Sr. and Sr. Heiwajima

El Último Encuentro.

Una pequeña canción de cuna con un tono ligeramente desafinado comenzó a sonar mientras que Shizuo e Izaya veían aquel apartamento destrozado, ambos estaban en completo silencio. Shizuo fue el primero en comenzar a buscar aquella canción de cuna que a veces incluso se cortaba o sonaba horriblemente mal, había caminado por casi todo el apartamento hasta encontrar aquella caja de música en el piso donde antes Izaya dormía y había tenido a los niños.

>> ¿Donde están los niños? <<

Cuestionaba de nueva cuenta un mensaje en la pared escrito con aerosol, el mismo que habían usado con Shizuo cuando le habían secuestrado, este miraba aquel mensaje mientras sentía como le hervía la sangre, se habían metido con sus niños, se habían metido con lo que él más quería en ese justo momento, ya le habían arrebatado a Kazuka, no dejaría que ahora le arrebataran a sus niños, debía haber alguna forma de rescatarles pero no tenía nada, estaba en blanco y ello solo le irritaba más.

Izaya se había tenido que acercar a Shizuo, antes de tocarle, este solo suspiro, para Shizuo aquellos dos niños ahora lo eran todo y lo entendía, él también sentía cierta... cosa en su pecho, no quería llamarle a aquella "emoción" que ahora le oprimía el pecho y le carcomía, ninguno de los dos tenía una respuesta como tal, mientras Celty se movía de un lado a otro desesperada, había estado buscando a Shinra casi hasta caer en la desesperación. Ambos hombres ahora veían aquel mensaje que parecía que un niño de dos años lo hubiera escrito, era entendible pero era frustrante. Ambos habían hecho un silencio sepulcral, al menos hasta que Celty había entrado, les jaló con algo de fuerza y puso en la cara de Shizuo una nota que estaba escrita a duras penas con la horrible letra de Shinra.

>> "Uno está con quién más confías pero que dejaste de hablar desde la preparatoria y otro está con aquel par que más odias " <<

Otra vez eran estúpidos acertijos, ¿No podía simplemente haber puesto los nombres y ya? Parecía que todos disfrutaban arruinado sus vidas hasta el punto donde ambos estaban acostumbrados a la frustración y a la búsqueda de las respuestas. Izaya había tomado aquella nota mientras pensaba, hablaba de tres personas de las cuales ni siquiera sabía si se encontraban en Ikebukuro o... suspiro pesado, ahora no era momento para pensar demasiado las cosas, debía encontrar la respuesta antes de que Shizuo se volviera loco, con aquel movimiento de su pierna ya anunciaba que estaba desesperado y tendrían que dividirse, al menos así lo notaba por la nota. No habían ni siquiera pasado diez minutos cuando Shizuo estaba rompiendo cigarrillo tras cigarrillo que intentaba meter a su boca para relajarse mientras Izaya pensaba en aquello, aunque la respuesta había aparecido de repente en su cabeza. Jaló al rubio y este suspiro al llevarlo fuera de aquel apartamento, Celty se veía demasiado inquieta así que sería mejor dejarla a ella ahí en el apartamento

—Ve con Mikado y Masaomi, buscales, yo iré a otro lado —

Fue lo único que basto para que Shizuo saliera corriendo tras aquel par que ciertamente odiaba con toda su alma. Izaya suspiro al mismo tiempo que caminaba tranquilamente hacia su destino, ya sabía con quien tenía que ir, pero antes debía hacer una parada, de todas formas, su pequeño, cualquiera de los dos que fuera, estaba completamente bien y a salvo, lo podía apostar.

Shizuo había ido corriendo hasta aquel apartamento que le habían indicado, había hablado con Tom y rápidamente la información la había conseguido, después de todo, habían algunas cosas que Tom sabía aunque pareciera que no. Había entrado a aquel apartamento dándole una fuerte patada sin lograr romper del todo aquella puerta, se había contenido por su nene y aquellas miradas llenas de preocupación le decía que había dado en el blanco. Un llanto se había escuchado al mismo tiempo que su expresión se llenaba de completa furia, les mataría si algo le habían hecho a su niño, se acercó listo para mandarles a volar pero su mal humor se "relajó" al ver que aquel niño solo lloraba porque se acababa de despertar por aquel ruido. Lo tomó y miró a aquel par amenazandoles solo con la mirada