Jane Maguire debe seguir la vida del exitoso jugador alemán Erik Durm, quien solo busca divertirse y disfrutar lo que su fama le entrega, Jane con solo 25años llega a cambiar la vida de Erik con la simpleza y alegria que enfrenta la vida, y sin que...
Un estruendo me quita el sueño, mi cerebro se pone en marcha al escuchar la intensa lluvia que cae sobre Dortmund. Un rayo de luz entra através de la ventana y me reincorporo para mirar a mejor detalle lo que sucede afuera.
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Un relámpago se extiende por el cielo que ya ha oscurecido, debí dormir todo el día; abro la ventana para escuchar con más claridad la lluvia y disfrutar de la tormenta eléctrica, la casa está en silencio por lo que me propongo bajar para comer algo.
- cariño, ya estás despierta- dice Meli cómo si fuera la mejor noticia del día.
- tenía mucho sueño- confieso algo avergonzada.
- es normal, te hice algo de comer. Todo está en la cocina y esta es tu casa, yo me voy a la cama porque Marc y Gala ya estan dormidos- besa Mi mejilla- buenas noches- comienza a subir la escalera pero Marc está bajando algo aturdido.
- venía a buscarte- dice el español llegando al final de la escalera y se percata de mi- no te escuché, ¿Estás bien?- pregunta más despierto.
- estoy bien, tengo un poco de hambre- confieso con una sonrisa y ambos ríen.
- si quieres te acompañamos mientras comes- se apresura a decir Meli.
- no tienen que quedarse, vayan a dormir- sonrío a la pareja para convencerlos de que estoy bien.
- fingiré que te creo, pero en realidad te tengo vigilada- responde Marc señalando sus ojos.
Muevo mi mano para despedirlos pero no alcanzan a subir la escalera por el sonar de la puerta, como si de película se tratara...se escucha un trueno que nos hace mirarnos. Yo sigo mi camino a la cocina mientras Marc se dirige a la puerta acompañado de Meli, comienzo a calentar lo que Meli preparó para mi, es un plato de sopa lo cual es perfecto por el clima que hay afuera, tomo un plato y pongo a tostar pan; escucho unos susurros desde la puerta pero no pongo Atención hasta que enciendo la cafetera y me acerco a la salida de la cocina.
-...no, no sabes cuanto quiero golpearte ahora, Dumi.- entre susurra y grita Meli, mi corazón se detiene al oír el apodo de Erik- Me decepcionaste, espero que tu madre nunca se entere de esto o se pondrá peor que yo, siempre te dijo que la mujer es algo delicado y tú la hieres como si fuera un pedazo de basura- toma aire agitada.
- no, debes callarte y escuchar. Ella tiene razón- añade Marc.- amor, ve con Gala y yo hablaré con Erik- escucho el cambio en la voz de Marc.
- pero quiero decirle muchas cosas mas- una pausa- está bien, pero solo deben hablar aquí, adiós- se escuchan unos pasos a toda velocidad y me asomo como un espía por la puerta de la cocina para ver a Marc y Erik Junto a la puerta.
Durm está empapado, luce bastante cansado pero una opresión en mi pecho me impide sentir lástima por él.
- ¿Jane está aquí?- termina con El silencio- cuando llegué a mi casa, todo había desaparecido, es como si ella y Annika nunca hubieran estado.- aclara su garganta, de seguro la culpa lo está volviendo loco.
