✓ ReSeT ✓•KookGi•

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Hoseok

Esperé con ansias a que las clases terminaran, los profesores en más de una ocasión me llamaron la atención ya que no podía dejar de golpear mi pie contra el suelo. Repasé mil veces como podía invitarlo a salir. ¿Debía ser directo o ir paso a paso? No quería asustarlo.

Al sonar el timbre de salida di un salto que provoco risa en mis compañeros, había soñado demasiado. El aula de Taehyung quedaba al otro lado del corredor, quería esperar en la puerta para que pudiera verme en cuanto saliera, pero él caminaba alegremente junto a su amigo Min Jae, sin notar mi existencia. Lo sabía, se notaba a millas de distancia que Min Jae está interesado en Tae.

—Debemos irnos. —Dije cuando estuvo frente a mí y tomé su brazo suavemente para ponerlo cerca. —Nos vemos mañana. —Me despedí del chico que inmediatamente me miro con furia, aunque Tae parecía no darse cuenta de la situación.

Pasamos alrededor de dos horas en consulta, desde hace poco tiempo habían reducido las citas y ahora solo debíamos asistir un día por semana, espero que pronto ambos podamos dejar esto completamente atrás. Mientras salía del consultorio vi a Tae sentado en la sala de espera.

— ¿Saliste hace mucho? — Pregunté acariciando su cabeza.

—Hace 10 minutos. —Dijo con un puchero, se notaba cansado.

—Quiero que me acompañes a un lugar. — Tomé la mano de Tae y jalé un poco para levantarlo.

—Hyung dijo que nos quería en la casa temprano.

—Le pedí permiso a Jungkook y seguramente le dijo a YoonGi, no te preocupes.

Caminamos hasta un parque cercano a la casa y lo deje esperando mientras conseguía un par de helados de la tienda de conveniencia, mientras iba de regreso mis manos comenzaron a sudar, al estar a su lado le entregue su helado y me senté en la banca junto a él.

—¿Te pasa algo? —Colocó su mano en mi brazo.

—No. —Dije mientras movía la cabeza de un lado a otro, estaba demasiado nervioso y no podía, al menos hoy no decirle lo que siento.

—A mi si me pasa algo y me gustaría hablarlo contigo. —Dijo con voz seria dejando sobre la banca su helado.

— Dime. —Tae bajo la mirada.

—Hace poco comencé a notar algunas cosas, mi corazón se acelera sin ningún motivo por una persona y espero con ansias cada momento para poder estar con él. Me alegro al verlo, incluso sin que diga una palabra o algún gesto hacia mí. —En mi garganta se formó un nudo, no quería escucharlo más pues sabía que todo se trataba sobre Min Jae. —Quiero decirle, pero tengo miedo de que lo que siento nos arruine y no quiera estar nunca más junto a mí.

—Eso es imposible, cualquier persona que escuche esto sería incapaz de dejarte ir, eres maravilloso, no hay nada malo en ti. Eres perfecto. —Dije sin pensar.

—¿De verdad lo crees, estas seguro de tus palabras?

—Por supuesto. —Tomé su mano. —Vamos a casa, no quiero que se preocupen por nosotros.

—Espera. —Tae me sostuvo con fuerza para evitar que me levantara.

—¿Qué pasa? —Sus mejillas estaban un poco rojas y tenía una sonrisa sospechosa en su rostro.

—¿Como le diremos a mi hermano y a Jungkook? —Giré un poco el rostro sin entender, él quería que yo hablara con ellos, sobre sus sentimientos por Min Jae.

—No puedo ayudarte con eso, debes decirle cuando estes listo, estoy seguro de que se sentirán felices por ti. —Tae me dio un puño en el brazo. —¡Pero que estás haciendo! —Grité de dolor, no era suficiente restregarme su amor por Min Jae, ahora también me golpea.

—¿Planeas que yo solo les diga que somos novios? Eres un cobarde. — Me quede paralizado, mis labios temblaron y Tae volvió a golpearme solo que un poco más suave. —Me gustas tú. —Dijo acercándose a mi rostro. — Y estoy casi seguro de que tu sientes lo mismo, así que no. —Antes de que pudiera terminar y sin decir nada aproveche la cercanía para besar sus labios.