El Poder Del Lobo

ASESINATO

-¡Señor! Alfa...- Un joven vampiro encargado de patrullar los alrededores de el castillo entra muy agitado y busca desesperadamente a Abel.

-Wow wow wow cálmate un segundo dime... ¿Qué sucede?.- Abel acompañado de su esclava Diana llegaron con el joven chupa sangre.

-Señor... Tiene que ver algo... Es muy importante.- El joven vampiro comenzó a comenzó a caminar a la entrada de el castillo acompañado por Abel, Diana y algunos guardias por seguridad de el Alfa supremo

Cuando Abel llegó a la entrada, una vez que se abrieron las puertas frente a él, en el suelo estaba el cadáver de uno de los guardias, estaba con su ropa completamente desgarrada con heridas muy profundas en todo el cuerpo, sus ojos seguían abiertos, estaba completamente lleno de sangre y dejo manchas de sangre en el piso de la entrada al castillo.

-Por la Diosa Luna...- Abel se acercó al cadáver sin poder creerlo, cerró los ojos de el guardia y se puso de pie nuevamente.

-Que alguien traiga a Mondred... Ahora...- Abel hablo intentando lo más que podía que no se notará el enojo de su voz.

-De inmediato señor.

No paso mucho tiempo antes de que el hechicero llegará a la escena y teniendo la misma reacción que Abel se acercó al difunto guardia y puso sus manos en su frente, trato de usar sus poderes para entrar en la mente de las personas pero no pudo ver nada, ya no había una mente que ver.

-No puedo acceder a sus memorias... Lleva muerto más de 6 horas.... Mira sus heridas.- El hechicero levanta el rostro de el guardia, deja al descubierto su cuello donde se notan varias heridas.- Parece que fue estrangulado.

-Eso es imposible.- Abel lo interrumpió.- El era un hombre lobo, cualquier herida que tuviese el debería de haber sanado.

-Debería de haberlo echo... Amenos...- Mondred rápidamente se fijo en las manos de el guardia, en donde había unas muy profundas y notorias heridas en ambas muñecas.- Estás marcas parecen de las esposas que les ponemos a los priscioneros sobrenaturales para quitarles sus poderes.... Tal parece que se las pusieron muy apretadas.... Le quitaron sus poderes y... Lo estrangularon... Sin sus poderes claramente no pudo sanar... Pero parece que el asesino no solo quería matarlo... Siguió golpeándolo hasta que se cansó y por eso son el resto de las heridas... Quien haya hecho esto... Sabe muy bien lo que hace...

-Quien haya hecho esto.... Estará muerto apenas descubramos quien es... Asegúrese de que esté hombre lobo reciba un funeral apropiado... Esperemos que la Diosa Luna lo reciba en el bosque sagrado....

Todos los guardias tuvieron un minuto de silencio en señal de respeto ah su compañero caído mientras juraban encontrar a su asesino, para un hombre lobo sus lazos de hermandad y de amistad con sus compañeros de manada son mucho más fuertes que los de los humanos, todos se quieren, respetan y protegen entre todos, como si todos fuesen una gigantesca familia muy unida, algunos guardias intentaron encontrar el rastro de el asesino pero no hubo manera, no encontraron a ningún testigo, ni había algún olor fuera de lo ordinario en la escena, tampoco los hechiceros pudieron ayudar en lo más mínimo.

-¿Hay avances con respecto al guardia asesinado?.- Abel pregunto algo molesto.

-Lamento decirle que no ah habido manera de rastrear al asesino Alfa...- Kevin estaba apenado por sus esfuerzos en vano, sin embargo el ya tenía una teoría.

-Esto no parece algo sobrenatural... Un hombre lobo lo habría devorado, un vampiro le habría drenado la sangre, un hechicero hubiese usado su cuerpo para alguna opción...- Mondred estaba opinando mientras caminaba por la oficina confundido

-Tal vez alguien lo mató solo por diversión.

-No lo creo.- Abel se levantó de su silla.- Además recuerden las heridas... Su cuello estaba roto... Y tenía marcas en el cuello... Revise y confirme que corresponden con las cadenas de las esclavas... Parece que lo ahorcaron con ellas.

-¿Crees que fue una de las esclavas?

-Creo que debemos vigilar más de cerca a las humanas... Ellas no tienen acceso a la habitación donde estaban las esposas... Si de verdad fue alguna de las esclavas... Recibió ayuda.

El día pasó, nadie pudo avanzar en la investigación más que formular diversas teorías sobre quién pudo asesinar al guardia de el castillo, al caer la noche, Diana fue llevada a su celda para pasar la noche junto con el resto de las esclavas, esta vez, fueron llevadas bajo la supervisión de algunos guardias por órdenes de el Alfa.

-¡Auu!.- Diana Chillo al sentir los grilletes más apretados que antes sobre sus muñecas.

-Lo lamento... Son órdenes de el alfa supremo.- El guardia que la estaba encadenando bajo un poco la cabeza.

-¿Porque te disculpas con ella?... Es solo una esclava.

-Tienes razón...- El guardia empezó a acariciar el cuerpo de Diana mientras ella empezaba a retorcerse negando.- Ella es solo una esclava.

-No... Por favor... ¡No!.- La esclava encadenada se retorcía tratando de alejar a el guardia pero todos sus intentos eran en vano.

-¡Oye!.- El guardia que estaba a su lado lo sujeto por brazo y lo alejó bruscamente de ella.- Solo su amo tiene el derecho de tocarla... Y su amo es el Alfa supremo... Si no quieres perder tu cabeza... Será mejor irnos.

-Que aguafiestas eres.

Ambos guardias salieron de los calabozos una vez que terminaron de encadenar a el resto de las esclavas, Diana miraba con odio y desprecio a los guardias a medida que estos avanzaban fuera de las celdas, una vez que por fin se habían ido, la mirada de ira en el rostro de la humana de transformó en una mirada de satisfacción, empezó a retorcer sus brazos intentando que sus manos llegarán a sus pechos, debido a las cadenas tuvo que esforzarse mucho pero finalmente logró sacar la llave que el guardia había escondido en sus ropas mediante el manoseo, una sonrisa de victoria se dibujó en sus labios, uso sus dientes para sujetar la llave y con dificultades logró abrir los grilletes que la mantenían encadenada.

-Es hora de empezar la siguiente parte de el plan.- William, el guardia que había escondido la llave en la ropa de Diana durante el manoseo, ya estaba afuera de la ventana de su celda, listo para ayudarla a escapar.

-Vamos a matar a la madre de el Alfa supremo... Como el asesino a la mía