Una diferente hija de Hypnos (Nico di Angelo y tú)

Capítulo 37

*________ POV*

-Un bello sueño para un encuentro, ¿No crees?- Habló una voz detrás de mi.

-Lo era hasta que apareciste. ¿Quién eres?- Pregunté encarandolo.

-¿No reconoces a uno de tus hermanos? ¿Ni siquiera por mi aura?-

-Ah, ya entendí- Asentí- Eres uno de los mil bastardos-

-¿Disculpa?-

-También se les llama "hijos" para no herir-

-Lo divertido es que tu fuiste verdaderamente planeada y eres la que peor relación lleva con padre, o bueno, eso se supone-

-Lo improvisto suele ser mejor que lo planeado. Incluyendo el tener hijos- Admití.

-Algunas veces- Asintió- ¿Sabes? Eres muy singular sin duda- Murmuró dando vueltas a mi alrededor.

-Y tú muy idiota. Te marearás si sigues así- Advertí.

-Es agradable tu preocupación, hermana semidiosa- Sonrió- Pero soy un dios-

-¿Y? ¿Solo por eso crees que no vomitarás?- Pregunté burlona- Creo que te sorprendería la cantidad de veces que Apolo y Eros han aparecido ebrios en mis sueños en las cuales, terminan vomitando-

-Créeme que lo sé-

-Déjame adivinar, ¿Eres otro idiota que me acosa?-

-No soy Di Angelo, Hypnos o los inútiles dioses que creen tener oportunidad contigo. Yo solo tenía curiosidad en ti. Eres la única chica en un largo legado dónde dominaban los hombres. En un inicio, las expectativas que se tenían de ti, eran realmente bajas a decir verdad-

-Wow, enserio era algo que me preguntaba, yo… te juro que no podía dormir por la preocupación, pero gracias-

-Ahora sé porque Momo te adora- Rió levemente.

-¿Esto llegará a algún lado?-

-Los oniros…-

-Los otros novecientos noventa y nueve bastardos-

-¿Sabes? Al ser familia, no me está permitido abofeterte por tu insolencia, pero sino lo fuéramos…-

-Sino lo fuéramos ten por seguro que no lo harías. Claro, a menos que desees pasar tu eternidad en lo mas oscuro del Tártaro mientras eres castigado por tu estupidez- Espeté.

-Tienes tanta suerte de ser querida por los dioses- Susurró con la mandíbula tensa.

-¿Qué te digo? Es mi don- Reí burlonamente.

-Eso no te servirá de nada. Malos augurios se presentarán ante ti. Esperaba darte la respuesta a esto pero ahora prefiero ver cómo sufrirás-

-Aww, ¿Y no hay un consejo por ser tu hermana menor? Recuerda que en mi cumpleaños no obtuve nada de tu parte- Reproché infantilmente.

-Has ganado tanto odio, que inclusive nuestra propia familia podría darte caza. Recuerdalo, no todos están de tu lado. Aunque no seas culpable de lo que se te acusa, querrá verte morir. Sufrir. Verte aniquilada. Que termines sin vida-

-¿Enserio me odias tan rápido?-

-Yo no soy de quién hablaba y no te odio, mis oniros tampoco. Pero hay alguien que si lo hace. Tienes que cuidarte. Sería gratificante tener otra conversación después, claro, si es que sales con vida- Murmuró.