Scorpius, el amigo paciente

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El ruido de los pasos de Albus rebotaba contra las paredes de una manera ruidosa y estridente. Todos se apartaban al verle con la mirada fría que poseía en aquellos momentos. Era perceptible que estaba molesto y nadie quería darle otra razón para estarlo.

Aunque claro, no todos pensaban lo mismo.

Antes de que pusiera la mano en la puerta del aula de Transformaciones alguien jaló de la manga de su túnica y lo estampó contra la pared.

-Scorpius- jadeó Potter, sintiendo como el aire volvía a sus pulmones. Los ojos de su amigo echaban chispas y una vena se marcaba en su frente. Estaba realmente molesto, incluso mucho más que él.

-¿Te divertiste haciendo ese teatrito?- preguntó con los dientes apretados mientras aferraba a Albus contra la pared con extrema fuerza- Por un leve momento me lo creí, te juro que me lo creí... pero luego vi tus ojos y lo que se ocultaba detrás de ellos...

-¿Qué se oculta detrás de mis ojos, Malfoy?- preguntó divertido, viendo como él lograba perder paciencia. Esa que tanto le caracterizaba.

-Estás dolido... Potter... dolido de que una chica pudiera olvidarte- contestó con sorna mientras le soltaba y caminaba dos pasos hacia atrás para poder hablar bien- Estás mucho más dolido de que esa chica haya sido tú genial Destiny.

-¡Estás loco, Scorpius!- gritó el azabache perdiendo el control- ¿Piensas que enserio me importa ella? ¿Por qué empezaría a gustarme ahora que tiene novio y me ha "olvidado" cuando antes ni siquiera era capaz de estar a solas con ella en un mismo lugar?

-No voy a dejar que juegues con ella, Albus- dijo desafiante, ignorando aquellas dolorosas palabras, mientras sus ojos jugaban un feroz cruce de miradas- Destiny Finnigan es muy importante para mí, es como si fuera mi hermana menor, así que no voy a permitir como sé que tú, si estuvieras dentro de tus cabales, harías.

-¿Qué te hace pensar que no lo estoy?- preguntó mientras avanzaba hacia él y clavaba sus esmeraldas en las platas de él.

-Esa mirada de loco que llevas- dijo alzando una ceja, como si empezar a numerar esas cosas le diera una satisfacción extrema- Te tiemblan las manos mientras estamos hablando y sé que, aunque no pueda verlo, tú lengua se está apretando contra la cara interna de tus dientes... estas nervioso, Albus, y eso es algo que si estuvieras dentro de tus cabales no pasaría.

-¿Entonces qué quieres que haga?- preguntó volteando, dándole la espalda- Si es que me conoces tanto como dices.

-Te conozco tanto como digo- reprochó corriendo hacia él para estar delante de su radar visual- Por eso te quiero ayudar, Albus.

-¿Ayudarme a qué?

-A que puedas estar con Destiny...

-¡Loco!- chilló agitando los brazos, saliendo completamente de sus cabales- ¡Eso es lo que estas!

-Potter...- suspiró comenzando a perder la paciencia nuevamente- Entiéndelo de una vez. No puedes soportar a los Scamender porque ambos están enamorados de nuestra Tiny. Bueno, más bien de tú Tiny. No puedes verles juntos porque los celos te carcomen...

-No me pasa nada de eso que estás diciendo... Me conozco mejor de lo que tú me conoces- despotricó, molesto- ¿Sabes? Si estuviera enamorado de Finnigan, yo estaría con ella.

-Yo no lo permitiría- ambos voltearon, encontrándose con Lysander viéndoles con el ceño fruncido. Por unos segundos, los tres estuvieron parados mirándose guardando el aliento- Amo a Destiny mucho más de lo que tú le quieres y no voy a permitir que nos separes. Estás loco si piensas que va a ser fácil.

-Ella me prefiere a mí- dijo Albus girando violentamente, encarando al otro rubio con su peor tono de voz posible- Me ama a mí...

-¿Sabes? No te creo- contestó, mientras un extraño brillo cruzaba su mirada- Puedo asegurarte que Destiny me prefiere a mí. Ella es mía...

Albus y Scorpius abrieron los ojos como platos enseguida al entender el doble significado de aquellas palabras.

-Mentira...

-No voy a discutir ese tema contigo- dijo entrecerrando los ojos- Pero quiero que lo tengas en claro, Potter... he esperado este momento desde el primer día que la vi, asustada mientras le ponían el sombrero seleccionador. La amé cada segundo durante más de seis años y ahora que puedo tenerle entre mis brazos, no voy a dejar que por un capricho tuyo vaya a perderle. La amo y sé que ella te ama a ti, pero con el tiempo aprenderá a olvidarte y solo serás una nube turbia del pasado.

Lysander sonrió orgulloso de haber podido decir aquellas cosas y siguió su camino airoso, bajo la mirada de todos los que estaban en aquel pasillo.

Scorpius caminó hasta Albus y colocó una mano sobre su hombro, antes de colocarse a su lado y sonreírle con cariño.

-Vamos Albus...

-¿Viste como me miró?- preguntó, mientras que con un rápido movimiento se deshacía de la mano de su amigo- Se piensa superior a mí, a nosotros. ¿Quién se cree que es?

-Estaba molesto, Potter, entiéndelo- susurró mirándole directo a los ojos. Aquella paciencia con la que tanto se le caracterizaba, había vuelto, finalmente lo había hecho.

-Estoy seguro que no sabía con quien estaba hablando- dijo, sacando su lado más arrogante. Sacudió su cabellera azabache y miró a su amigo- Él sabe que si quiero estar con Destiny y voy a decírselo, ella me dirá que si o se confundirá y tras un tiempo de negárselo, vendrá a mí. Porque me ama...

-Tanto tiempo tenias que tardar en darte cuenta- protestó molesto, mientras cruzaba los brazos.

- Ya, Scor...- dijo sonriendo de lado, golpeando al rubio en el hombro antes de que este le fulminara con la mirada- Vamos a clases, no quiero llegar tarde.

Adiós, Albus PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora