- Charlie, te estoy diciendo que haré el turno mañana... Si, Si, no faltaré, necesito el dinero... Si, allí estaré. Adiós - Colgó la llamada y guardó el móvil en el bolsillo, estaba cansada, trabajar durante el día era agotador, pero hacerlo en la noche requería el doble de esfuerzo para no quedarse dormida, no lograba adaptarse al horario. Giró la llave y entró, suspiró y se permitió sonreír al ver quien estaba dentro de su hogar - Cabello... - Se acercó un poco a la chica que tenía pinta de recién levantada - Estás aquí - Caminó un poco hasta el borde de la cama para estar un poco más cerca de la morena - ¿Descansas el fin de semana?
- Buenos días - Saludó mientras se hacía una cola de caballo, el verano había empezado, hacía calor desde muy temprano en la mañana, atarse el cabello era una forma de lidiar con la temperatura - Lauren "Modales" Jauregui olvidó saludar - La ojiverde rio, le gustaba ese tipo de buen humor en la morena - Y no, ayer hice turno doble en la cafetería, así que, me puedo permitir descansar un poco hoy - Lauren asintió, dejó las bolsas con las compras en el pequeño sillón y se sentó en el borde de la cama, junto a Camila - Ya sabes... Para compensar lo del... ¿Qué día me enfermé?, ¿fue el martes?, porque estoy casi segura de que fue el martes, a no ser que fuese el miércoles, pero lo dudo - Habló pensativa, la ojiverde se mordió el labio, ese gesto le encantaba
- Amm... Fue el martes - Respondió tranquila mirando el perfil de la otra chica cubana en la habitación
- Lo sabía, Dinah está más perdida que yo. Debo saberlo para hacer el cambio en el horario de esta semana y, ya sabes, el pago - La mayor asintió y empezó a quitarse las zapatillas deportivas - Pero... ¿Cómo estás tan segura? - Preguntó una vez que sus miradas se encontraron
- Porque tengo muy presente el día que nos besamos - Sonrió, Camila repitió el gesto de manera más leve, después de todo, sus mejillas se habían ruborizado por la respuesta de la chica más alta - Besas muy bien - La tomó del mentón y lo levantó un poco para que la mirara, sabía que sus ojos contenían un encanto natural, a pesar de que el cansancio se apoderara de ellos justo ahora. Camila se permitió observarlos por primera vez con tanto detalle y estando tan cerca. Le encantaban, tanto como la chica que tenía enfrente - ¿Tomaste los demás medicamentos? - Preguntó y la acercó en un abrazo. Asintió un tanto perdida, la cercanía física que estaban experimentando se sentía levemente diferente ahora que no estaba bajo los efectos de la enfermedad - ¿Te sientes mejor? - Asintió de nuevo y se ocultó en su cuello, la paz que la rodeó acompañada del silencio a su alrededor hacían de este, el abrazo perfecto
- No había podido agradecértelo, no sé qué habría sido de mi sino hubieses llegado. Gracias - Suspiró y cerró los ojos - ¿Qué hay de ti? - Preguntó con suavidad - Debes estar muy cansada...
- Bastante si soy sincera - Suspiró
- Entiendo. ¿Quieres dormir? - Se separó un poco para ver la expresión de la pelinegra
- Si, contigo - La morena se sonrojó aún más - Es decir... - Dejó salir una risita, había entendido el doble sentido en su respuesta - Dormir de... Descansar. Es domingo y... No está demás que las dos descansemos un poco antes de seguir con todo mañana
- Es buena idea, me gustan los días en casa
- A mí me gustas tú - Soltó la verdad sobre cómo se sentía - Me gustas mucho en realidad - Camila sonrió, era reconfortante escuchar algo como eso viniendo de Lauren
- Tu también me gustas...
- Eso es bueno - Acarició su mejilla y dio un beso justo allí - Debo ir a ducharme y desayunar antes de dormir, no quiero descompensarme... Voy a la cocina - Se levantó para tomar las bolsas
- O, puedo ir yo mientras te duchas y luego comemos juntas - Le robó otra sonrisa - Eso sí, tú te encargas del almuerzo
- ¿Cómo una cita? - Dijo con humor, era bastante sencillo hacer que la morena se pusiera nerviosa
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Our Home (Camren)
FanfictionCamila es una mujer de 20 años, que básicamente, se parte el lomo trabajando para enviar dinero y así sostener a su familia en Cuba. La esperanza de los Cabello estaba depositada en ella, Estados Unidos y un empleo con un salario decente. Hoy, tres...