Capítulo 23:

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Narra ___:


- Toma. - me da su móvil y respiro hondo. Ella contesta al segundo timbre. 

- ¿Diga? ¿Marcel? - pregunta ella. Joder, estoy nerviosa a más no poder.

- Ehh... Yo... - no me salen las palabras.

- ¿Marcel? - repitió ella. Mierda no puedo. Cuelgo el teléfono y miro a Marcel. 

- Eres retrasada. - me dice. 

- ¡Cállate! ¿Sabes lo duro que es hablar con tu madre después de lo ocurrido? El que debe hablar con ella eres tú, tú eres su hijo. Yo soy la psicóloga, nada más. Además, ¿qué le digo? ¿eh? Además, recuerda que... - me interrumpe.

- Eres insoportable, ¿lo sabías? - me sonríe.

- Yo no le veo la gracia, tonto. - me hace callar con un beso, corto pero tierno y alucinante. - no sé que hago contigo... - me hubiera gustado decirle eso y que se alejara de mí, que esto no estaba bien, que esto sólo empeorará las cosas; Me hubiera gustado decirle esto y mil cosas más, pero simplemente no lo hice, ¿por qué? porque no paraba de besarme. 

- Te quiero. - me dijo antes de volver a besarme profundamente.

- No... - esto no puede ser. Me quería separar de él pero sus besos me lo impedían. ¿A quién pretendo engañar? Amo estar así con él, amo que me diga esas cosas, lo amo. 

- ¿Sabes una cosa? Eres hermosa cuando piensas, pones una cara de preocupada, frunces el ceño y miras a la nada, es adorable, simplemente hermosa. Eres hermosa en todo momento. - Vale. Este niño quiere matarme.  - y eres hermosa cuando te sonrojas, también. 

- Cállate. - murmuro. Por favor soy una adulta y un niño menor de edad me hace sonrojar diciendo tonterías, si es que yo no aprendo. - Marcel... Yo soy una chica ya mayor, tengo trabajo y una vida. Tú eres un niño, en el colegio, con tu propia vida, que es muy dura. No debemos estar juntos, te lo dije antes y te lo repito ahora. 

- ___, dame una oportunidad. Merecerá la pena el esfuerzo que haremos. Hablaremos con mi madre, la vamos a convencer de que entre tú y yo no hay nada y cuando se lo crea, me darás una oportunidad. ¿Vale? ¿Te parece bien?

- ¿Qué?

- Llamamos a mi madre y le decimos que entre tú y yo no hay nada. Ella se lo cree y no sé, me das un mes de prueba para demostrarte cuanto te quiero. 

Me miró suplicante. No era mala idea... Yo quiero hacerlo... Pero esa parte de mí no le convence la idea... ¡A la mierda el lado racional! Antes de decirle que acepto su propuesta, quiero ponérselo difícil. 

- Ay, no sé... 

- Quiero hacerte feliz, quiero estar contigo... ¿Me dejas? Por favor. Nada me haría más feliz que eso. - me dice él. Dios mío, este crío es adorable. 

- Sí... - respondí. Nunca imaginé que una palabra, esa palabra tan corta, nos hiciera tan felices tanto a él como a mí.

Me sonrió de un modo que nunca había visto para luego volver a besarme como si se acabara el mundo. 

N/A:

HE VUELTOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOooooooooooooooooooooooooooooooOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOooooooooooooooooooooooooOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOoooooooooooooooo. Os estaréis preguntando qué tal mi viaje a la Luna. Pos mu' bien. Conocí a un alienígena, era muy majo. Os manda saludos a tod@s. Jeje, ahora en serio, Andalucía fue muuuuuuuuy bonito. En fin, ¿os gustó el capítulo? Si es así comenten y voten, chao, os amoooooo <3. 

Mi paciente. (Marcel y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora