Inesperadamente ¿Tú?

Comenzando una relación

Odiaba total y completamente a Carol, toda la familia la conocía tal como era, excepto Randy, que se negaba a reconocer lo coqueta y descarada que podía llegar a ser, o quizás era que no le importaba, como bien había dicho antes, Randy no esperaba casarse con nadie, y aunque Carol era su novia hace dos años, lo único que buscaba de ella era el magnífico sexo que le proporcionaba según palabras del propio Randy, lo que parecía es que Carol siempre trataba de molestarme, la vez pasada cuando traje a Robert a conocer a mis padres, también trato de hacer lo mismo que con Mark, con la única diferencia que Robert había disfrutado de su coqueteo y no había hecho nada para detenerla.

Cuando Carol entro sola sin Randy al comedor supe el momento exacto en que visualizo a Mark, sus ojos brillaron con deseo y en su rostro apareció una sonrisa gatuna, cuando pidió que se lo presentara llego un momento en que me puse tensa, porque sabía que Carol era la típica mujer rubia, delgada y cabeza hueco como las que Mark se liaba siempre, y por primera vez sentí unos celos enormes, estos hicieron que yo lo presentara como mi novio, tratando de marcar mi territorio y que ella ni siquiera se le ocurriera tratar de metérsele por los ojos, pero como siempre a ella no le importo y se le ofreció descaradamente frente a todos, por un momento me imagine lanzándome por encima de la mesa, tomándola por el cuello y comenzar a estrangularla, podía imaginar a Glory gritando emocionada que la golpeara y le sacara los ojos por ver a mi hombre, papa y mama estarían sorprendidos y la abuela tratando de separarnos de una forma poco ortodoxa ya que su manera de separarnos era jalando a Carol por el cabello, pero antes de poder cumplir mi sueño de estrangularla, Mark tomo mi mano y muy caballerosamente le dijo vete al diablo, bueno no le dijo eso, pero como si lo hubiera hecho, me encanto como le dio a entender que yo era suficiente mujer para él y que no necesitaba nada más que a mí.

Sabía que a Mark no le pasaría por alto mi tono posesivo, es por eso que cuando nos quedamos solos en la habitación que estaría ocupando por esa noche no pude responder cuando me pregunto lo de haberlo presentado como mi novio, lo único que se me ocurrió fue salir huyendo de ahí. Cuando logre llegar a mi habitación cerré la puerta y me prepare para dormir, ya había pasado más de dos horas que había dejado a Mark pero no lograba dejar de pensar en todo lo que había ocurrido ese día y esto hacia que no pudiera dormir, además el saber que Mark se encontraba en el otro lado de la planta, hacía que mis hormonas estuvieran muy despiertas y excitadas, me levante y tome uno de mis tantos libros que tenía en mi antigua habitación tratando de que me ayudara a pensar en otra cosa y que esto me cansara y por fin pudiera dormir, no había pasado ni media hora desde comencé a leer, cuando escuche voces en el pasillo, me acerque a la puerta para ver si escuchaba lo que pasaba, pero como no lograba oír bien lo que decían ni reconocía quienes eran, abrí un poco la puerta solo para poder ver que era lo que pasaba.

—       Solo me dirigía al baño — pude ver a Mark explicando

—       Hijo, el baño lo tienes frente a tu puerta — Dijo mi papa — esta casa cuenta con varios baños, no solamente el que se encuentra frente la habitación de mi hija

—       Oh, es solo que cuando por la tarde mi limpie en ese baño deje mi cepillo de dientes ahí. — ah ah, muy débil su escusa Sr. Dinovik, estaba que me moría de risa por la situación en la que se encontraba Mark.

—       Si no recuerdo mal, mi mujer deja varios cepillos nuevos para cuando tenemos invitados, tal vez podrías utilizar uno de esos.

—       Pero…

—       Nada de peros ya es muy tarde por que no mejor te vas a dormir, hijo sabes que hace un tiempo yo también fui joven verdad — dijo mi papa — se lo que tratabas de hacer, estoy seguro que si vamos al cuarto de baño, tu cepillo de dientes no estará ahí.