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CAPITULO 50

Tras otra media hora llegamos a una pequeña ciudad. Estacionamos el auto y comenzamos a caminar. Se me hacía muy conocido los lugares por donde pasábamos

- ¿Tu padre biológico se llamaba John? – negó con la cabeza

- Es muy complicado decirlo, así que escucha atentamente, yo vivía con mi madre, mi padre y mi hermano. Vivíamos bien, éramos como la familia modelo de un cuento. Era noche buena, tuvimos una cena, jugamos y bailamos, para ese entonces yo tenía unos seis años

* Doce años atrás *

- Estuvo muy divertida la cena ¿no lo crees Luka?

- Sí, tenía ganas de prender más luces de bengalas

- Yo igual – Bostezó – Ya dormiré, hasta mañana Luka

- Hasta mañana John

- Pts... John, despierta – Luka movió a su hermano

- ¿Qué pasa? ¿Ya llegó Santa Claus? – preguntó adormilado

- John hay que prender la chimenea

- No, nos regañarán – susurró

- Ya están durmiendo, ven – ambos bajaron a la primera planta con mucho cuidado para no despertar a sus padres

- ¿Estás seguro que con eso prenderá?

- Sí, la otra vez vi a papá hacerlo.... No puedo destapar esto – forcejeo intentando sacar la tapadera de la botella, y cuando lo logró regó alcohol en el piso, posteriormente le hecho alcohol a la leña

- Luka ¿No crees que es peligroso? Santa Claus puede llegar en cualquier momento, mejor hay que irnos a dormir

- ¡Ya prendió!

- ¡Aah! – Gritaron los pequeños cuando el fuego se extendió a los lugares donde había alcohol regado

- Tengo miedo Luka – comenzó a llorar. El fuego comenzó a quemar la alfombra, los muebles, las cortinas, el árbol de navidad. John y Luka se fueron a refugiar en la segunda planta. en un cuarto donde guardaban las cosas del aseo.

- Cariño, despierta – la señora Clara movía desesperada a su marido. Tras unos instantes salió de su habitación

- ¿Qué pasa?...

- Oh dios mío, se está quemando la planta baja ¡Los niños! – Ambos salieron hacia la habitación de sus hijos y se preocuparon cuando no los encontraron acostados

- Iré a la cocina para evitar que explote el tanque de gas, tú búscalos

La señora Clara busco en los lugares donde el fuego todavía no invadía, estaba desesperada hasta que se comenzaron a escuchar lloriqueos

- ¡John! ¡Luka!

- ¡Mamá! – Corrieron a los brazos de su madre

- Perdón mamá fuimos nosotros – lloriqueaba John

- Hay que salir lo más antes posible - estaban por bajar a la primera planta cuando se escuchó una fuerte explosión

- ¡Papá! – gritaron los pequeños cuando el cuerpo sin vida de su padre salió disparado de la cocina. Ya no tenían como salir, el fuego ya había consumido la primera planta, así que fueron a la habitación de Luka y John. La señora Clara amarró varias sabanas para hacer una "cuerda"

- Luka apresúrate a bajar – Luka trepó la ventana y comenzó a descender – John vas tú, rápido

- Mamá tengo miedo, ven conmigo

- No pasará nada, estaremos juntos, siempre – John comenzó a descender, cuando faltaba siete metros para tocar el suelo, la habitación donde estaba la señora Clara comenzó a quemarse, acto seguido hubo otra explosión. John cayó al suelo

- ¡John! – Luka arrastró a su hermano a unos diez metros – John despierta – Luka comenzaba a ver borroso

- ¡Aquí! Rápido hay sobrevivientes... Niño ¿Estás bien?