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Abro los ojos a una fría mañana de otoño. Se empieza a notar el frío. Miro la hora en el despertador. Las 6:30. Me arropo un poco más con la colcha. Estoy muy a gusto. Me falta Ana.
Cojo el movil para enviarle un mensaje y veo que tengo muchas llamadas. De Mia, de Elliot y de mi madre y también de Elena. Y mensajes.

De: Elliot Grey.
Para: Christian Grey.

Tío, vuelve a casa. Mamá está preocupada. No le hagas caso a papá. Se le pasará.

De: Mia Grey
Para: Christian Grey.

Hermanito, vuelve por favor. ¿Dónde estás? Estamos preocupados.

De: Elena Lincoln
Para: Christian Grey

Mi rey, no te enfades conmigo. Sólo quiero ayudarte. Llámame.

De: Grace Grey
Para: Christian Grey

Cariño, cógeme el teléfono, por favor. ¿Dónde estás? Estoy muy preocupada. Vuelve, por favor.

La llamo y lo coge antes que de el primer tono.

—Hijo, iba a llamarte ahora mismo. ¿Dónde estás, Christian? Me as tenido toda la noche en vela.
Suspiro.

—Lo siento mucho mamá. No quería preocuparte. Me quedé sin batería.

—Cariño, vuelve a casa.

—Ya escuchaste a papá. Si no hago lo que el quiere, tengo que buscarme la vida.

—Cariño.—solloza. No me gusta verla mal, pero si ella me hubiese defendido...—Christian solo queremos lo mejor para ti.

—Lo sé, mamá pero yo ya he tomado una decisión. No os obligo a que la compartáis, pero es que tampoco queréis entenderla y apoyarme que es lo que papá hizo con Elliot cuando le dijo que no quería ir a la universidad. Yo tomé una decisión y vosotros tomasteis otra, ahora solo queda afrontar nuestros actos.

—Hijo yo no quiero que te vayas de casa.

—¿Y porqué no se lo dijiste a papá?—le digo intentando contener mi enfado.—¿Porqué no le dijiste que también es tu casa, que también es tu dinero, que soy tu hijo y le plantaste cara?—oigo su sollozo y respiro hondo para calmarme.—Lo siento mamá. No quiero descargar mi mal humor contigo. Estoy bien, no te preocupes por mi. De verdad.

—Por lo menos dime dónde estás. Prometo no decírselo a tu padre ni a nadie.—la creo.

—Estoy en un piso de Ana. En la avenida Third Bird. Voy a quedarme aquí, mamá. Puedes venir a verme cuando quieras. Pero no le digas nada, ni a papá, ni a Elliot. Y mucho menos les hables de Ana.

—Esta bien, cariño. Cómo tu digas. Iré a verte con Mía en cuanto las cosas se calmen. Llámame por favor. Voy a estar muy preocupada por ti.

—Lo haré, mamá. Hablaremos tan a menudo como pueda.—siento que sonríe.—Si quieres, ¿podemos quedar en algún sitio para comer mañana? Mientras papá esta en los juzgados.

—Claro, cariño. Me encantaría. Haré una reserva en Picadilly. Sé que te encanta.

—Genial. Nos vemos mañana. Te quiero mamá.

—Y yo también, cariño.

Cuelgo más calmado y contento de haber tranquilizado a mi madre. Le mando un mensaje a mi chica.

De: Christian Grey
Para: Anastasia Steele

Buenos días, nena.
Mi despertar no volverá a ser el mismo desde que no tengo a mi lado. Echo de menos tu preciosa sonrisa.
Te amo.

Mi gran Amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora