-¿Como sea, irás hoy al meeting?- le preguntó Jehan al llegar mientras subía del comedor del lugar una cerveza para cada uno recordándole con ese gesto a Grantaire, porque adoraba tanto al poeta, pero le negó- deberías, son demasiado serias sin ti, Bahorel está a nada de seguir tus pasos- admitió y soltó a reír cuando vio como Grantaire se fijaba en Courfeyrac dudando que con él presente, pudiera ser seria- a él descártalo, resultó ser como sus inseparables sombras, ponle el tema, quítale la distracción y es como ver tres veces a la misma persona- le puso al tanto, y pese a que al pintor le costó creerlo, lo hizo mientras Jean, tanteaba sus bolsillos hasta encontrar sus cigarros y sacó un par ofreciéndole uno al pintor mientras encendía el suyo
-¿Qué? Ya no fumas- preguntó el ojinegro con mofa al ver que no había cigarro para Courfeyrac
-Si lo hace, pero según él, no en las mañanas- ironizó Jehan con una sonrisa en los labios mientras Courfeyrac se limitaba a subir los hombros entretenido de ver como ponían en duda su pacto de no fumar hasta el mediodía, pero segundos después estaba quitándoselo de los labios el de Jehan para darle un par de caladas añorando la toxicidad en su ser- ves- puyó- pero no lo hace, jamás fuma en la mañana- ironizó aún más dejándose caer en el eterno sillón
Y así fue su mañana, el uno al lado del otro, hablando banalidades sin pasar por alto que poeta y abogado intentando saber que había hecho esos días ausente, no dejaban de intercalar miradas de preocupación por el pintor que después de aceptar almorzar, se despidió. Por momentos, se las ingenió para estar a solas con Jehan, "me alegra verles tan bien" le admitió al despedirse y Jehan solo subió los hombros con lastima por la situación del artista, que hace casi un mes no veía
-Ve hoy, les alegrará verte- le pidió y Grantaire prometió pensárselo
Salió de ahí tomando otro camino de regreso a su piso casi de buen humor de haberles visto y sus pies aprovechando su distracción, le llevaron por la universidad para verle salir escoltado por Combeferre y su mundo se detuvo. Su caótico mundo cimbró con tal fuerza que le tiró a su lado. Su mundo, patético e insípido había al menos vuelto a ser de su propiedad, pero le bastó verle para recordar lo patético que realmente era y añorar su cercanía, su mirada e incluso saciarse de su inagotable odio hacia su ser
Exhaló pareciéndole conocida esa imagen de verle a la distancia escoltado de Combeferre, estaba seguro que eso ya lo había vivido antes, no recordaba cuándo pero aquello ya lo conocía, con una diferencia, esta vez Combeferre le notó
-¿Grantaire?- saludó incrédulo Combeferre al verle unos metros atrás vuelto piedra, con la vista fija en ellos- ¡Grantaire!- repitió despertando del impacto, acercándose a él con una sonrisa de efectivamente alegrarse de verle
Y mientras Combeferre se acercaba a largas zancadas, su repentina ausencia logró captar la atención de Enjolras que hasta el momento, iba más ocupado en avanzar sin dejar de leer un panfleto que llevaba en las manos. Volvió la vista hacia Combeferre y solo se encontró con la mirada negra de Grantaire fija en él, frunció el ceño y tras esperar unos segundos se acercó a ambos
-Ferre, grato ver que ya caminas por cuenta propia- se limitó a saludar Grantaire incapaz de apartar la mirada del despotismo que le dedicaba Enjolras
-¿Qué te ha pasado?- le preguntó el ojiazul de la nada antes que Combeferre respondiera y si fuera poeta, Grantaire aseguraría que el filo de sus palabras le hizo sentir en el cielo, ¿Cómo había podido pasar tantos días sin su presencia?
