Una diferente hija de Hypnos (Nico di Angelo y tú)

Capítulo 38

*________ POV*

-Me pregunto que dios me visitará esta noche- Bufé.

-Solo seré yo y mi tiempo será breve-

-¿Zeus?-

-_________, un gusto verte de nuevo- Murmuró.

-Claro... ¿Qué haces aquí?-

-¿En tus sueños?-

-Exacto- Asentí.

-¿No podía solo visitar a la "hija adoptiva" de esposa?-

-No. Siempre quieres algo. ¿Qué sucede?-

-Aunque no lo creas, esta vez no estoy para pedirte algo. Mas bien vengo a dartelo-

-¿Qué me darás?- Cuestioné curiosa.

-Un don-

-¿Don?-

-Mas bien es una ayuda. O habilidad-

-Creo que no estoy comprendiendo-

-No tienes que hacerlo. Solo tienes que saber que será de gran ayuda para ti. Espero que lo sepas utilizar, sino es que mueres antes-

-Que alentador- Ironicé.

-Como siempre- Sonrió de lado.

-¿Por qué lo haces? No contestes eso, mejor replantearé mi pregunta- Carraspeé- ¿Quién te está obligando?-

-Hera- Respondió desapareciendo.

💤💤💤

-Por favor que esto no se haga costumbre- Murmuré abriendo los ojos.

Un pequeño cosquilleo en mis estómago hizo que bajara la vista. Dominik se encontraba en el, viendome confundido.

-Hey- Susurré tocando levemente la punta de su nariz- ¿Tienes hambre, Dom?-

Un pequeño asentamiento de su parte indicó que lo estaba.

-Si fuera mortal, creería que estás poseído- Sonreí para después, respirar profundamente -BRUNO, LA RATA TIENE HAMBRE- Grité tomando el reloj de mi mesita de noche y tirandolo a su cama.

Un agudo lloriqueó se escuchó rápidamente.

-Creo que me rompiste una costilla- Chilló.

-¡Gané!- Aplaudió Clovis.

-Maldición- Se quejó James yendo a uno de sus cajones y tendiendole veinte billetes a Clovis- La próxima vez trata de darle en la cabeza- Protestó en mi dirección, frunciendo el ceño.

-¿Apostaron en dónde me golpearía?- Chilló Bruno sobando su tórax.

-No solo nosotros, los dioses también lo hicieron- Respondió James- Así que el día de hoy, ganaron Tyche, Ares, Artemisa, Momo y Nike-

-Sino fuese tan hermoso, creería que me odian- Respondió.

-Si, seguro. Tienes razón- Rió Clovis.

-¿Vas a alimentar a la rata o no?- Inquirí interrumpiendo.

-Creí que ya habías pasado por la etapa en la que lo llamabas rata- Bufó extendiendole comida a Dominik.