La Oscuridad de la Luz. >HARRINGROVE<

capítulo once

Billy y Steve se acurrucaron en la cama y se cubrieron con las sábanas.

Steve colocó su cabeza en el pecho de Billy mientras que él tenía su mano en la espalda de Steve.

Sus respiraciones se sincronizaron en una y el ambiente se sentía cálido y agradable.

-Lo que te dije en la piscina va en serio.- soltó Billy.

-Lo sé, yo también hablaba en serio. Quiero casarme contigo Billy Hargrove y ser felices para siempre.- dijo Steve, mirando a Billy.

Billy le sonrió y lo abrazó más hacia él, besando el cabello de Steve.

Ambos se quedaron dormidos al mismo tiempo, con el latido de sus corazones en sincronía.

Al día siguiente Steve se despertó primero, quedándose sentado mirando lo hermoso que es Billy.
Acarició su cabello y dejó un beso en su frente.

Se dirigió al baño y se duchó rápidamente.
Se vistió y se arregló el cabello, quería verse bien para Billy.

Saliendo del baño vio que Billy aún seguía dormido y no quiso molestarlo, así que bajó hacia la cocina para lavar algunos platos.

Al llegar abajo escuchó golpes en la puerta, lo cual le pareció raro ya que sus papás no vendrían hasta dentro de dos semanas y no esperaba a nadie.

Se dirigió a abrir la puerta y se encontró con una gran sorpresa: Jonathan con un traje y peinado elegantemente, junto con un ramo de flores y una pequeña caja roja.

Steve hizo un gesto de sorpresa.

-Jonathan...¿qué haces aquí?- preguntó Steve, sintiendo una sensación rara en el estómago al verlo ahí.

-Vengo por ti, sé que estas confundido pero quiero recuperarte... Hagamos que lo que teníamos vuelva a florecer amor, sabes que estas confuso y te entiendo.- dijo Jonathan, acercándose más a la entrada.

-No... Jonathan, no estoy confundido, por favor no lo hagas más difícil.- respondió Steve, con tono suplicante.

Estaba apunto de cerrar la puerta pero Jonathan lo detuvo con su pie.

-Espera, no, déjame hablar, hablemos, sólo quiero eso.- Steve sintió aún más malestar en su estómago pero aceptó.

-Hablemos aquí afuera.- dijo Steve.

-No seas cruel.- respondió Jonathan con ojos suplicantes.

Steve sintió tristeza, aún se sentía culpable, así que lo dejo pasar.

-Esto es para ti.- le dijo Jonathan, ofreciéndole la caja y las flores.

Steve dudó, no debía recibirlas pero tampoco podía tratarlo tan mal.

-Gracias.-murmuró Steve, tomando lo que le dio Jonathan y llevando las flores a la cocina.

-Toma asiento.- dijo Steve lo más serio posible.

Se sentaron queda dando frente a frente.

-Jonathan, te pedí una disculpa y lo vuelvo a hacer: discúlpame. Pero no puedo cambiar mi opinión, estoy completamente seguro.

-Steve, no entiendo nada, trato pero me es imposible. ¿Por qué tomaste esa decisión? Pensé que estábamos bien. Pensé que me amabas...-se vio interrumpido por la voz de Steve.

-Basta Jonathan, no lo hagas más difícil para los dos... Sólo para.- dijo Steve, intentando no llorar.

Jonathan tomó las manos de Steve y las beso, esta vez ya estaba llorando.

-No Steve, mi amor, date tiempo para pensar en lo que estás haciendo. ¿Te acuerdas esa ves en la que fuimos a a acampar y nadamos en el mar? Juramos amarnos para siempre.

-Jonathan...- dijo Steve, fue lo único que pudo decir.

Jonathan se abalanzó hacia él y lo besó, Steve reaccionó pero era muy tarde.

-¿QUÉ MIERDA ESTA PASANDO AQUÍ?- se escuchó la voz de Billy desde las escaleras.

Ambos se levantaron rápidamente y observaron a Billy que sólo llevaba una toalla enredada a la cintura.

-¿Él estaba aquí?-dijo Jonathan, ofendido.- ¿pasaste la noche con él?

-Steve no tiene porque darte ninguna explicación, imbécil.- dijo Billy, acercándose amenazantemente.

-Cálmate Billy.-dijo Steve, colocando una mano en el pecho desnudo de Billy.

-¿Cómo quieres que me calme?-preguntó Billy, con sus facciones endurecidas y los puños cerrados.

-Quiero informarte algo.- dijo Jonathan, acercándose a Billy, desafiante.- Steve, mi Steve sólo esta confundido, es un romance fugaz. Él sabe que su vida y la mía están unidas por un lazo que nadie puede romper. No se compara con lo que "tienen" ustedes.

Billy cerró más los puños, provocando que sus nudillos se tornaran blancos.

-Cállate Jonathan, por favor retírate.- dijo Steve, nervioso.

-¿Por qué no lo niegas?- dijo Billy, con la mandíbula apretada.

-¿Es enserio, Billy? No, no me respondas. Tú también vete de mi casa. Si tanto te cuesta confiar en mi, largate.

Billy relajó sus facciones y trató tocar a Steve pero este se quitó.

-Te daré tiempo para pensar mi amor.- dijo Jonathan.

-¡DEJA DE LLAMARLO ASÍ! Te voy a romper la cara justo cuando salgamos de aquí porque respeto a Steve y no quiero hacer alboroto en su casa.

-¡YA BASTA! Jonathan veté de mi casa. Estoy con Billy y lo amo, lamento que esto terminará así...- las palabras de Steve se quedaron en el aire cuando un foco explotó. Billy cubrió a Steve.

Las luces comenzaron a parpadear. Steve y Jonathan se miraron al mismo tiempo.

-Oh no.- dijeron al unísono y Billy los miró, confundido y enojado.

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Hola chic@s, sólo quiero decirles que habrá trama de la primera y segunda temporada de ST. 💞

Todo el amor, Sandra.