-Gajes del oficio- logró articular el pintor y ensanchó una sonrisa apenas formada, cuando la mirada de Enjolras cambió a prevención y retrocedió un pasó cuando Grantaire le revisó de pies a cabeza como si le costara creer tenerle enfrente
-¿Te veremos hoy en el meeting?- preguntó Combeferre y para deleite del pintor, vio como la mirada firme de Enjolras le reprochaba esa idea
-No, no quiero importunar, sin duda ha de ser divertido estar hablando por horas sobre... ya sabes, causas perdidas- comentó con cizaña incapaz de apartar la mirada del líder que bufó y puso la mano en el hombro de Combeferre esperando para irse
-Es tu decisión, pero sabes que eres parte del grupo- le insistió el castaño pasando de su amigo- les encantaría verte, nos preocupaste cuando te fuiste de la nada- admitió y al ver que el pelinegro se encontraba incapaz de ver algo que no fuera a Enjolras, exhaló con calma- todos nos preguntábamos donde estabas- le recalcó y eso si hizo a Grantaire esbozar una sonrisa intercalando la mirada entre ambos
-¿También tú?- preguntó sin interés y más bien con burla como quien no creía las palabras de Combeferre- ¿acaso hasta tú, Apolo estuviste a nada de salir en mi búsqueda?, si así fue, maldeciré el haberme dejado ver antes de tal hazaña- se burló casi nervioso de no ver que desmentía a Combeferre mientras su mente susurraba con delicadeza que tal vez pudiera importarle, que dentro de su apatía a cualquier sentir, se preocupara por su bienestar
-Es bueno ver que aun te sostienes en pie- fue todo lo que obtuvo por respuesta de parte del periodista y esta vez fue el castaño que le fulminó con la mirada- ¿vamos?- se limitó a decirle a su amigo dejándole claro que se iría, con o sin él
-Así es, Apolo, para tu tranquilidad aun me sostengo en pie, debo hacerlo si pienso ir hoy a escuchar tus desvaríos- le soltó en un arranque por hacer que se quedara y lo logró, la expresión de sorpresa por parte de Enjolras fue innata, pero se limitó a afirmar e irse- hasta la noche- mofó y no logró que volviera la vista, Combeferre como siempre le puso la mano en el hombro con compañerismo y le sonrió sutilmente- ¿Qué?
-Aunque lo dudes, cuando dije todos, fueron todos, más cuando Jehan fue a tu piso y dijo que nadie atendió- le admitió Combeferre antes de decirle adiós con la mano y retomar camino hacia su piso
Y su ruina volvió, se negó a ir, en un comienzo se aseguró no ir, pero si las palabras de Combeferre eran ciertas, hasta Enjolras, siendo quien le expulsó del grupo sin siquiera importarle, esperaba verle y por él llegó al Musain esa noche dispuesto y decidido a no irse, consciente que le echaría más veces, pero esta vez se quedaría, porque lo había prometido cuando el liderazgo del grupo lo tomó Enjolras y pensaba cumplirlo
Iba a seguir a su lado hasta que no pudiera quedarse porque la vida les daba rumbos distintos o la muerte les llamaba. Él estaría ahí, entró y sintió más calidez que nunca al cruzar esa puerta. No hubo rostro que no se iluminara al verle, tanto que la reunión fue fugaz y pronto se volvió encuentro social
Encuentro en el que incluso, escoltado por Combeferre y Courfeyrac pudo o tal vez Grantaire lo soñó, pero le vio esbozar una sonrisa apenas notoria de verle en el rincón de siempre. Como si siempre hubiera asimilado su presencia, incluso si no sabía cómo reaccionar a ella y cuando no la vio, de verdad hubiera sentido el vacío del lugar, pero volvió a lo suyo cuando el pintor alzó la botella desde su rincón como brindiz hacia él
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Amor Platónico [Pendiente edición]
FanfictionEl amor platónico de Grantaire hacia Enjolras, desde que se conocieron hasta su final. -------------------- La portada no me pertenece, creo según lo q he buscado es de alguien q en su momento se apodaba Mizuk0 pero su deviantArt no lo encuentro...