Buenas Noches

Día: Cuarto Creciente

[L.M]

Estaba sentado al lado de Yegres en el autobús, mi corazón no paraba de latir, estar al lado del chico que te gusta no es fácil.

De repente siento un peso en mi hombro derecho.

Cuando volteo a ver el responsable de dicha sensación, era la cabeza de Yegres.

Su cabeza estaba en mi hombro, empecé a sudar como loco, mi corazón estaba acelerado.

Después de calmarme solo enrollé mi brazo alrededor su cabeza y pose mi mano en su cabello, acariciando cada mechón de su cabeza.

Me sentía como si estuviera en la novena nube.

Aunque hubieran sido 20 minutos de estar en esa posición con él, para mí fueron solo segundos, estábamos cerca de llegar al colegio.

Aunque no quería despertarlo y quedarme un poco más así tuve que hacerlo.

Acaricie su cara suavemente.

-Yo: Yegres, ya llegamos despierta.

Sus ojos se abrieron lentamente, su mirada se dirigió hacia mí.

Su mirada adormilada me hacía derretir.

-Yo: Quiero besarte.

Esas palabras salieron de mi boca involuntariamente.

Yegres se acercó lentamente hacia hasta quedar a pocos centímetros de distancia.

-Yegres: En tus sueños.

En ese momento, Yegres se levantó y se dirigió hacia la puerta, también hice el mismo gesto.

Después de bajarme del autobús no ví más a Yegres ni había rastro de su silueta.

[Y]

Estaba caminando por los pasillos, mientras pensaba en lo que había dicho L.M.

Esas palabras rebotaban en mi cabeza.

Después de estar deambulando por los pasillos revisé mi horario y me di cuenta que me tocaba educación física a primera hora.

Así que me fui corriendo hacia los casilleros, recogí mi ropa de educación física y me cambié en los vestidores.

Cuando encendí mi teléfono para ver la hora ya era tarde y me fui corriendo a la cancha.

Cuando entré todos los presentes voltearon hacía donde yo estaba.

-Profesor: ¡Yegres esta llegando tarde!

-Yo: Lo siento señor.

El profesor nos decía que no nos debíamos dirigir hacia él como profesor si no como señor.

-Profesor: ¿Cuántos minutos llevas de retraso?

-Yo: 15 minutos, señor.

-Profesor: Entonces, tendrás que dar 15 vueltas alrededor de la cancha.

-Yo: Pero..

-Profesor: Yegres, ¿Quiere que sean 20?

Después de correr alrededor de 20 minutos el profesor sonó el silbato.

Entonces me fui caminando a mi lugar.

-Profesor: Hoy haremos una competencia interna contra los de último año.

Así que salimos a la pista y vi que entre las personas de último año estaba L.M.

Él se dió cuenta que lo estaba mirando, y me guiño el ojo en ese momento sentí como mi piel se erizaba.