Self-destruction

¿Amigos?

Capítulo 14

-Entonces luego se aplica el teorema de Thales y despejan la ecuación para calcular el segmento incógnito.

El timbre anunció el término del día, suspiré con la mano totalmente acalambrada de tanto escribir, guardé mis cosas en la mochila y la colgué a mi hombro saliendo hacia la salida de la escuela.

Ayer había estado en mi casa durante todo el día, estaba agotada debido a los sucesos anteriores y más encima hoy tuve que evitar los intentos de Logan para que le explicará no sé qué mierda.

Mi teléfono vibró anunciando un mensaje entrante.

Adam:

Estoy afuera

-¡Simone!- Max me llamaba desde el otro lado del pasillo, corrió hacia mí y me detuvo.

-¿Qué quieres?

-Necesitamos hablar contigo- ¿Necesitamos? Una presencia en mi espalda me advirtió y al girar estaba la persona que menos deseaba ver hoy.

-Joder, déjame en paz.

-Valla yo también me alegro de verte- rodó los ojos, me di la vuelta y comencé a caminar nuevamente pero su mano en mi muñeca me lo impidió.

-¿No entiendes que no quiero verte o hablarte?- gruñí fastidiada, este imbécil me sacaba de mis casillas.

-Te dije que teníamos que hablar- estábamos montando un espectáculo, varios chicos y chicas se paraban a ver y cuchichear entre ellos.

-Te lo digo ahora y no lo volveré a repetir ¿entiendes?- lo mire directamente a los ojos- No tengo nada que hablar contigo idiota, no eres nadie en mi jodida vida.

Me sacudí de su agarre y salí caminado hecha una furia, empujando a algunos con mi hombro. La entrada estaba repleta de chicos que conversaban entre si y un grupo de chicas rodeaban a la motocicleta de Adam.

Putas.

Con paso decidido llegue al lugar y él me rodeó la cintura juntando nuestros cuerpos.

-¿Están esperando algo?- enarque una ceja a las chicas que me miraban con odio y confusión.

-¿Se conocen?- una chica de cabello castaño y bajita preguntó tímidamente.

-Créeme que si cariño, sino no tendría su mano ahí- señale la mano que acariciaba la parte desnuda que dejaba mi camiseta.

-Valla valla, Adam, es un placer verte aquí de nuevo.

-Stocker- gruño detrás de mí tensando su agarre.

Caleb junto con dos chicos más de aspecto rudo y llenos de tatuaje se acercaron a nosotros con actitud dominante y con la altanería saliendo de todos sus poros.

-¿Otra de tus putas? ¿Esta la compartes?- me miro de arriba a abajo y la sangre me comenzó a hervir, maldito hijo de su madre.

-¿Extrañas tu motocicleta imbécil?- su sonrisa se transformó en una mueca de desagrado.

-Te recomiendo cerrar la boca niña, pero te advierto, la recuperare sea como sea.

Cuanto desearía que con un tiro la vida de este idiota se acabara. Me acerque lo suficiente para que nuestros cuerpos se rozaran y lo mire con todo el odio acumulado del día.

-Te quiero ver intentarlo- me gire y estampé mis labios con los de Adam en un beso corto pero apasionado, monte en el asiento y agarrando su cintura salimos del lugar dejando a todos anonadados.