Capítulo 8.

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Jamás en tu vida sabrás lo que es tener a reina como yo.

El ambiente era tenso, Glenda sacó su celular de su bolsa Gucci.

-¿Es original?

Pregunta Jessica colocando su bolso Gucci en su mano, Glenda la observo y levantó su ceja perfectamente depilada y maquillada.

-Es tan original como....- la recorrió de arriba a bajo.- te diría como tú nariz pero al parecer se la copiaste a Michael Jackson, ahora si me permites.

Se gira a ver a Peter que contiene una risa, se aclara la garganta y acomoda su corbata.

-Como te decía Glenda, Jessica tiene talento para los negocios.

Jessica toma un catálogo con pasta color negro y en letras manuscritas se puede leer "Jessica Caban".

No, no es como las mujeres con las que suele convivir, se nota que ha llevado una vida normal, mujer de familia y rodeada de amor. Ahora tiene otro motivo para no prestarle atención.

-Señorita Fenty, tengo varias casas que le pueden gustar.- se sienta a lado de ella y abre su catálogo.- ¿quiere, residencias, departamentos, casa familiar? ¿Que es lo que busca?

<<Un hombre como tú prometido >>

Observa a Bruno y le guiña un ojo, este le sonrie y se gira a hablar de nuevo con su padre.

-Busco algo, grande... Demasiado grande.

-Tengo esta nueva mansión en las afueras de la ciudad, es muy buena y casi no tienes vecinos.- le muestra la hoja con una gran casa de cristales que convinan perfectamente con las paredes color marron, es preciosa y perfecta para ella.- Es muy elegante pero dudo que puedas pagarla, tengo otra que esta más o menos bien.

Glenda la observa molesta, toma su celular y busca en su galería hasta que da con las imágenes.

-Está es mi casa, Jessica.- Glenda observa como se queda Jessica boquiabierta.- Es solo que ya me aburrío.

-Tú también llámame por mi apellido

-¿Cuando haz visto que una sirvienta se iguale con su gefa Jessica?.- se gira y observa a Bruno que esta con su padre revisando unos papeles.- El dinero no es problema para mí Jessica.

Se pone de pie y camina hacia los hombres, ve el papel que tiene Peter entre sus manos y frunce el ceño.

Paciente: Tahiti Hernández Bayot.

Con el presente poder que se me otorga, yo el doctor: Rodrigo Vareta Suntio, describo a la paciente Tahiti Hernández Bayot con depresión crónica.

Los siguientes antidepresivos tricíclicos se le serán aplicados ya que estos medicamentos —como la imipramina (Tofranil), la nortriptilina (Pamelor), la amitriptilina, la doxepina, la trimipramina (Surmontil), la desipramina (Norpramin) y la protriptilina (Vivactil)— pueden ser muy efectivos para su tratamiento intensivo.
Siempre y cuando se le sena aplicados por un tutor.

-Pero suelen causar efectos secundarios más graves que los antidepresivos más nuevos. Por eso, no se suelen recetar a la ligera.- Glenda observa a Peter y frunce el ceño.- Al menos que ya haya  probado primero un inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina y no haya tenido mejoras.- Bruno la observa con cierta curiosidad.- ¿Que edad me dijiste que tenia tu hija Peter?

-16 años ¿Porque?

Glenda frunce el ceño y niega con la, cabeza.

-Olvídalo no es de mi incumbencia.

Le presencia de Bruno no ayuda en absolutamente nada, solo la ha puesto nerviosa y le hizo sentir algo extraño en su estómago, algo que ella no supo descifrar bien.

El día transcurrió y no volvió a ver ni ah Bruno y mucho menos a su pretenciosa prometida, había dado un par de recados ha Peter y estaba dispuesta a salir de su trabajo.

-¿Te llevó ángel?

Glenda se quedó estática ante aquella voz tan varonil, Bruno era guapo, demasiado para ser humano. Se parecía demasiado a Peter y se comenzó a reír al pensar que la depresión de su hija se basaba en la similitud de su padre y hermano.

Glenda se gira y observa a Bruno que estaba semi centado con las piernas cruzadas a la altura de sus tobillos ese hombre transpiraba arrogancia, mientras él la observa con una sonrisa dejando ver un par de hoyuelos.

-Gracias pero.- toco el mando se su auto y este encendió las luces.- Yo traigo el mio.

-Que lastima.

La oscuridad no dejaba ver bien el auto de Bruno, Glenda camino un par de pasos más y él moreno se le emparejó y bajo de su auto.

La mujer rizada se quedó pasmada al ver el auto de Bruno un Lamborghini Veneno valuado por 8,5 millones de dólares.

-¿Bonito no?

-Bastante.

Bruno la tomo por la cintura y la pego a su labios, Glenda abrió sus ojos demasiado ante el impulso del moreno.

Ella se aparto, pero no porque una futura esposa se apareciera, si no porque le diría "adiós" a su preciosa casa.

-¿¡Estas loco!?

-¿Crees que no me di cuenta sobre tu coqueteo? Además.- tomó la cadena que le había dado Peter.- ha papi, no le va importar compartir con su hijo.

Glenda se molesta demasiado al punto de temblar de coraje, Bruno se aleja y entra de nuevo a su auto.

-Entonces nos vemos mañana ángel.

-¡JÓDETE!

Fue lo único que dijo cuando las llantas del moreno rechinaron en el piso del estacionamiento.

Candy Pop (terminada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora