Una diferente hija de Hypnos (Nico di Angelo y tú)

Capítulo 25

*_________ POV*

-_______. Despierta- Canturreó una voz.

-Ahora no, Hazel. Déjame dormir- Me quejé acomodandome mejor en la cama. Después de unos segundos, reaccioné- ¿Hazel?- Pregunté retirando la manta de mi cuerpo y recargando mi espalda en el respaldo.

-Feliz cumpleaños a ti, feliz cumpleaños querida _______, feliz cumpleaños a ti- Cantó dulcemente- Pide un deseo- Sonrió viendo el pastel que posaba en sus manos.

Tras pensarlo un poco, asentí-Listo- Anuncié.

-Ahora sopla la velas del pastel-

-Hazel, es un mensaje Iris, no va a funcionar- Sonreí enternecida ante su idea.

-Shh, no seas pesimista en tu cumpleaños, ten fe-

-De acuerdo- Accedí haciendo lo que me pidió.

-¿Ves? Se apagaron- Señaló viendo el pastel.

-Claro- Reí- Ahora, ¿Podrías decirle a Frank que ya puede pararse y dejar de solpar las velas?-

-Arriba, Frank- Murmuró Hazel.

-Feliz cumpleaños- Sonrió incómodo el chico- Se suponía que iba a ser mágico el que tu soplaras las velas y se apagaran pero, me descubriste. Aun así espero que hoy sea un gran día para ti- Concluyó.

-Gracias, Franky- Sonreí.

-Lamentamos no estar contigo hoy en este día tan especial- Suspiró Hazel- Es el primer cumpleaños que no pasamos juntas desde que nos conocimos- Murmuró.

-Hazzy, está bien- Asentí- Talvez el próximo será. No pasará nada malo. Tranquila-

-Eso creo. De igual manera, Frank y yo hicimos algo para ti. Creo que te gustará, y sino, podemos regalarte otra cosa o incluso...-

-Lo que sea que Frank y tu me obsequien, estoy segura de que me encantará-

-Bueno, en ese caso, este es tu regalo- Dijo Frank extendiendo una caja rectangular frente a el.

-Uh, Frank. No puedo abrirlo- Reí.

-Ah, claro- Asintió sonrojado- Yo... lo abriré por ti- Murmuró entendiendo.

Lentamente fue abriendo la parte frontal mostrando una daga plateada.

-Es hermosa- Balbuceé sorprendida.

-¡Lo sé!- Chilló Hazel- Aunque no es solo un presente de nosotros. Thanatos nos ayudó un poco. Está bañada en el Rio Lete. Así que no podemos tocarla o perderemos un poco de nuestra memoria. Solo tu puedes hacerlo sin que eso pase-

-Es increíble. Estoy realmente agradecida-

-Ni lo digas- Sonrió la rizada.

-Pff, no fue nada. Solo ir al Inframundo y ya- Respondió el hijo de Marte viendo distraídamente sus uñas.

-Apuesto a que morías de miedo- Me burlé.