Desastres

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- ¿¡Qué!? - Veo a Andrew ponerse de pie, acercándose a Nathan. - ¿Estás seguro, Nathan? Quizás fue sólo un error.

Nathan niega, entrando a la oficina, cerrando la puerta a su paso, observándonos con seriedad.

- No es un error, Andrew. Acaban de activarlo. - Frunzo mi ceño, queriendo entender aquello.

- ¿Proyecto "Storm"? - Fijo mi mirada en el suelo, recordando aquellas pequeñas palabras que alguna vez Rebecca me dijo. - ¿Acaso no es un secreto o algo parecido?

Nathan me mira, suspirando en silencio, sentándose en su silla, pidiéndonos que hagamos lo mismo; tomo asiento frente a él, al igual que Andrew.

- El proyecto "Storm" es un secreto que sólo el gobierno, incluidas las fuerzas especiales, conocen. - Frunzo mi ceño, queriendo hallarle sentido a todo lo que se me está contando. - Nadie sabe los códigos encriptados ni cómo desencriptarlos.

- Sólo Rebecca lo sabe. - Termino aquella frase, sabiendo que tenemos poco tiempo. - ¿De qué se trata ese proyecto? - Nathan suspira y observa a Andrew; los miro intercaladamente. - ¿Qué sucede?

Andrew niega en silencio, llevando una de sus manos a su rostro, bufando por lo bajo mientras, Nathan, lo mira en espera de que diga algo.

- Hazlo, Andrew. Está metido hasta el cuello; ya no hay marcha atrás. - Me siento totalmente confundido. Miro a Andrew en espera de que diga algo.

- Bien, - suspira él - el proyecto "Storm" fue una idea base que tuvimos hace bastantes años atrás. En él, se planeaba levantar un mini ejército especial, mejor que SWAT o, incluso, fuerzas especiales. La gracia de este proyecto era encontrar a los mejores candidatos para el puesto, entrenarlos, darles armas y enviarlos en misiones, tipo suicidas. Si sobrevivían, volverían a la base y serían, nuevamente, entrenados para ser nuestras armas más letales.

Veo que Andrew se detiene, pero con lo poco que habló, mi mente ya está volando a mil por hora, entendiendo lo que eso significa.

- ¿Qué sucedió? - Miro a Andrew en espera de que continúe.

- El proyecto se canceló. - Observo a Nathan y niego sin comprender del todo, incrédulo ante lo que escucho.

- ¿Podrían ser más específicos, Nathan? Quiero saber toda la historia. - Nathan asiente, suspirando en silencio y se levanta de su asiento para cerrar las persianas de la oficina, mirándome al haberlo hecho.

- El proyecto estuvo en funcionamiento por, casi, treinta años, Jonathan. Nuestro mayor error fue enlistar a los que "creíamos" serían buenos. - Nathan y Andrew se miran en silencio, negando. - Debimos sospecharlo desde un principio, Andrew.

- Lo sé, Nathan, pero no me lo esperé; nadie lo hizo. - Comienzo a atar cabos sueltos, levantándome del asiento al entender de qué hablan.

- Yo fui parte de ese proyecto, ¿no es así? - Nathan me mira y asiente en silencio. - Pero también lo fue James. - Vuelve a asentir en silencio, causando que un escalofrío extraño me recorra el cuerpo. - ¿Qué rayos hicieron con él?

Nathan niega, acercándose al escritorio, apoyándose frente a él, mirándonos con tristeza.

- Fue el paciente "cero"; fue el primero en ser llevado, siendo sometido a experimentos fuertes. Al mismo tiempo, sufrió una que otra prueba fuera de nuestro alcance, convirtiéndolo, no sólo en una máquina asesina, sino en una vengativa. - Levanto una de mis cejas, intentando hallarle sentido a lo que Nathan cuenta. - Fueron varios años de prueba a los que fue sometido, dándole también el poder de descubrir varias incongruencias en el proyecto.

Cercanías Peligrosas (COMPLETA Y CORREGIDA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora