Solamente Tu

Epílogo

Es increíble lo rápido que pasa el tiempo. Estamos a dos días de la boda. Dos días

Y mis nervios están incrementando conforme nos acercamos a la hora. Ahora sé lo que sentía Ash

Reviso la maleta por quinta vez y creo que llevo todo

La ceremonia la haremos en la casa de la playa. Siempre soñé con casarme en la playa y bueno mi futuro esposo en cuanto lo supo no dudó ni un segundo en que realizáramos la ceremonia y la recepción ahí

—Nena, ¿estás lista? Tenemos que ir saliendo—se asoma por la puerta

—Creo que si—observo de nuevo la maleta y al final suspiro y la cierro. Si se me olvidó algo, ya ni modo

Derek la toma y sale de la habitación, yo tomo mi bolso y lo sigo. Bajamos las escaleras

—Bien, despídete nena, no volveremos a ver esta casa hasta dentro de tres semanas—sonrío

—La voy a extrañar

Salimos de la casa y subimos a la camioneta

***

Llegamos unas dos horas después y ya estaban todas las cosas necesarias para la boda. Había gente corriendo de un lado a otro llevando mesas, sillas y todo lo necesario para la decoración

En cuánto bajamos del auto, Alan llegó a nosotros

—Abi, que gusto volver a verla

—El gusto es mío Alan

—No sabe la alegría que sentimos Rosie y yo al saber de su matrimonio y sobre todo saber que escogieron este lugar. De parte de Rosie y mía les deseamos toda la felicidad que sabemos que se merecen

—Eres muy amable Alan. Muchas gracias—Derek llega a mi lado y me abraza

—Muchas gracias Alan

—No hay de qué. De todo corazón les deseo lo mejor. Ahora les ayudaré a bajar las maletas—dice e inmediatamente se pone a ello

Yo tomo mi bolso y bajo a Peludo, se vino con nosotros ya que después de la boda Dana se lo llevará por los días que estaremos de luna de miel

***

Cuando nos hemos instalado y afuera han preparado el lugar donde se hará la ceremonia, la organizadora de bodas nos indica que bajemos

—Muy bien, ya que todos los que van a salir en el cortejo están aquí, vayamos afuera para poder proceder al ensayo

—Mamá ¿estás llorando?—camino hacia ella y enredo mi brazo con el de ella

—No—sorbe por su nariz. Sonrío

—Ha estado así durante toda la semana—responde papá

— ¡Es mi única hija Henry! ¿Cómo no voy a llorar?

—Mamá, no te pongas así

—Yo te entiendo Mary, yo también he estado muy sensible esta semana—se une Kathe

—No llores mami

— ¡No me digas así porque más lloro, Abi!—suelto una carcajada. Papá llega a su lado y la abraza

Siento los brazos de Ethan rodearme

—Hola Abilú—deja un sonoro beso en mi mejilla— ¿estás feliz?

—Creo que feliz no es la palabra correcta para describir lo que siento en este momento

— ¿Imaginabas que algún día estarías caminando hacia el altar y que al final estuviera esperándote el idiota de Derek?—golpeo su estómago con mi codo. Sonríe