✓ ReSeT ✓•KookGi•

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Jungkook

Unos días después de irme de casa Jimin vino a buscarme y me pidió perdón, hablamos durante mucho tiempo, pero para estar con él siempre estaba la misma condición, dejar a YoonGi. No me detuve a pensarlo y simplemente me negué, no podía abandonarlo. Sabiendo que no tenía más opciones pensé en pedir el divorcio, aunque antes de eso le ofrecí ir a terapia y no muy convencido acepto. Para mejorar la relación ambos tuvimos que ceder en algunas cosas, Jimin se disculpó con YoonGi y yo regrese a casa.

Con el paso de las semanas y siguiendo las estrictas recomendaciones del médico YoonGi comenzó a mostrar mejoría, su peso no aumentaba como queríamos, pero al menos su piel tenía un poco más de color. Tan rápido como pudimos empezamos a asistir a clases prenatales, mientras yo aprendía como cuidar al bebé a YoonGi le enseñaron que sucedería durante y después del parto, al ser su primer bebé siendo tan joven eran demasiadas cosas las que debían enseñarle, en algunas ocasiones podía ver su evidente miedo, pero aun así siguió con las clases con mucho entusiasmo.

YoonGi

Con cada día que pasa me siento un poco más fuerte, pero estoy terriblemente asustado pues, aunque había aumentado mi peso mi bebé aún era muy pequeño. Para tener un mejor panorama para el parto el medico decidió hacer una cesárea, el tiempo de parto sería menor y podría evitar el esfuerzo excesivo de mi cuerpo.

Como cada martes tenía que asistir a las clases prenatales, Jungkook siempre me acompañaba, pero Jimin insistió en salir con él y aunque lo intento no pudo decirle que no. Era terriblemente incomodo estar cerca cuando estaban juntos, Jimin intentaba intimidarme en cada oportunidad mientras que Jungkook hacia lo posible para cuidarme. Al llegar a las clases los instructores de la clase se mostraron curiosos al verme, todos los presentes estaban con su pareja y yo estaba solo.

Después de terminar la clase me sentí algunos malestares y no quise tomar un taxi para regresar, la casa no estaba lejos y el clima era agradable así que quise caminar para ver si eso me ayudaba a calmar los malestares. Mientras esperaba para cruzar la avenida sentí un gran dolor en el centro del vientre que me hizo doblarme y terminar de rodillas en el piso.

 Rápidamente la gente comenzó a juntarse a mi alrededor, unos preguntaban si estaba bien y otros gritaban para que alguien llamara a una ambulancia, no pude pronunciar una palabra el dolor era tan fuerte que ni siquiera podía respirar, coloqué mi mano sobre mi vientre intentando calmar el dolor y con la otra hice el intento de buscar dentro de mi bolsillo el celular que Jungkook me había dado.

La ambulancia llego en cuestión de minutos, me sentía demasiado débil para cuando me subieron a la camilla, no sé realmente cuanto tiempo tomó llegar al hospital, pero sentí que fue una eternidad, mi cuerpo estaba completamente entumecido de dolor, los escuché decir que tenían que sacar a mi bebé rápidamente y solo abracé mi vientre con miedo, no podía perder a mi bebé también.