariamente dije sí.

Después de terminar los platos, el padre de L.M se despidió de nosotros y se fue a a costar a dormir.

La madre de L.M recogió los platos mientras que Elieser ayudaba a lavarlos.

L.M me agarró del brazo y me arrastró hacia el segundo piso de la casa, me dirigió hacia su cuarto.

-L.M: Tú vas a dormir en esta habitación, en la cama.

-Yo: Pero este es tú habitación, entonces, ¿Tú donde vas a dormir?

-L.M: Tranquilo yo voy a dormir en el sofá de la sala.

-Yo: Pero, yo puedo dormir ahí.

-L.M: De ninguna manera, tú eres la visita, así que vas a dormir aquí.

-Yo: Pero me sentiré incómodo.

-L.M: ¿Por que te vas a sentir incómodo?

-Yo: Es que siento que estoy invadiendo tú espacio.

-L.M: Bueno, sí en realidad no quieres que duerma en el sofá, puedo dormir aquí.

-Yo: ¿Cómo?

-L.M: Ya verás.

L.M salió de la habitación y yo me senté en la cama, mientras esperaba a que L.M regresara.

Después de un rato, apareció L.M con una bolsa para dormir.

-L.M: Voy a dormir en el suelo.

-Yo: Yo puedo dormir en la bolsa.

-L.M: Tranquilo, yo duermo aquí y punto.

-Yo: Okey.

En ese momento entra Elieser, a la habitación.

-Elieser: ¿Qué sucede?

-L.M: Nada, solo estábamos decidiendo quién dormiría en la cama y quién dormiría en la bolsa.

-Elieser: Por cierto, mañana estás ocupado en la tarde.

-L.M: No, ¿Por?

-Elieser: Mañana te digo.

-L.M: Okey, por cierto, ¿Te vas a quedar a dormir aquí?

-Elieser: No, esta noche no voy a dormir aquí, me quedaré un rato más y después me voy a mi casa.

-L.M: Bueno, tengo que traer unas cobijas y almohadas, así que cuida por un momento de Yegres.

-Elieser: Tranquilo, lo voy a cuidar bien.

Su tono era muy siniestro, tenía un presentimiento muy malo sobre esto.

L.M ya había salido de la habitación y Elieser solo se limitó a sentarse en el sofá, y hice lo mismo pero en la cama.

Él solo estaba ahí, revisando su teléfono.