Remember me 💫 Juuzou Suzuya

💫 Capítulo 10

[Abril]

Tres meses habían pasado ya desde la reintegración de Tn al CCG. Le iba bien, pero se sentía más como una niña que acompañaba a su padre al trabajo (en éste caso, Arima) que como una mujer de Nivel 2; entendía las cosas, pero no se sentía como una profesional, aquellos dos años de experiencia se habían desvanecido y, por el momento, pareciera que se negaran a volver.

Suspiró y, tras arrojar sus zapatos y bolso a una esquina y quitarse el saco, se dejó caer en su cama. Estaba exhausta. Alguien llamó a su puerta, era su madre.

– Tn, cielo –se sentó al borde de la cama.– ¿Estás bien? Te ves agotada –dijo con cierta preocupación mientras le peinaba el cabello con su mano.

– Estoy cansada –la miró.– Arima-san tuvo mucho papeleo hoy, y yo también.

– Te ves preocupada por algo, ¿Quieres hablarlo?

– Yo... –volteó la mirada.– Mamá, me siento como una niña allí.

– ¿Una niña?

– Sí. Todos dicen que yo era muy buena en lo que hacía, que siempre tenía todo al día...que Marude-san y Arima-san estaban orgullosos de mí por mis esfuerzos, incluso Matsuri estaba feliz conmigo y mi desempeño, pero...pero ahora...me siento una niña. Hay cosas que no recuerdo y cosas que no entiendo, y eso me frustra. No puedo dar lo mejor de mí, y mi rendimiento es bajo comparado al que tenía antes del accidente...Todos esperan mucho de mí, pero...yo no estoy dando ni siquiera el 3% de mí...

Hubo un momento de silencio, mientras Tn miraba a la nada y su madre le acariciaba el cabello.

– Mamá –dijo al fin.– ¿Crees que...deba renunciar...?

– Cariño, mírame.

Tn se giró y se incorporó, para mirar bien a su madre. La mujer tenía una expresión calma, no estaba molesta ni decepcionada, y eso tranquilizaba a la joven.

– Tn, cielo, tu experiencia profesional no vino de la nada, fueron años de esfuerzo. Trabajas en el CCG desde los 17 años, claro que eras una profesional en lo que hacías. Y ahora...bueno, nadie puede culparte por nada. Si realmente quieres mi opinión, yo digo que debes seguir, esfuerzate por ir bien, no para ser profesional, sino para que te vaya bien; créeme que, si renuncias ahora, cuando te recuperes vas a lamentarlo, ¿Entiendes?

– Sí –asintió.– Gracias, mamá.

– No es nada, cielo –acarició su mejilla.– ¿Qué tal si te cambias y vamos a :re?

– Es una buena idea –sonrió.

– Te espero abajo entonces –besó su frente y salió.

Tn soltó un suspiro y se levantó, cambiándose de ropa para luego bajar a la entrada de casa, donde su madre la esperaba con una sonrisa. Ambas saliendo de casa y subieron al vehículo de la mujer, yendo a la cafetería :re.
Allí tomaron asiento en una mesa junto a la ventana y fueron atendidas por Touka.

– ¿Cómo te está yendo en el trabajo? –preguntó la peliazul mientras servía la orden.

– Bien...Bueno, más o menos.

– ¿Y eso?

– Me siento como una niña ahí dentro.

– Hm, ya veo...Bueno, no sé cómo funcioné el CCG, realmente, pero...estoy segura de que pronto te sentirás bien de nuevo –sonrió.– Nosotros te apoyamos.

– Gracias –sonrió.

– Y...en cualquier caso, si decides renunciar, tenemos un lugar aquí –bromeó. Tn rió.