Repitiendo la historia

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-Estoy embarazada- los ojos de Albus, frente a ella, se abrieron tanto que Destiny sintió que podía verle hasta el punto más interior de su alma.

-¿Perdona?- Harry, quien leía El Profeta en la punta de la mesa, ladeó la cabeza y buscó alguna señal que indicase que era mentira, que había escuchado mal- ¿Estás diciendo que nuevamente...?

-Papá- James, quien tenía la cabeza enterrada entre sus brazos, alzó la frente unos centímetros para ver directamente al mayor de los azabaches- No lo digas nuevamente, siento que voy a enfermar.

-¡Chicos!- Ginny golpeó a los dos hombres y volteó a mirar a Destiny y a su hijo menor, quien miraba a la pelirroja con una mueca extraña en el rostro- ¿Estás segura, querida?

Destiny se sentía como si estuviera en su época estudiantil y eso fuera un reproche de sus familiares. Sus cálculos habían sido un poco imprecisos con algunas cosas en su vida, pero sabía muy bien que su organismo era un reloj perfectamente sincronizado y aunque aún estuviese dando el pecho, aquella mañana había tenido unos síntomas extraños, por lo que con una rápida prueba de embarazo dio con el resultado de su sorpresivo malestar.

-Si- Dest susurró, moviendo los pies incomoda al ver todos los ojos de los Potter posados en ella- Ya me he hecho las pruebas necesarias...

-¿Por qué no me avisaste?- Albus alzó una ceja en su dirección, tensando la mandibula.

-Porque no quería asustarte con esto- contestó apresuradamente, sabiendo que él se lo reprocharía luego. Aquella mañana jamás había imaginado aquel resultado y esa era la realidad del por qué de la noticia.

-¿Asustarme?- volvió a preguntar, profundizando el tono de voz.

-Sí, es que hace muy poco tiempo nosotros comenzamos a...- se detuvo abruptamente al ver las expresiones en el rostro de la familia Potter- Y sinceramente no esperaba que ese fuese el resultado- terminó de decir, encorvándose- Amy es muy pequeña aún.

-¡Voy a ser tía nuevamente!- Lily, como siempre, destacó  entre las reacciones de su familia y saltó a los brazos de Destiny, llenándola de besos y tocándole el vientre con total emoción. Ambas pelirrojas se miraron intensamente durante unos segundos, ya que no habían tenido aquella conexión la primera vez-  Hola bebé, soy tú tía Lily. Está vez estaré contigo todo el tiempo que estés ahí dentro, ¿vale?- murmuró, abrazando a Destiny por la cintura con cuidado, como si fuera a romperse o algo por el estilo.

-Bueno- Harry miró a su hijo y a su ahijada sucesivamente y luego sonrió- Felicitaciones. Me alegra mucho que vayan a tener otro bebé.

-A mí también- Ginny apretó la mano de su esposo y le guiñó un ojo a la pelirroja- Yo quiero que sea un niño, ¿vale? Porque quiero está vez un nieto.

-Mamá- reprochó Albus rodando los ojos y volteó, encontrándose con la asustada mirada de Destiny clavada en él. Sonrió, luego de unos infinitos segundos, y se estiró para besarle la punta de la nariz- Yo también estoy feliz de que vayamos tener otro bebé, amor.

"Me ha dicho amor"- pensó la pelirroja, comenzando a llorar mientras Albus le apoyaba la mano en la rodilla en su mayor gesto de amor frente a alguien. 

-Merlín, ya me está afectando- murmuró- O bueno, puede ser por las hormonas del otro embarazo, ¿quién sabrá?- agregó, y provoca la risa de todos en la mesa.

-James- Albus miró sobre su hombro a su hermano y este frunció el ceño- ¿Estás listo para ser el padrino de este bebé?

Destiny a su lado asintió emocionada. Ambos, sin haber hablando o siquiera tenerlo contemplado, sabían que él era quien debía quedarse con ese puesto.

Adiós, Albus PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora