Narrador omnisciente
— Luego de ver lo estúpido que he hecho no sé qué hacer, estoy como un niñato reniego de lo que hice pero era la única manera de verla, no quiero que huya con otro, no tengo cara para decir eso, no quiero excusarme pero básicamente mis padres me obligaron, es una larga historia que con el tiempo quizás pueda contarles algo que marco mi vida y por lo cual me separaron de lisa, un maldito sucio secreto que hasta hoy en día me persigue.
Lo peor de todo es lo que he tenido que sufrir y no hablo solo del maltrato físico que me han hecho pasar los seres que según yo consideraba mis padres, pero va que para que les cuento, de lo que me tengo que encargar es de que lisa vuelva a confiar en mí, estoy consciente de que no será para nada fácil no tengo idea de cómo hacer un buen plan, es algo muy complicado ella cree que yo estoy muerto, como alguien del mas alla puede aparecerse luego de un largo tiempo y decir oye estoy vivo vuelve a mí.
Cuando uno ama lucha por eso, es lo que estoy haciendo eh tenido que pasar por muchas pruebas, lo mejor que tuve en la vida me lo arrebataron como si nada sin un adiós, nunca había amado a alguien con tanta fuerza, pero la vida es tan buena y a la vez tan mala que te hace pedazos justo cuando comienzas hacer feliz.
Necesito dejar a lisa en su casa lo más antes posible, no puedo darme el lujo de que se entere de que estoy vivo, no es el momento. —cojo la llave que lleva en el pantalón sutilmente mientras la cargo en brazos, ya es un poco tarde lo bueno es que no hay nadie que pueda verme y sospechar abro la puerta y la cierro con el pie, camino lentamente mientras subo las escaleras siento que alguien saluda, mierda lo que me faltaba “mis bellos suegros”, coloco a lisa rápidamente en la cama mientras me tiro por la ventana, lo único que alcanzo a escuchar es que ellos gritan “lisa reacciona ”, no me preocupo tanto porque esa droga solo dura alrededor de unos 45 minutos.— No sé qué me ha pasado, siento que toda da vueltas en mi cabeza veo nublado, lo último que recuerdo es que alguien me tomo de la cintura y coloco algo en mi nariz, después de eso no sé qué ocurrió. -- veo como mis padres me dicen “hija que pasa háblanos, que te sucedió, porque estas en ese estado, acaso te has drogado”, sé que no me siento bien pero me muero de coraje al escuchar lo último, como coños se les ocurre que yo iba a drogarme trato de tranquilizarme y les cuento como paso todo, lo cual no creen y mientras vociferan cosas de como pude caer en las drogas lo único que alcanzo a decir es basta y salgo corriendo de ese maldito lugar.
Salgo sin rumbo rato de pensar en que pudo a ver pasado, quien pudo hacerme esto de lo que si estoy segura es que fue alguien que conoce mucho sobre mí, esto debe ser parte del juego de estas ratas, pero esto no se quedara así juro que pagaran, lo único que se me ocurre es llamar a Rodrigo a mi “disque amigo” y pedirle de favor que venga por mí, para ser sincera no sé dónde estoy, siempre salgo sin un destino, no estoy bien para nada bien, lo único que hago es huir como una niña inmadura pero no puedo hacer otra cosa estoy en una jaula, buscando a alguien que me ame alguien que me entienda mierda alguien como Michael si tan solo estuviera conmigo, mi vida es un estiércol.
Le llamo Rodri gracias al cielo que responde le explico rápido donde me encuentro, o más bien cerca de que estoy porque estoy más perdida que un niño de cinco años.
Estoy pensando en lo que ocurrió por la mañana, para ser sincera dudo mucho que hayan sido los tres ratones, pero me pregunto-- ¿quién más pudo ser?, no sé en quien pensar o bueno si, pero esa persona ya está muerta o quizás no sea así eso quisiera creer pero con ello solo me miento, recuerdo que días atrás eh sentido que alguien me persigue, quiero creer que solo es mi imaginación quien sea debo descubrirlo porque me está ocasionando problemas y muy graves.
Siento que alguien me zarandea por poco y grito, pero gracias a dios es Rodri lo único que hago es abrazarlo…
— No sé qué le sucede a lisa pero la veo muy mal, ella nunca me había abrazado con tanta necesidad trato de calmarla pero llora a mares, intento que me diga porque razón está así, pero me pide que no le pregunte nada y que la lleve a mi casa que no quiere regresar a la de ella, me asombra que ella me pida eso pero debe a ver un buen motivo, asiento a lo que me pidió y nos dirigimos a mi auto lo deje muy cerca de donde ella se encontraba, no fui nada difícil localizarla se veía tan mal cabizbaja y llorando.— No podía regresar a mi casa así que le pedí A Rodri que me llevara a su casa tal vez pueda pensar que me quiero aprovechar de la situación pero en realidad estoy devastada. No puedo ni conmigo misma, sé que mañana será otro día y podre pensar mejor las cosas pero por el momento solo quiero dormir, le pido de favor a Rodri si puede cargarme, no miento cuando digo que siento que desvanezco.
— Lis me pidió de favor que la cargue ya que se encuentra muy indispuesta, no me puedo negar recuerdo el trato que hicimos hoy en la universidad y quizás con lo de hoy les lleve 2km de ventaja de a poco pero bien, no acostumbro a hacer las cosas a lo bien pero siempre hay una primera vez.— mientras cargo a lis en mis brazos pienso muchas cosas como una vida junto a ella, es tan linda y a la vez tan rota si, tan rota como yo, camino alrededor de unos 5minutos y allí está el auto abro la puerta del copiloto y siento cuidadosamente a lis está a adormecida cierro la puerta y me dirijo hacia mi asiento. – luego de una media hora ya me encuentro en mi casa, lo bueno de todo es que tengo mi propio piso el cual cuenta con dos habitaciones, una cocina y un cuarto de baño muy cómodo aunque un poco desordenado ya saben a mí la limpieza no se me da muy bien que digamos. – me toco subir a lisa en brazos sí que pesa, a pesar de ser tan flaquita a cualquiera puede cansar ya que subí unas cuantas escaleras, lo más difícil fue tratar de abrir la puerta con ella en brazos me daba mucha pena despertarla, ya abierta la bendita puerta que me costó alrededor de unos 10minutos entre muy despacio y la coloque en mi cama ya que era la que media tenia limpia. – me tome el atrevimiento de cambiarle de ropa ya que gracias al frio que hacía y a la poca nieve se mojó un poco y no iba a esperar que le cayera otra peste, le quite los zapatos cuidadosamente y le puse unas medias mías luego la blusa y el pantalón lo cual ahora lo sustituye una camisa mía, le queda muy chistosa parece que fuera un vestido, hecho esto la coloco bien en la cama con mucho cuidado y le tiendo una manta encima, cuando de pronto escucho que dice .—no te vayas, puedes dormir conmigo no, quiero estar sola abrázame por favor.
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Confundida Entre Tres Hombres
Teen FictionLisa es una chica que tiene 18 años, es costarricense, por ciertas situaciones de la vida tuvo que mudarse a España con sus padres, no es algo que ella anhelaba pero tras la muerte de su gran amor Michael en un accidente decidió tomar una dura decis...