Un chico depresivo (h.s)

16: "No me gusta este lugar"

¿Una cosa buena que puede pasar cuando estas a punto de morir, o de matarte?

Que la persona que quieres grite tu nombre, que sea la última voz que escuches.

Eso es hermoso. Te vas con su voz grabada en la cabeza. Pero cuando te das cuenta que no has muerto vuelve el sufrimiento.

Elizabeth entró a la habitación del hospital donde se encontraba su mejor amigo, el se veía feliz, pacíficamente durmiendo, se veía muy tranquilo, pero no era que en realidad estuviera feliz, ella sabía que no era así.  Eliz dejó las tres flores que había comprado para Harry fuera del hospital,  estaban muy bonitas y le recordaban la vida, cosa que ahora agradecía que Harry siguiera teniendo.

Se acercó a la cama de su amigo y se sentó con mucho cuidado en la orilla,  la sangre había dejado de correr fuera del cuerpo de Harry, pero las vendas en todos, completamente todos, sus brazos estaban manchadoa de rojo por la poca sangre que salía de gota en gota, sus piernas también estaban vendadas.

Ella le había explicado todo a un doctor, y éste le prometió no decir nada a nadie. Pero le dijo a Eliz que Harry aparte del tratamiento físicos,  también necesitaba tratamiento psicológico. 

Harry estaba recostado plácidamente,  su rostro estaba relajado sin una pisca de preocupación. Su respiración era regular, y se veía que estaba muy calientito con sus sábanas.  Eliz lo miró detalladamente,  su cabello rizado y castaño caía sobre su frente, sus ojos estaban cerrados, lo que le impedía ver esos hermosos ojos verdes que solo el tenía (porque aunque miles de personas tuvieran ojos verdes, los de el eran únicos), sus pestañas estaban hacia abajo y su boca roja y gruesa estaba entreabierta. Los lunares que poseía les daba un toque lindo a su rostro. Y ahora que su tatuaje de golondrinas quedaba al descubierto gracias a su bata del hospital que tenía el escote muy pronunciado, Eliz lo podía ver muy bien, nunca lo había visto, pero era muy bonito. Ya se estaba preguntando que significaría. ¿Sus padres? ¿La libertad? ¿O las ganas de vivir?

Aún así ¿Por qué Harry se tatuaba si nunca mostraba sus tatuajes? eso era raro. Tal vez quería mostrar su historia pero le daba miedo hacerlo. ¿Tendría más  tatuajes? Pero claro, Cheryl lo había dicho, que no tenía solo uno. ¿Cuántos tendría?.

Un bostezo salió de la boca de Eliz, después de lo que Harry hizo llamó a una ambulacia, Cheryl estaba en la guardería del hospital sin saber que hacía ahí. Todo había pasado ayer, ella no había dormido esparando noticias de Harry que no habia tenido hasta ahora en la mañana que pudo entrar a verlo. Eliz vio un sillón en la habitación, se dirigió hasta ahí, se acomodo y cayó en un profundo sueño.

Harry despertó en una habitación completamente blanca, estaba en una pequeña cama con sábanas azul claro y al lado de ésta había un mueble donde había un vaso de agua, medicinas y tres flores diferentes.

Mas allá se encontraba un sillon azul rey donde reposaba acostada una persona, al principio Harry no la reconoció,  pero al ver que era Eliz, su corazón comenzó a latir rápidamente.

¿Qué había pasado? ¿Qué hacía ahí? ¿No había muerto? Mejor dicho ¿Por qué seguía vivo?

Trato de moverse pero le dolía,  vio que sus brazos y piernas estaban vendados y sentía en su abdomen lo que también parecían ser vendas.

¿Y Cheryl? ¿Dónde estaba? Pero lo más raro de todo. ¿Por qué estaba en un hospital vendado? No recordaba nada absolutamente.

Elizabeth comenzó a moverse un poco en el sillón donde estaba, al parecer ya le estaba incomodando. De pronto se levantó y Harry cerró los ojos, luego los abrió  poco a poco y vio que Eliz se acercaba así que los cerró rápidamente de nuevo.

-Se que ya has despertado-Escucho la voz de Eliz.

Harry respiró profundamente y abrió los ojos de nuevo.

-¿Cómo te sientes?- Pregunto Eliz.

¿Cómo me debería de sentir? Pensó Harry.

-Bien-Respondió el-¿Qué fue lo que paso?

Eliz cerró los ojos recordando ese horrible momento en el que Harry se encontraba ebrio y se cortaba profundamente.

-No se si deba decirtelo ya, o dejar que descanses.

-Puedes decirmelo ya-Le dijo Harry.

Ella respiró profundamente y asintió.

-Ayer por la mañana Cheryl me habló,  me dijo que estabas en el baño y tenías sangre en tus manos, te habías cortado de nuevo-Dijo.

Harry frunció el ceño,  no recordaba nada

-Entonces fui a tu casa y te encontré aún en el baño cortandote todo el cuerpo, estabas tomando vino y ya estabas ebrio, me dijiste todo lo que sentías, que odiabas y cosas así,  te hacías un corte cada vez que decías la palabra odio, y no fueron pocas veces-Dijo eliz señalando los brazos de el.

Harry seguía con el rostro fruncido tratando de recordar algo. El levantó la cabeza cuando escuchó un sollozo de parte de su mejor amiga. Se asustó.

-¿Qué pasa?-Le preguntó preocupado.

-Me dolió verte así,  lleno de sangre. Y me duele verte ahora así,  vendado y...-

-Eliz no se cómo pasó,  y lamento mucho lo que hayas visto, una persona como tú, dulce tierna e inocente no debería haber visto eso, aunque no sepa cómo pasó

-Estabas ebrio...

¿Por eso no recordaba nada? Harry nunca había creído en que los borrachos no recuerdan nada después. El decía: Lo recuerdan pero les vale madre lo que hagan en el momento en que estan borrachos.

Tal vez eso le había pasado a el, pero no podía explicar aún por cuál razón no recordaba nada.

-No recuerdo nada- Susurró Harry

-No es necesario que lo recuerdes, no es un recuerdo muy bonito después de todo.

Harry asintió.

-Lo siento

-Deja de disculparte, deberías descansar-Dijo Eliz.

-¿Cuánto me quedaré aquí?

-No me han dicho, pero espero que no mucho, no me gusta este lugar...

-No tienes que quedarte aquí,  puedes ir a tú casa.

-No me refería a eso, quería decir que no me gusta que estes en este lugar, no me gusta este lugar para ti.-Eliz hizo una pausa-El doctor dijo que necesitabas terapia psicológica

Harry frunció el rostro.

-No me gustan los psicológicos, me caen mal, ¿Por qué se meten en los problemas de loa demás?

Fue el turno de Eliz de elevar una ceja.

-¿Sabías que cuando acabe de estudiar esta carrera voy a estudiar psicología?

Harry volteó inmediatamente.

-Yo no quise...-Suspiró-No quiero ir a una terapia.

-No te obligaremos si no quieres, pero sería lo mejor.

El la miró unos minutos y asintió.

-Esta bien, iré.

Eliz sonrío y lo abrazo. Harry por su parte no deseaba solo abrazarla, quería darle un beso.

Pero Eliz lo tenía en la "Friendzone".