Día: Gibosa Menguante

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[L.M]

Ya teníamos media hora caminando por el centro comercial y nada que nos conseguíamos con la tal Hilary, ya estaba cansado y me dolía la cabeza.

-Yegres: Hey, ¿Estas bien?

-Yo: No, me duele la cabeza.

-Alexa: Natt, ¿En dónde está Hilary?

-Natt: No sé, yo le escribí hace rato y me dijo que estaba en camino, pero no me ha respondido.

-Yegres: ¿Quieres descansar?

-Yo: Si.

-Gabi: Chicos, ¿Qué pasa por allá?

-Alexa: Vamos a averiguar.

-Gabi: Natt, ¿Nos vas a acompañar?

-Natt: Si.

Mientras que los demás se iban, yo y Yegres nos quedamos solos. Nos sentamos en unas mesas que estaba no muy lejos de nuestra posición actual.

-Yo: Yegres.

-Yegres: ¿Si?

-Yo: Me quiero ir.

Mi cabeza dolía demasiado, era un dolor palpitante.

-Yegres: No seas así.

-Yo: Quiero ir a casa.

-Yegres: Solo dices eso para ir a cogerme.

-Yo: ¿No lo puedes decir de una manera más sutil o sofisticada?

-Yegres: Okey, solo vas a querer introducir tu aparato reproductor por ano.

Aquellas palabras pudieron hacerme sonreír.

-Yo: Si eres subnormal.

-Yegres: Deja el fastidio.

-Gabi: ¡Yegresss!

Gabi se acerca corriendo hacia donde estábamos.

-Yegres: ¿Qué pasó?

-Gabi: A... Cos... Ta... Peleando.

-Yegres: ¿Qué quién está peleando qué?

-Gabi: ¡Acosta!

-Yegres: ¡Deja los gritos!

Mientras escuchaba a los amigos alzar la voz, el dolor de cabeza empeoraba.

-Gabi: Acosta está peleando.

-Yegres: ¿Cuál Acosta?

-Gabi: El del colegio.

-Yegres: No entiendo el porqué debería de interesarme eso

-Gabi: Pensé que te interesaba.

-Yegres: Me dejó de interesar cuando me mudé.

-Yo: ¿Quién es él?

Cierta curiosidad invadió mi ser y no pude evitar preguntar.

-Yegres: Es solo un ex-compañero de clases.

Solo asentí.

-Gabi: Por cierto, Hilary está por allá.

-Yegres: Guíame hacia ella.

Yegres me agarró del brazo y empezamos a caminar en dirección a donde se escuchaban varios gritos y había demasiada gente.

Entramos en esa multitud y de repente ya no siento la mano que me agarraba. Me había perdido entre la multitud, empecé a ver hacia todas la direcciones a ver si veía a Yegres, o alguna persona conocida.

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