Our Home (Camren)

Capítulo 2

- ¿Cómo es eso de que estabas alquilando la mitad de tu habitación y ni siquiera lo mencionaste? - Preguntó casi enojada mientras se cruzaba de brazos y bloqueaba el paso a la morena en el pasillo

- Verónica - Bufó - Estoy cansada, déjame pasar - Casi ordenó

- No - Negó con la cabeza - Te hice una pregunta y no te dejaré pasar hasta que la respondas

- No tengo por qué hablar de mi vida privada contigo - Habló seria

- Se supone que somos amigas ¿Ya lo olvidaste? - Rodeó su cintura para acercarla más a su cuerpo - Además, me encantaría compartir la cama contigo, cariño - Sonrió

- No somos amigas, Iglesias... - De repente se puso nerviosa por la cercanía de la otra latina - Y... - Sus palabras se perdieron en al aire, Vero se acercó peligrosamente a sus labios

- Vamos... ¿Cuándo vas a aceptar que te gusto? - Dejó un beso en su mejilla, luego uno en la comisura de sus labios y uno en su cuello - No sigas jugando a hacerte la difícil - Susurró contra su piel. El teléfono en el bolsillo de la morena sonó, indicando una llamada entrante - Salvada por la campana - Se burló y se mordió el labio inferior mientras se alejaba y abría la puerta de su propia habitación - Te veo después, Camilita - Le guiñó el ojo y entró a su "hogar". Camila suspiró de forma sonora, odiaba que la asechara de esa forma, la vibración en su bolsillo la hizo regresar al mundo real, vio el nombre en la pantalla y contestó la llamada

- Hola, Ally - Empezó a caminar por el pasillo, estaba tan cansada que literalmente contaba los pasos para llegar a la puerta de su habitación - ¿Cómo va todo?

- Hola, Mila - La pequeña rubia se escuchaba muy alegre al otro lado de la línea - Todo está bien, gracias a Dios... Sé que debes estar cansada, son casi las 11:00 PM, pero te llamaba para darte algunos detalles de los cambios en tu habitación

- Oh cierto - Se golpeó la frente con la palma de la mano - Lo siento, lo olvidé por completo... ¿Cómo es que puedo olvidar que ahora voy a compartir la habitación con otra chica?... Porque es una chica ¿No, Ally? - La rubia rio

- Por supuesto que es una chica, Camila, nunca pensaría en meter un chico contigo en esa pequeña habitación - Rio más, Camila se sonrojó, que suerte que Ally no podía verla porque se habría burlado de ella - Además es cuestión de respeto hacia ti, por eso elegí una chica, aunque ahora que lo pienso, tuve que hacer varios filtros para elegirla

- Sabía que no meterías una psicópata en mi cuarto – Suspiro de alivio justo en el momento en el que abría la puerta y lanzaba sus cosas sobre el pequeño sillón - Y te agradezco por eso - Lanzó sus tenis a un rincón

- No me agradezcas, sabes que eres mi inquilina favorita - Camila sonrió, aquello era tan cierto - Y también que eres mi amiga, Mila

- Lo sé... – Sonrió por la empatía que le generaba la chica mayor - ¿Que ibas a decirme? - Se sentó en su cama empezando a cambiarse por el pijama

- Cierto... Amm... - ¿Estaba nerviosa? - La próxima semana se mudará a tu habitación la chica nueva

- Oh - Apenas habló - ¿Qué día?

- El lunes - Murmuró, la chica más joven abrió los ojos en sorpresa, pero aun así no dijo nada, como siempre

- Está bien - Ally suspiró tranquila, era consciente del cambio que esto representaba en la vida de Camila

- Llegará con sus cosas y en la noche estará instalada allí - La morena sólo murmuraban a forma de aceptación - No podré ir al edificio, ni esta semana, ni la siguiente, los turnos en el hospital son agotadores y no tengo tiempo suficiente para ir y hacer una presentación formal o algo así