¿Qué Le Pasó A Connor? ¡COMPLETA!

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-No sé.

-¿Seguro? Quizá es otra de tus mentiras.

Mire a mis papás quienes tenían la cara seria sin decir ni una sola palabra.

-Enserio no lo sé.

-Para tu desgracia yo si reconozco el número. Es el mismo que encontramos en el teléfono de Connor. Alessa Miller.

Abrí mis ojos al escuchar al policía.

-¿Tienes miedo acaso? -Dijo otro de los policías que estaba en la habitación-

-¿Por qué? ¿Debería? -Contesté-

-¿Quién entro por tu ventana? -Dijo el policía moreno quien me miraba enojado-

-No lo vi.

-¿Cómo no lo vas a ver? -Dijo el otro policía riendo-

-No, solo miraba una sombra.

-¿Cómo la que miraste el día de tu escuela? -Dijo papá-

Miré al piso y asentí.

-Paranoias eh -Dijo el policía- al parecer ya está avanzando -Tomo un respiro y siguió- tanto como para levantarte a las 3:30 abrir la ventana y comenzar a escribir el mensaje a esa chica para tener cuartada de que viste a alguien entrar, bajar a la cocina tomar un cuchillo e ir al cuarto de tu mamá y encajarlo en su estómago.

-¿Qué? -Grite y me levante de la silla- ¿Enserio? -Dije mientras miraba a mis padres- Podre mirar cosas y escuchar pero jamás le haría daño a mi mamá o a alguien.

-De eso no podemos estar tan seguros -Dijo el policía-

-Mamá -Dije mientras le miraba a los ojos-

-Cris, yo te vi, estaba todo oscuro pero puedo jurar que eras tú. Te amo hijo pero tu lo hiciste -Dijo tomandose la herida bendada-

-Necesitas tratamiento muchacho.

Yo negaba y negaba.

*Se qué no lo hice, no estoy loco como todos piensan ¿O sí?*

-Es curioso que tengamos nuevamente involucrada a esa problemática.

-Alessa Miller, creo que esa chica siempre tiene algo que ver en los casos.

Ambos policías hablaban de Alessa.

-Firme aquí para que su hijo reciba un tratamiento más fuerte.

Mamá firmo al igual que papá,yo solo miraba al piso.

Ambos policías se retiraron y yo me senté en la silla.

-¿Enserio piensan que fui yo?

-Cristian no buscamos culpables solo queremos lo mejor para ti.

-Si ya lo sé papá, tanto que me quieren meter tanta droga como sea posible.

Dije y me levante abriendo la puerta del cuarto.

-¿A dónde vas? -Me dijo mamá-

-Tengo escuela -Le contesté y sin esperar respuesta me sali de la habitación-

Camine rapido saliendo del hospital avanzando unas cuantas cuadras.

Ya no faltaba tanto para llegar a la escuela y no soportaba el dolor de cabeza.

*Nervios, estrés, ahora mis padres me tendrán miedo. Soy maldito loco*

El sonido de un claxon hizo que saltará del susto.

-Subes o te subimos -Me dijo Alexander desde su carro, donde ya venía Carter arriba-

Me subí en la parte trasera.

-Que feo te ves, maldito ojeroso -Dijo Carter riendo-

-¿Lejos de casa no? -Dijo Alexander-

*¿También sabe dónde vivo?*

-Sí, mi mamá está en el hospital -Me quedé callado- entraron a la casa y la acribillaron.

-¿Y está bien? -Pregunto Alexander un tanto preocupado-

-Sí. -Contesté friamente-

Llegamos a la escuela y mire a Alessa caminando, un dolor fuerte de cabeza hizo que los oídos me zumbaran, me queje un poco y Alexander solo me miro, no lo escuchaba.

Comencé a parpadear una y otra vez para cuando levante la vista todos me miraban con una sonrisa de oreja a oreja y enseñaban sus dientes, todos inclinaron su cabeza al lado izquierdo pero sin quitar la sonrisa, cada vez abrían más y más sus ojos. Todos me rodeaban. El aire comenzaba a faltar y todos se acercaban un paso más cada que mi respiración disminuía, tomaban su rostro y arrancaban partes de piel, cada que lo hacian soltaban una carcajada que hacía que me estremesiera, estaban tan cerca de mi.

-No -Grite mientras el aire se me iba- ¡Ya! Déjenme.

La bofeteada de alguien me hizo entrar en razón.

Alessa estaba parada frente a mí.

*Santo putazo que me metió, me arde, esta sí que tiene formas muy diferentes de sacarme de las paranoias*

Alexander ni Carter estaban a mi lado y Alessa ya se había dado la vuelta para irse.

-Alessa -Dije y la tome de la muñeca-

-¿Qué? -Dijo molesta-

-Gracias.

-Bien, suéltame.

-¿Cómo supiste qué habían acribillado a mí mamá? Nunca te dije.