Capítulo 14: El peor dia de mi vida.

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ESTE CAPITULO TIENE CONTENIDO EXPLÍCITO.

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Stacey POV

El señor Miller me acaba de amarrar las manos. Tengo la boca tapada. No puedo hablar. No llevo camiseta puesta y me siento más incomoda qué nunca. El solo mira mis pechos.

—Ya veo por qué le gustas tanto a mi hijo. —¿Jason? No le gusto a Jason.

El me carga y me lleva a la cama. Que asco. Me siento mal, muy mal. Soy virgen y no se que este maldito hijo de perra quiere hacer conmigo. Lágrimas comienzan a brotar y no puedo controlarme.

—Pfvor. —Es lo único que logró decir. El me da una bofetada y me quita los pantalones. NO NO NO NO. Comienzos a moverme. Todo lo que hago es en vano. El se quita los pantalones y yo simplemente no puedo abrir los ojos.

Soy virgen.

Nunca pensé perder mi virginidad en una violacion.

—Prometo no hacer mucho ruido. Mocosa. —Dice y siento tacto en mi intimidad. Dios... Por favor ayuda. Puedo sentir como me bajan la ropa interior. Estoy gritando como loca. Pero tengo la boca tapada. No he abierto mis ojos. No quiero. Siento como algo duro choca contra mi intimidad. Y me penetra.

Perdí todo. Perdí mi dignidad, mi autoestima está más baja qué nunca.
El me penetra rápidamente y yo no tengo fuerzas para hacer nada. Me siento... Vacía. El sigue, y lo mueve sin parar. Respiro lo más profundo posible para dar el grito más alto de mi vida.

—¡AYUDAAAAAAAAAAA! —Logro decir lo suficientemente alto y para que alguien escuche. El señor Miller sale de mi se acerca para darme una bofetada qué me parte el labio. Demonios. Como lo odio.

Te odio
Te odio
Te odio
Te odio

Lloro como nunca. El vuelve a su pasada posición y me penetra nuevamente.

—¡AYUDA! —Digo mucho más bajo que antes.

Ross POV

Hace 40 o casi una hora que Stacey salió al baño. ¿Se murió o qué? Salgo de mi habitación para tocar la puerta del baño y comprobar que esté bien.

—¡¿Stace?! —Digo y no obtengo respuesta. Escucho un grito casi inaudible desde la habitación de visitas. Intento abrir la puerta pero está cerrada con llave.

—¡AYUDA! —Dicen desde adentro. Esperen... DEMONIOS ES STACEY.

—¡Callate! —Es mi padre. Desde adentro se escucha la cama agitarse. QUE NO SEA LO QUE ESTOY PENSANDO. Intento abrir la puerta a las buenas nuevamente, pero nada.

—A la mierda todo. —Digo y le doy una fuerte patada a la puerta. Esta no se abre completamente. Le doy otra patada con mucha fuerza y se abre de golpe.

No puedo creer lo que veo.

Papá está...
Stacey...

—¡Hijo de perra!—Digo y le golpeo la cara. Está... Desnudo pero no me importa. Le doy patadas en el estómago hasta que cae al suelo. Sigo pateanto y le golpeo la cara hasta que mis nudillos comienzan a sangrar. Lo golpeo tan fuerte que queda inconsciente.

Stacey... Está... Desnuda y débil. Busco corriendo rápidamente eni habitación unas sábanas limpias y cubro a Stacey. Le desato las manos y ella solo llora.
La cargo en mis brazos y la llevo a mi habitación. La acosté en mi cama y... Le puse ropa. No tuve problema en eso. Por Dios es Stacey.

—¡¡Stace!! —Digo tratando de que hable. Ella solo llora. Debí matar a ese maldito. Ojalá y se desangre ahí. No voy a dejar a Stacey sola.

—Stace... —Digo sobando su cabello. Está muy débil.

—Ross...—Dice en un hilo de voz.

