Llego a casa me hago un café negro, voy al cuarto de mamá, ya salió a trabajar, se que Diego tiene clases hoy temprano así que sigo derecho a mi cuarto, tomo lo primero que encuentro un short de tela azul marino y la parte de arriba de un bañador azul que me regaló mamá. Salgo afuera y siento la brisa sobre la piel, es temprano para que caliente el sol pero se ve que será un dia calido.
Estiro los brazos para que me abraze la brisa suave de la mañana, el olor dulzón de los jazmines de la Sra. Fleitas que vivía en la casa continua inunda la mañana, descalza hundo los pies para sentir la tierra húmeda y suave. En estos momentos me siento mas viva que nunca, mirar en el lago el reflejo vivo del cielo y disfrutar con plenitud el momento, es mi mejor terapia, cuando la mente se calma y afloran los sentidos. Salto al lago y bloqueo la mente, solo instinto, una brazada tras otra, la respiración se acompasa y asi me quedaria para siempre, sintiendo el sol en mi espalda, el agua fría despertando mis sentidos, los músculos del cuerpo tensarse ante cada movimiento, sincronizados, alertas. Me dejo fluir brazada tras brazada en un sentido, en el otro e incluso dando grandes círculos, mi cuerpo ya reconoce el lago no tengo que levantar la vista para orientarme, el cuerpo lleva el registro de cada centímetro del lago.
Siento que algo me roza el pie y me sobresalto, debo hacer un esfuerzo por mantenerme a flote, estaba inmersa en mi mundo, mi ensueño con el cuerpo en piloto automático y me desperté de golpe reaccionando a lo extraño. Miro a lo lejos y veo algo nadando, me acerco lentamente, alerta e identifico una figura humana.
Nunca nadie ha nadado en el lago desde que tengo memoria, lo cual fue fantástico para mi aunque se que no me pertenece.
En parte curiosa y en parte indignada me acerco, cuando la persona se incorpora lo reconozco inmediatamente; Enzo.
_¿Que haces?
_ Ina! ¿como estas? ayer te fuiste muy rápido de la fiesta quería conversar contigo y no me ha dado tiempo de pedirte tu numero siquiera. He pensado mucho en lo de ayer y estoy algo preocupado.
_ Lo lamento no hay mucho para explicar y tal vez este no sea el mejor momento, solo quería advertirte que yo estaba nadando, me rozaste el pie y te vi. Realmente necesitaria nadar un poco ¿a vos te molestaría nadar luego?
Hace una mueca algo divertida, y yo me asombro de su descaro, no es mi lago pero... si, si es mi lago, nade aca siempre, yo solo yo; ¡date cuenta que sos un intruso!.
_ No voy a irme si no vienes conmigo, de verdad necesito conversar con vos. Puedo esperarte flotando acá y me usas de bolla o bien podemos sentarnos en el fondo de mi casa, es esta que se ve acá._ tal vez por mi cara de enfado, sorpresa y desagrado agregó _ Sino seguiré nadando en el hermoso y público lago, cuando la Sra. Fleitas me vendió la casa le consulte y me dijo que no es un lago privado, que es del pueblo en general aunque solo lo usan los pescadores en temporada baja para anclar algunos botes.
_ En realidad no es en esta zona que dejan los botes es en el otro extremo, para conservar la limpieza y el ecosistema, bueno que te explico yo ¿Cuando te mudaste a la casa de la Sra. Fleitas?
_ No hace mucho, unas semanas. Me estaba quedando en la casa de mi tia pero era solo para poner las cosas en orden. Si tu quieres nos sentamos a ver el lago y charlar un poco, ¿si?
_ Bueno, parece la mejor de las tres opciones.
_ Genial.
Subimos rápido porque su casa terminaba justo sobre el lago con una especie de balcón de madera, me ofreció la toalla que estaba en la ventana y me hace gestos para que me acerque mientras la extiende entre sus brazos; me acerco aun pensando si es una buena idea y me acomoda la toalla sobre los hombros. Estoy un poco más calmada, no tengo derecho para enojarme la verdad, me siento en una silla que está mirando al lago cerca de la orilla.
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Perdida en mi (#PGP2018)
Non-FictionMe llamo Carina y tengo apenas 17 años, no se exactamente que es "estar viva" y que es "estar con vida" pero si se que no es lo mismo. Estoy rota por dentro, desgarrada de maneras inexplicables, perdida en fragmentos descoloridos de la persona que...