Derpy desayunaba sola, como siempre. Ya se había acostumbrado a que sus padres salieran temprano hasta en fines de semana, pero por primera vez había tenido la esperanza de comer junto a alguien más, y ése alguien era el Doctor, la persona a la que le debía ya mucho.
Tomó una cucharada más de cereal con leche mientras pensaba en él. Era un buen chico: jovial, activo y siempre buscando la mejor forma de ayudar. Sin embargo, en las últimas noches, creyó escuchar algo muy diferente desde su habitación.
Llantos.
Y las paredes no eran tan delgadas como para que pudiera oírlo sin dificultad. Durante toda la semana, en algún momento de la noche, comenzaban los llantos, seguidos de palabras imposibles de entender y terminando con una frase que lograba destacar: "Lo siento. Lo siento tanto".
Cada. Noche.
"¿Por qué se comportará así cuando duerme?", se preguntó la chica de piel ceniza, "Él no es así. ¿Qué pasará por su cabeza? ¿Qué no me está contando?"
Sus pensamientos se vieron interrumpidos con el sonido del timbre. Fue corriendo a la puerta, y su cara se iluminó como el sol cuando vio de quién se trataba.
-¡Carrot!- Ditzy abrazó a su amiga de hace años, y ella regresó el abrazo.
-¿Qué hay de nuevo, Ditz?- La chica de cabello naranja y ojos verdes se separó del abrazo y entró a la casa.- ¿Algo interesante mientras me fui?
-Oh, para nada. Todo ha estado muy aburrido sin la gran Carrot Top por aquí. ¿Y qué me cuentas tú? ¡Tu viaje a Manhattan debió ser interesante!
-Es una ciudad hermosa, Ditzy. Aunque tras dos meses una no puede evitar extrañar el viejo vecindario, la escuela... e incluso a los amigos.
Ambas sonrieron. A pesar de la actitud hosca de Derpy, Carrot Top siempre estuvo a su lado. Una amiga incondicional en los tiempos de duda y angustia. Y la chica de ojos bizcos le correspondía bien.
Las dos chicas se empezaron a poner al día: Carrot le contaba a Derpy de su viaje, y ésta a su vez le decía las pequeñas cosas que habían pasado durante su ausencia.
-¿En serio? ¡No puedo creer que Flash rompiera con Shimmer!
-Te juro que pasó. Oh, y procuré hacerme un poco más sociable.
-¡Ditz, eso es fantástico! ¿Tienes nuevas amigas? ¿Quiénes son?
-Un grupito muy variado, Carrot: Bonbon, Lyra, Vinyl y Octavia.
La expresión de sorpresa de Carrot Top fue hilarante.
-¿Qué? ¿Lograste unir a dos de las parejas más disparejas de la escuela?
-Bueno, decir que fui yo sería exagerar.- Comentó la rubia.- Hay un chico que vive con nosotros. Inglés. Él me ayudó.
Carrot cambió su semblante a uno de preocupación.
-¿En serio? ¿Cómo se llama?
Derpy iba a contestar, pero el sonido de la puerta abriéndose la interrumpió.
El Doctor entró a la casa mientras cargaba una caja realmente grande. Contenía una vasta cantidad de objetos increíblemente raros y excéntricos: un bat de croquet, una bufanda estúpidamente larga, una flauta y un gran enredo de cables, entre otros utensilios.
-¡Buen día, Señorita Hooves! ¡Traje un par de recuerdos de casa! ¡Oh, las historias que debo contar--!- El Doctor se calló de inmediato cuando notó a la visita.
-Ehhh... Doc, le presento a Carrot Top. Una muy querida amiga mía. Carrot, él es John Smith, pero prefiere que le llamen "el Doctor". Es el chico del que te conté.
-¡Oh, encantado!- El Doctor le estrujó la mano a la pelirroja.- Cualquier amiga de Ditzy es mi amiga.
-También es un placer por mi parte, Doctor.- Respondió en un tono muy serio.
-Bueno... si me permiten, voy a subir a mi habitación.- El Doctor se fue, y las dos siguieron hablando, aunque sin el ánimo de antes.
Unas horas después, Derpy se hallaba junto a Carrot Top frente a la puerta de su casa. El sol empezaba a ocultarse, y era la hora del adiós.
-Es bueno tenerte, de vuelta Carrot.- Las dos chicas mostraron una sonrisa radiante, pero Carrot Top retomó su expresión seria de hace rato.
-Ditzy, ¿puedo hacerte una pregunta?
-Claro.
-¿El Doctor es confiable?
Los ojos de la rubia se enderezaron debido a la confusión.
-¿Por qué la pregunta?
Carrot dejó salir un suspiro.
-Ditzy, necesitas saber si es una buena persona. Debes conocer sus secretos. ¿Quién dice que no está actuando para, no sé, secuestrarte o algo así?
-¡Ay Carrot! Me ha contado su historia. Es una buena persona.
-¿Pero te la contó TODA?
Derpy no contestó. La pelirroja le puso las manos en los hombros y la vio directamente a los ojos.
-Escucha: tú eres mi mejor amiga, y sólo quiero que estés segura. Ése chico no me da nada de confianza. Creo que oculta algo, nadie puede ser tan alegre sin tener un lado oscuro detrás (incluso Pinkie Pie pasó por una etapa muy perturbadora cuando se peleó con sus amigas).
"En serio, Ditzy: investígalo. Y si hay algo que no te de confianza, sácalo de tu casa".
La aludida sólo pudo asentir, aunque más por reflejo que por convencimiento. Las dos chicas se dieron un abrazo y Carrot Top entró a su casa, mientras Derpy volvía a la suya.
Mientras caminaba de regreso, no pudo evitar pensar en lo que le dijo su mejor amiga: en cierta forma tenía razón, el Doctor le ocultaba cosas.
Y era hora de descubrir qué.
ESTÁS LEYENDO
Equestria Girls: Las Aventuras del Doctor y Derpy
ФанфикEl Doctor finalmente llega a la ciudad de Canterlot, en esta ocasión contará con el apoyo de una nueva compañera: Derpy Hooves. Esta historia narra los eventos anteriores y posteriores a las películas y especiales de Equestria Girls. Historia origin...