—¡Stacey! Estoy aquí ¿Ok? ¡Estas bien! ¿Ok?

Ella se pone de pie.

—Acuéstate. —Le digo y ella no me hace caso. Está desorientada. Ella parece recordarlo todo y comienza a llorar. Me pongo de pie y le doy un abrazo. Ella comienza a llorar y yo acuno su rostro en mis manos.

—Estas segura. ¿Ok?

Ella me mira y mira mis labios. Se acerca y me besa. Yo le respondo el beso con mucho cuidado. Tiene el labio partido y lo que menos quiero es lastimarla. Nos separamos y ella llora de nuevo. No la culpo.

Le seco las lágrimas y acuesto su cabeza en mi pecho.

—Tranquila. —Digo acariciando su cabello.

—¿Quieres que nos vayamos? ¿A tu casa? —Le pregunto.

Ella asiente.

Salgo corriendo al cuarto de visitas. Papá está tirado en el suelo todavía inconsistente y le pateo nuevamente. Tomo el celular de Stacey que estaba debajo de la cama y voy donde Stace.

Está ahi. Llorando.

—¿Tu madre está en tu casa?

Ella niega. ¿Se le es difícil hablar?

—¿Quieres que te acompañe a tu casa? —Ella asiente y lágrimas comienzan a salir.

—Por favor ya no llores. Estás bien. —Digo y la ayudo a ponerse de pie. Ella camina lentamente y bajamos las escaleras con cuidado. Jason está en en el sillón de la sala y tiene sus audífonos puestos. Creo que no escuchó nada. Luego le explico.
Salgo tomando la mano de Stacey y despacio llegamos a su casa. 

—¿Tienes Llaves?

Ella señala el tapete. Busco las llaves y abro la puerta.

—¿Te llevo a tu habitación? —Ella asiente y sin pensarlo dos veces. La cargo en mis brazos y la llevo a su habitación. Al llegar la dejo en su cama.

—Aquí estás bien. ¿Ok? Mi padre se va a arrepentir grandemente. Duerme. Si necesitas algo solo llamame y vendré. —Abro la puerta de la habitación.

—Ross... —¡Stacey habló!

—¡Hablaste! ¿Que necesitas? —Le pregunto volviendo a donde ella.

—No... No te va-vayas. —Me dice entre lágrimas.

—¿No quieres que me vaya?

Ella niega y su teléfono comienza a sonar. Ella débilmente lo toma. Es su mamá. Ella lo pone en altavoz.

—¡Hija! ¿Sabes? Tengo un viaje de trabajo muy repentino. Deje la tarjeta de crédito en mi habitación y... Nos vemos en 3 días bebé. Perdón por dejarte sola. Mi jefe me dijo que es una reunión muy importante.

—Está... bien. —Dice Stace y su mamá se da cuenta del desánimo.

—¿Estas bien? —Dice la Señora Mitchell.

—Me dormí. —Dice Stace y una lágrima sale de su ojo.

—Ok pues nos vemos. Te amo bebé. —Dice su mamá para colgar.

—No me iré. Pero debes dormir. —Le digo y ella se gira y cierra los ojos. Yo la arropo con sus sábanas y ella duerme. Sabía que papá era un maldito. Pero nunca pensé que iba a llegar hasta aquí. Lo desprecio. Mi teléfono vibra en mi bolsillo. Es una llamada.

—¿Si?

–¿Me explicas por qué papá está tirado en el suelo y desnudo? -Dice Jason desde el otro lado asustado.

—Porque es un idiota y un maldito perro. Me da asco el padre que tenemos. Luego te explico. —Digo y Jason no dice nada.

—Te llamo después. Dile a mamá que no se preocupe, estoy bien. —Digo y cuelgo la llamada. Stacey está descansando. Por fin.

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Mas nada. UwU

Nos leemos Luego ;)

LOSAMO❤️

RossDonde viven las historias. Descúbrelo ahora