Solamente Tu

Capítulo 59

Salimos del baño después de otra ronda de sexo en la ducha. Pero es que bueno ¿cómo podría resistirme a ese sexy y caliente hombre?

Mientras Derek se cambiaba en el closet, yo me cambiaba en la habitación. Mi vestido era de color rojo, ajustado y en la parte del cuello traía unido a él un estilo de collar de perlas

Hermoso

Me hice una cola alta y sólo me hice unas ondas en las puntas. Cuando me estaba maquillando, escuché un silbido

—Vaya nena, te vez hermosa—llega hasta mí y me toma de la cintura. Lo observo por el espejo

—Gracias bebé. Tú te vez muy guapo. Me encanta verte tan elegante

—Gracias—ve su reloj y luego me sonríe—todavía tenemos tiempo y podríamos, ya sabes...—me guiña un ojo. Sonrío

—Acabamos de hacerlo hace poco

— ¿Eso es un sí?

—Eso es un no—bufa— ¿Quieres controlar tu libido?

—No puedo cuando mi novia es tan ardiente que con sólo verla, me calienta—termino de ponerme el labial y luego me pongo de pie

Derek me toma de la cintura y me acerca a el

—Por más que quiera quedarme aquí contigo y recibir la navidad en esa cama, desnuda y bajo tu increíble cuerpo...

—Si tu idea es que no me excite más de lo que ya estoy, vas por muy mal camino, hermosa–sonrío

—Como decía, nada me gustaría más, pero abajo hay invitados que nos están esperando para cenar y sería descortés no estar con ellos ¿no crees?

—Pero yo quiero comerte a ti—dice y pasa su nariz por mi mejilla haciéndome cosquillas

—Y lo harás, pero no ahora—bufa—sólo te voy a adelantar un poco, no llevo sujetador—susurro cerca de su oído. Su agarre en mi cintura se hace más fuerte

—Estás matándome

—Terminaré de alistarme

— ¿No obtendré nada? ¿Ni siquiera un beso?—le doy un beso en los labios

—Listo. Ahora déjame terminar de arreglarme—me siento de nuevo frente al tocador

—Bien, me voy—dice haciendo un puchero. Sonrío

***

Todo estaba saliendo de maravilla, todavía faltaban unas dos horas y media para la media noche

—No es por ser majadero Abi, pero tengo hambre, ¿A qué hora vamos a comer?—rodé mis ojos ante la insistente pregunta de Frank

—Como las otras tres veces que te respondí Frank, tenemos que esperar a que llegue Ethan. ¿Es que acaso no comiste en todo el día?

—No—dice y toma de su cerveza— ¿a qué hora se supone que llegará?

—No lo sé, tendría que estar llegando

—No entiendo porque tiene que ir a esa casa de todos modos, siempre viene mal de ahí

—Es cierto, pero sabes que no puede evitarlo, ahí está su mamá también—Derek y Ash llegan hasta nosotros. Los demás están en la sala charlando

—Sí, pero podría traerla acá y pasarla con nosotros

— ¿Están hablado de Ethan?—pregunta Ash abrazando a su esposo

—Sí

—Hablé hace poco con él, está a punto de llegar. Y no se escuchaba nada bien

Escuchamos la puerta abrirse y todos nos fijamos en Ethan. El entra sin percatarse de que todos los ojos están pendientes de él