Capítulo 37

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Después de lo de la mañana ninguno de los dos volvió a tocar el tema. Tal vez muchos pensarán que lo estoy tomando demasiado en serio. Pero es que es un tema para tomar demasiado en serio. Irse a vivir con tu pareja es un paso muy importante y sobre todo hay que pensarlo bien.

Porque he conocido parejas que al poco tiempo de formar una relación y se mudan juntos, todo cambia. Empiezan los celos, los problemas, querer controlar a la pareja y lo que menos quiero es que eso nos pase a nosotros

Amo demasiado a Derek y no soportaría terminar lo que después de tanto tiempo deseando, se vaya todo al carajo porque adelantamos los pasos

No voy a negar que quiero vivir con él, porque los días que me quedo en su casa y despertar el otro día en sus brazos, es la sensación más maravillosa que he experimentado. Pero también está la parte de sentirme libre, en el buen sentido de la palabra, en mi apartamento. En mi lugar, en mi espacio.

Sólo quiero hacer las cosas bien, quiero que los dos nos sintamos cómodos y que no forcemos nada

Termino de colocarme el bikini y por encima me pongo una salida de playa. Derek dijo que almorzaríamos y luego iríamos a conocer el lugar

Nena ¿estás lista?

Tomo mi bolso y salgo del baño

—Lista

—Bien. Ya Rosie tiene todo listo

Bajamos las escaleras y luego llegamos a la cocina—comeremos aquí ¿no hay problema?—me dice

—Para nada

Nos sentamos en el mesón y Rosie nos sirve la comida. Por Dios, todo huele y se ve delicioso. Comemos entre bromas de Derek a Rosie que la hacen sonrojar pero luego de un tiempo, sacó todos los trapos sucios de Derek en su infancia

—El que quebró esa ventana fue Mike. Yo me eché la culpa porque si descubrían que lo había hecho él de nuevo, no lo mandarían al campamento que quería ir—menciona Derek

—No puedo creer que haya hecho eso por su hermano. Ustedes Vivían en un puro pleito todo el tiempo. Me iban a volver loca

—Sí, fuimos difíciles mientras crecíamos, lo lamento Rosie

—No hay problema, ustedes siempre tuvieron demasiada energía. Se calmaron un poco cuando llegó la pequeña Dana. Ahora enfocaban sus energías en ella

—A mamá no le gustaba dejarnos solos con Dana. Siempre le pintábamos la cara con marcador permanente

—Dios Santo—susurro— ¿cómo fueron capaces de hacerle eso a su hermana? Yo lo más malo que le hice a Jason fue decirle que lo habíamos encontrado en la basura. Pasó llorando una semana entera—los dos ríen

Y así pasamos el resto del almuerzo hasta que terminamos

—Muchas gracias Rosie. Todo estuvo delicioso—le dice Derek y le da un beso en la frente. Es tierno verle ese lado con alguien más

—Gracias—me acerco hasta ella—ha sido un almuerzo delicioso. Y gracias por contar esas anécdotas de Derek, ahora puedo ver que no era tan bueno como me hacía creer—ríe

— ¡Ey! Yo me portaba bien, era Mike el de la mala influencia

—Ajá—decimos las dos

—Bien, será mejor que nos vayamos o Rosie te dirá de la vez que casi vendo a Mike a un vagabundo—alzo mis cejas

— ¿Qué hiciste qué?

—Nada, vámonos—me toma de la mano y me saca de la cocina

— ¡Rosie cuando regrese quiero que me cuentes esas historia!—grito mientras Derek me jala hacia afuera

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