Capítulo 24:

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Narra ___:

Llevábamos bastante tiempo besuqueándonos, hasta se nos había olvidado por completo lo de llamar a su madre. No hizo falta llamarla, pues fue ella quién lo hizo. Interrumpiendo un momento muy... eem... caliente.

- ¿Diga? - dice Marcel mientras le doy besos en el cuello. - ¡Oh! Hola mamá. - dice mirándome, me separo de él y le cojo el teléfono.

- Hola.

- Señora, soy ___, su hijo me ha informado de eso, y se lo juro, es una confusión, no hay nada entre  su hijo y yo. Sólo una buena relación de psicóloga y paciente. - miento. Seré psicóloga, pero me estoy volviendo un poco loca.

- Y yo voy y me lo creo. Claro. - dice ella. Ruedo los ojos.

- Pues debería, me ofende que piense que... - me interrumpe.

- ¡Pero os ví! No lo niegues.

- Viste un beso en la mejilla, nada más. ¡Cómo voy a besar yo a Marcel! ¡Es un niño! 

- Em... Puede que me confundiera... Estaba oscuro... - ¡Sí! ¡Se lo creyó!

- Claro. Cómo se le ocurre pensar eso, es que... - Marcel me mira ofendido y me pega suevemente en el brazo. - Además, su hijo no es de mi tipo. Yo tengo novio. - digo aguantándome la risa al ver la cara de Marcel. 

- No me cuente su vida... ¿Quién es su novio? - ¡Será cotilla!

- Pues... - a ver qué mierda se me ocurre... - es un chico... humano... 

- ¡No! Pensaba que estaba saliendo con una chica alienígena. ¡No me tome el pelo! 

- Es que no me salía la palabra. No es humano, o sea, sí lo es, tiene pene y todo eso... Me desvío del tema. me refería a que es muy humanitario. Es moreno, alto, vamos, está buenísimo. 

- No me dé más detalles, por favor. Páseme a mi hijo. 

- Vale. - le doy el teléfono a Marcel que me lanza una mirada asesina. He hablado de penes con su madre, ¡yo también me enfadaría! 

- Hola, madre... Sí... Ajá... Sí, es verdad, doy fé, cuando llegué a su casa estaba el novio con ella... Ajá... Que síííí... Gracias, ¿eh?... ¿Y a dónde voy?... Vale, te veo mañana... Adiós. 

- ¿Qué te ha dicho? - pregunto. Él eleva una ceja y se cruza de brazos.

- ¿Tiene pene? ¿En serio, ___, en serio? - pregunta, suspirando.

- Es que... ¿Tú tienes pene, no? 

- ¡No! - dice con sarcasmo. 

- Ah, pues qué lástima. Me iré con otro que tenga un buen pene. 

- ¡Eh! ¡Ni de broma! Tú eres mía. - dice sonriendo. 

- Ya, pero quiero un hombre con pene. - digo encogiéndome de hombros. Él se acerca a mí y se pone a hacerme cosquillas. - ¡Ay, para! - exclamo entre risas. Empiezo a quedarme sin aire. - ¡Marcel! - me sale la voz aguda. - ¡PARA YA! - me obedece. 

- Eso para que aprendas. - ruedo los ojos. - ¡No me ruedes los ojos! 

- ¡Sí, mi sargento! - él se ríe. 

- Bueno... Mi madre me dijo que me fuera a casa de Niall a dormir, que está enfadada conmigo. 

- Si quieres... puedes quedarte. - sugiero.

- No quiero molestar. 

- Tú siempre molestas, era por ser educada. - digo sonriendo. Él se levanta dejando sus intenciones claras. - ¡Vale, vale, me callo! - digo levantando las manos. No puedo con más cosquillas. - Quédate. 

- Em... Vale... 

- Lo pasaremos bien.

HOLAAAAAAAAAAAA. ¡Siento mucho la tardanza! Pero tuve 12345678910 exámenes, y no podía escribir. PERO SE ACABÓ TÓH. AAAAAAH MAÑANA ES MI ÚLTIMO DÍA DE CLASE, BIEEEEEN. Pues eso. Nananananana BATMAN. ¿Qué iba a decir yo? .. Ah, síp, que a lo mejor hay algo perver en el próximo, 1313... A LO MEJOR. No aseguro nada. Bueno, que eso, que voten, comenten. BESOOOS, PRECIOSIDADES <3<3. 

Mi paciente. (Marcel y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora