ᴄʜᴏϙᴜᴇ ᴅᴇ ᴍᴜɴᴅᴏs《ʀᴜɢɢᴀʀᴏʟ》(Terminada)

° (42) ¿Oficialmente Ruggarol? -

Narra Karol

Al girar noto como esta parado con una guitarra entre sus brazos y una sonrisa. Los leves acordes empiezan a deleitarme.

Con cada frase que cantaba, estaba más segura de todo lo que empecé a sentir por él. Me fue inevitable no derramar algunas lágrimas al final de la canción, empiezo a aplaudir cuando deja la guitarra a un lado y se me acerca.

—Buona notte ojitos—susurra a mi al frente.

Lo abrazo.

—Buona notte Ruggerito—susurro en su cuello.

Sonriendo nos separamos.

—¿Lista para nuestra cena?—cuestiona agarrándome de la mano.

Asiento.

Me dirige hacia la mesa muy bien decorada, me ayuda a sentarme y destapa el plato a mi al frente. Me emociono al ver mi comida favorita.

—Disfruta esta noche ojitos—susurra para luego dirigirse a su asiento.

Sonrío mirándolo.

<< Disfrutaría de esta velada >>

[...]

Narra Ruggero

La tarde estaba empezando a llegar a su fin, así como también mi tiempo para decirle lo que tenía que decirle. La verdad la pase muy bien en compañía de la chica de ojos verdes, siempre es así. Cuando terminamos de cenar nos sentamos sobre una manta tendida en el césped, empezando a hablar de cosas triviales.

<< Uno... dos... tres >>

—Rugge—me llama Karol antes de que pueda decir algo.

—Mande—respondo mirándola, ella ríe por la respuesta que le di.

Con un suspiro, cierra sus ojos.

—La verdad que desde hace un tiempo vengo confundida sobre todo lo que pasamos, es decir, tú estabas con Maricielo pero yo no podía verte como un simple amigo. Pasamos por mucho y a pesar de que nos dejamos de hablar por mucho tiempo y por mi estupidez, el sentimiento que tengo hacia ti no ha cambiado. Me siento segura a tu lado, me siento feliz a tu lado, me siento cómoda a tu lado.—habla rápido, toma aire con sus ojos cerrados aún— Desde hace días me sentí aún más confundida por lo que me estaba pasando, aquellos besos que nos dábamos me hacían marear más. Yo... tú...—suspira bufando, abre sus ojos y me mira— me gusta estar a tu lado, me gustas tú—susurra.

Me levanto tras sus palabras, extiendo mi mano hacia ella sin decir nada.

Ella me mira confundida y con un suspiro toma mi mano. La dirijo hacia el lugar donde quería darle la última sorpresa. Antes de que pueda hablar, ella me obliga a mirarla. 

—Rugge perdón si te incomode. Sabía que esto no podía ser recíproco, pero, lo lamento. No hay ningún problema si tu no sientes lo mi...—sin dejar que diga algo más la volteo para que vea aquella laguna—¿qué?—susurra sorprendida.

Sonrío, la abrazo por su espalda y recuesto mi mentón en su hombro.

—Siento que me robaste todas las palabras que tenía en mente—empiezo riéndome levemente— siempre me llamaste la atención y más esos hermosos ojos que tienes, aquello donde si analizas bien te transmiten todo lo que sientes. Con el tiempo aprendí a conocerte y a quererte. Llegaste a mi vida para darle un giro muy inesperado pero lindo, es cierto que también pasamos por momentos no tan buenos como queremos pero aquello nos permitió fortalecer los vínculos que teníamos.—dejo un beso en su mejilla— ¿Qué dices?—pregunto, ella luego de pestañar voltea a verme— también me gustas ojitos y mucho. ¿Quieres hacer realidad Ruggarol?—pregunto sonriendo.