💫 Capítulo 8

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Tn bajó las escaleras rápidamente, mareándose en cuanto se detuvo. Su madre suspiró mientras negaba con la cabeza.

– Te dije que no bajes corriendo, te mareas.

– Lo siento, madre.

– ¿Estás bien?

– Hm. Sí –la miró.– Ya pasó.

– Bien. Entonces, si estás lista, nos vamos.

– Sí.

Tn siguió a su madre al garaje de casa, subiendo al vehículo blanco que estaba allí. Kumiko sacó el auto del garaje y comenzó a conducir mientras Tn ponía su música favorita, comenzando a cantar junto a su madre. Minutos después, la mujer estacionó frente a una cafetería.

– Bien, llegamos.

– ¿Es aquí?

– Sí. No intentes recordar nada porque la cafetería es nueva.

– Oh, de acuerdo.

– Pero el personal no, ya los conoces a todos.

– Entiendo.

– Espérame aquí, no bajes aún.

– Sí mamá.

Kumiko bajó del vehículo e ingresó en el café, minutos después volvió a salir y abrió la puerta del lado de Tn.

– Esta bien, baja.

Ella asintió y bajó, entrando a la cafetería tras su madre. La cafetería era bonita, habían varias mesas de madera y una barra, y el agradable aroma a café se sentía en el aire.

– Aquí estamos –anunció Kumiko.

Tn notó que tras la barra había una chica peliazul de espaldas, al parecer acomodando unas cosas; aquella se giró al oír hablar a Kumiko, y sonrió al ver a Tn.

– Tn... –murmuró.

Aquella chica salió de detrás de la barra y corrió hacia la albina, abrazándola. Tn estaba confundida, pero correspondió al abrazo. Se separaron, la peliazul sonreía. Dos personas más salieron, un hombre de cabello platinado y expresión seria y un pelinaranja de lentes.

– Tn –dijo el peliplata.

– Veo que te has recuperado, enana –dijo el de lentes.

Tn miró a su madre, esperando una explicación; la mujer rió y los presentó nuevamente.

– Tn, cielo, ella es Touka Kirishima, una amiga tuya –la mencionada sonrió.– El alto es Renji Yomo, es tío de Touka –el mencionado saludó con la mano mientras sonreía.– Y el de lentes es Nishiki Nishio, lo conoces hace años, e iban a la misma universidad, él era estudiante farmacéutico.

– ¿Realmente no me recuerdas, enana? –preguntó el mencionado.

– Ah... –negó con la cabeza.– No, a ninguno, lo siento.

– ¿Tampoco a Anteiku? –preguntó la peliazul.

– ¿Anteiku?

– Sí, la cafetería que había abierto Yoshimura-san.

– Anteiku...Yoshimura... –murmuró.

<<Flash Back>>
Tn caminaba por las calles del Distrito 20 con tranquilidad; de pronto, se detuvo frente a una cafetería, sonrió y entró. El lugar era bonito, con grandes ventanas y un hipnotizante aroma a café.

– Buenos días –saludó.

– Tn –sonrió una peliazul vestida con el uniforme del café.– Hola.

Remember me 💫 Juuzou SuzuyaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora