RAGONEY

Una noche única

NARRA AGONEY
Raoul me dijo que subiera a la habitación de invitados, mientras él iba al baño un momento. No sabía de la existencia de esa habitación en la casa de las chicas. Subo y voy por el pasillo, de repente veo en el suelo, un camino de pétalos rosa....me quedé wtf, por que hace esto? Me lo como. Seguí el camino el cual llevaba a la habitación.

Entré y vi una habitación sencilla, con una cama llena de pétalos, en la mesilla de al lado había una botella de vino y unas copas, también había nata y fresas. Me siento en la cama y Raoul se posa en el marco de la puerta, solo vestido con unos bóxers.

-¡Que bueno estás rubio!
-Tu tampoco te quedas atrás
Se está acercando a mi, se sentó encima de mí y comenzó a besarme con la misma intensidad que cuando estábamos en la fiesta. Mientras nos besábamos y explorábamos la boca del otro, Raoul me quitaba la camiseta. Nuestras respiraciones empezaron a ser cada vez más irregulares. Me quité los pantalones quedándome en bóxers yo también. Raoul ya notaba mi bulto en su culo, y él sonrió de forma pícara. Me tumbé y él seguía encima de mí besándonos. Paro de besarme y comenzó a morderme y besarme el cuello, hacia un recorrido de besos por mi torso, parándose en mis pezones, cosa que me excitó todavía más y con lo que produje algún que otro gemido. Raoul siguió su recorrido, llegando a mi miembro. Me miró, en señal de pedir permiso, a lo que yo asentí.
Me quitó los bóxers y cogió mi miembro haciendo movimientos lentos para arriba y para abajo. Y se lo introdujo en boca, en ese momento me estaba dando mucho placer, era delicado y placentero. Que bien lo hace todo.

Después de un rato, cambiamos la posición y ahora era yo quién se la chupaba a él. Le estaba gustando mucho, gemía y se estremecía al ritmo de mi movimiento. No me avisó y terminó en mi boca, a mi no me molestó de hecho me gustó, me lo tragué y subí a besarle. Entonces dijo:
-Ahora te toca a ti disfrutar.

Raoul me puso un preservativo y se sentó en mi miembro, ahora él llevaba las riendas de la situación, movía sus caderas a la vez que gemíamos de placer. Me ponía tanto y lo hacía tan bien que me vine dentro de él en poco tiempo. Se levantó y se tumbó a mi lado, con la cabeza en mi pecho, yo le puse la mano en la cabeza y le acariciaba el pelo.

-Ha sido increíble Raoul, muchas gracias por este regalo.
-Solo quería demostrarte todo lo que te quiero de una forma más especial, no es un hotel de 5 estrellas ni nada de eso, pero ha sido espectacular.
-Contigo siempre es y será así.
-Te quiero mucho Mickey-Dijo dándome un beso tierno y dulce en los labios.
-Yo también te quiero mi rubio.
Nos dormimos abrazados y tapados por una suave sábana. Estábamos más enamorados que nunca.

-¡¡BUENOS DÍAS!!

Me asusté y me incorporé en la cama, Raoul se estaba estirando y haciendo ruidos mañaneros.
Eran Miriam, Nerea y Mireya con una bandeja de desayuno, llevaban dos zumos de naranja y tostadas con aguacate, mi desayuno favorito.

-Buenos días-Dijimos Raoul y yo a la vez, nos dimos un beso.
-¿Que tal la noche tortolitos?-Dijo Mireya acercándonos el desayuno.
-Muy bien-Dijo Raoul mirándome con una sonrisa
Y me sonroje, no se porque, ya debería estar acostumbrado.
-Unos tantos y otros tampoco-Dijo Nerea riéndose.
-Yo anoche me fui a casa de Pablo, que también tenía una sorpresa-Dijo Miriam guiñando un ojo.
-Bueno Nerea, tú y yo aún no encontramos el amor....-Dijo Mireya.
-Ellaaaa dramática-Dijo Miriam.
-Chicos os dejamos que desayunéis, y bajad a bajo que hay que limpiar...y terminar la mudanza.
-Es verdad, no me acordaba que nos mudábamos.-Dije resoplando.
Se fueron y nosotros desayunamos en la cama. Era todo perfecto, mi desayuno favorito con mi chico favorito.

NARRA RAOUL
Después de desayuna me fui a ducharme, me vestí, en peiné y fui a ayudarles a limpiar la casa. Ago se estaba duchando ahora. Por desgracia no nos duchamos juntos, porque en la ducha no cabían dos personas, era bastante pequeña. En fin empecé a recoger vasos y a tirarlos, limpiar la mesa, apañar los sofás.....pero que es esto??
-AHHH! Buah que horror lo siento muchísimo.-Era Amaia, se había quedado dormida detrás del sofá.
-Amaia! Como sigues aquí?-Dijo Miriam sin dar crédito a lo que estaba viendo.
-Buah no lo sé, me duele la cabeza, de verdad los siento muchísimo, por favor no le digáis nada a mi madre, ya me voy.-Dijo Amaia avergonzada.

Se fue y nosotros nos quedamos flipando, esta niña cada vez nos sorprende más.
Agoney bajaba por las escaleras, duchado y peinado, me quedé embobado mirándolo. Estaba guapísimo.
-Hey Raoul, ¿estás bien?
-Si amor, solo que estás guapísimo.
-Ooohhh-Se oyó a Nerea en la cocina.
-Ellaaaas enamoradas-
-Joe Raoul ahora me sabe mal que me hayas hecho todo esto y yo a ti no te haya dado nada.-Me dijo Agoney triste.
-No te preocupes, ya me das más que suficiente, teniéndote a mi lado todos lo días-Le di un beso corto pero con mucho amor en los labios. Ago sonrió.
-De verdad chicos, a este paso me vais a hacer llorar, sois tan adorables.-Dijo Mireya.

Terminamos de limpiar la casa, la cual íbamos también a dejar esa misma mañana. Era Domingo, no íbamos a instalar en la nueva casa los 5 juntos. Metimos todo el equipaje de las chicas en los coches, era mucho pero cogió bien. Nerea de tuvo que venir en mi coche, porque los asientos de atrás del coche de Miriam iban llenos de cosas.

Mis cosas las cogí hace unos días y ya las llevaba ene el maletero con las de Ago. No llevábamos mucho equipaje. Nuestra nueva casa estaba a 15 minutos de donde vivíamos ahora, el viaje iba bien. Íbamos hablando de qué habitaciones nos queríamos coger, de como repartir los baños, etc. Todo iba demasiado bien, demasiado perfecto. Estábamos llegando a la casa nueva, ya la podíamos ver, sin embargo, algo hizo que me parara...........

HOLAAA!!
No me lo puedo creer, hemos llegado a 1k. Muchísimas gracias por el apoyo de verdad. Sois lo mejor. Como dije en un mensaje este es el segundo capítulo seguido que subo. Esta noche si puedo subiré otro, no prometo nada jeje.
Gracias de nuevo y un besOT 💛💛💛