Las primeras reglas son fáciles:
1.- Jamás desobedecer a papi.
2.-Siempre ser bonita y estar dispuesta.
3.- Ser una chica buena.
4.-Elegante a la hora que sea.
5.-SIEMPRE ATENDER AL APODO DE PAPI.
...
Esta novela tiene contenido explícito, si lee...
Nadie es mejor que yo, ni tú, ni el estúpido hombre de cabellos rizados.
Glenda llegó de nuevo al edificio, tuvo que recurrir a su amigo de hule para quitarse las ganas que le dejó el moreno.
Ya la había echo perder tiempo con sus juegos, se tuvo que decidir por usar un pantalón entallado escocés y una blusa de lana color mostaza, las escaleras le habían echo papilla los pies y opto por una zapatillas deportivas marca Nike.
-Necesito saber quien te viste muñeca.- dice Gustavo mientras entra con ella al ascensor.- Tengo una cita con Eric.
Dice con un poco de desgano, Glenda lo observa y sonríe, Gustavo a sido su mejor amigo desde siempre, es él gay más gay que ha conocido, a leguas se puede notar que el que manda ahí es Eric.
-¿Y porque la cara larga?
-Él.- suelta el aire un poco dolido.- cree que le soy infiel.
-¿Y?
-Glen sabes que es mentira... Eric esta paranoico.
Glenda ríe y el ascensor se detiene en el segundo piso al abrirse se encuentra con un Bruno tremendamente guapo y Jessica enviando un texto.
-Joven Ashton... Señorita Fenty.
-Señor Hernández.
Saludan al unísono, no hay miraditas entre ellos y en realidad es lo único que dice, no más.
-Eric es guapo Glen.
Dice Gustavo comportandose más varonil haciendo su voz más gruesa, Glenda ríe un poco.
-Si que lo es... Eric tiene buen gusto.
-Siempre le han gustado las rubias.- Gustavo le guiña un ojo y Glenda vuelve a reír.- son su débilidad.
-Lo sé Gus, me consta.
Gustavo es rubio y tiene la nariz afilada, una operación que le costó demasiado a Eric.
Glenda ve por el rabillo del ojo y ve como Bruno ha besado a Jessica, Gustavo le aprieta la mano y le señala con la mirada a las personas que están detrás de ellos.
Vuelven a reír y ha Glenda se la echo de piedra el estómago, la sangre le comenzó a hervir y su respiración se agitó un poco más.
-Por cierto Glen.- Dice Gustavo mientras se trasculca en su saco.- me han dejado este recado para ti.
Le entrega un sobre color café sin nombre, ni dirección.
-También te trajeron unas rosas preciosas y un regalito extra, pero esas no las hiba a guardar aquí.- señala el bolsillo.- Ojalá y también me enviaran flores... Bueno guapa nos vemos en el almuerzo, voy a estar por tu piso, paso por ti... Con permiso señor Hernández.
-Propio.
-¿Y... Quien nos envió dinero esta vez?¿El anciano que pagará tú casa?
-Caban, callate.
Dice Bruno.
-Si Jessica cállate, eres como un puto cólico mujer.
Glenda se gira de nuevo y el reflejo de la puerta del ascensor deja ver como los ojos de Bruno observa el sobre y después a ella.
El ascensor llega a la última planta, las puertas se abren y dejando ver el arreglo de rosas color rosa, blancas rojas.
Junto a una caja Gucci.
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Frunce el ceño y de nuevo ve el sobre, Jessica se acerca a una distancia razonable se gira sonriente hacia Bruno.
-¿Porque no me regalas cosas así Bruno?
-Jessica por favor, hace poco te di flores.
-Bruno eso fue hace casi dos años.
-Además ¿Para que quieres las flores? ¿Eres al caso una abeja y les vas a sacar el polen?
-No, pero...
-Pero nada, ahora camina que papá re quiere ver.
La empuja un poco y hace que se adelante a la oficina de su suegro.
-¿Al caso no te dije que no te quería compartir ángel?
-Jódete Hernández, mejor ve y comprale flores a la mosca de tú mujer, que ni a abeja llega la pobre.
Coloca el sobre a un lado y Bruno lo toma.
-¿Si sabes que leer lo que no es tuyo... Es de muy mala educación?
-Vamos ángel.- la toma de la cintura y la pega a él.- nada de lo que hicimos hace un rato fue educado.
Miran ambos la puerta de Peter, regresan ambas vistas a encontrarse, para después besarse.
-Me gustas más de vestido ángel.
Dice Bruno jugando la orilla de su suéter color mostaza.
-Bueno... Cierto hombre me quito el tiempo esta tarde.- beso sus labios cortamente y a dejo las rosas atrás de su silla.- por eso decidí venir más cómoda.
Se gira y ve a Bruno que está sorprendido con el sobre suspendído en el aire.
-¿Estas bien? ¿Bruno?
-¿Abner es tú padre?
Glenda traga saliva y le quita el sobre de las mano a Bruno.
Glenda :
Hija mia por favor acepta este detalle que te envió... Por favor no los tires a la basura son enviados con mucho amor.
Alguien me dijo que te gustaban las cosas caras, te he enviado una gargantilla con una perla.
Espero y te guste.
Abner Fenty.
Las manos le tiemblan y las lágrimas amenazan con salir, respira profundamente y la perra sin corazón volvió.
-Largo Jessica necesito hablar con Peter.
Dice con las rosas y la caja en la mano.
-Glenda esos modales.
-A la mierda los modales Peter, lárgate Jessica oh me desquitare contigo, estúpido silicon con piernas.
Le cierra la puerta en la cara dejando a ella y Bruno afuera.
-¿Quien mierda permitió que me dejaran rosas?
-¿Quien te ha regalado rosas?
Le deja caer la nota a Peter y la comienza a leer.
-¿Abner es tú padre?
-ESCUCHAME BIEN PETER SI QUIERES SEGUIR CON ESTE ESTÚPIDO JUEGO SERÁ MEJOR QUE NO VUELVA A VER ALGÚN REGALO PARECIDO DE ESE HOMBRE.
-Caramelo, cálmate.
-No Peter, no me pidas eso... Sabes que mira mejor me voy a mi lugar de trabajo y lo que necesites me llamas.
Toma la caja y las rosas de nuevo dispuesta a tirarlas a la basura, abre la puerta y ve a Jessica con la oreja pegada tratando de escuchar.
-Ten Jessica tienes cara de que jamás en tu vida te han regalado algo caro.- le avienta la caja a los pies junto a las rosas.- Ahora ¡ESFUMATE!
