Capítulo XXIV.- Pesadillas: El Veredicto

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Derpy había usado la máquina del Jurado para entrar a la mente del Doctor, ahí se encontró con una montaña de recuerdos del Doctor, en la cual Derpy presenció la gran variedad de acontecimientos que dejaron huella al Doctor en todas sus encarnaciones. Durante el recorrido, nuestra amiga de ojos bizcos se encontró con el Maestro, quien le mostró a Derpy las malas acciones realizadas por el Doctor; por otro lado, Martha Jones, otra compañera de antaño del Doctor, se manifestó también en el sitio, y gracias a uno de sus artefactos, Derpy pudo ver con claridad los recuerdos buenos y acciones buenas ejercidas por el Doctor en toda su existencia. 

Todo este choque de recuerdos y de posiciones, hicieron que Derpy comenzara a entrar en un estado de completa confusión, dejándola dividida entre dos opciones que definirían su estado de relación con el Doctor.

- Ahora veo todo... - piensa Derpy - Acabo de ver las dos caras de la misma moneda... Y ahora, me encuentro en medio de la incertidumbre... ¿Me quedaré con él, o le diré adiós? Nadie lo sabe, pero la decisión que tome será la que determine mi destino. -

En cuestión de segundos, mira hacia Martha Jones y hacia el Maestro, quienes dentro de sus pensamientos, le decían a Derpy, casi a gritos, que tomara la decisión que creen que sería la correcta para Derpy.

- Escucha bien, amiga. - decía la señora Jones - Por lo que más quieras en este mundo y en este universo, te pido que confíes en el señor Smith. Es la única salida para... -

- No le hagas caso a esa demente - interrumpe el Maestro - Te lo vuelvo a repetir otra vez: Ya no vuelvas a confiar en el Doctor nunca más. Te lo digo como amigo y como consejero. -

- Pero... - dice Derpy - No sé qué decir... Yo solo... - dice Derpy, quien continúa con su indecisión - Yo solo... ¡Quiero estar feliz! - 

Derpy comienza a derrumbarse y a llorar desesperadamente, pero de repente, escucha la voz de sus amigas...

- No te rindas, Derpy - dice Bonbon, - Nosotros te apoyamos en lo que tú digas. -

- Tienes que tomar la decisión correcta - replica Lyra, - No hay más tiempo qué perder. -

Vinyl comienza a hacer pulgar arriba como señal de apoyo a Derpy.

- Sólo así podrás vivir en paz. - declaró Octavia.

Inmediatamente, todas las amigas comenzaron a lanzar urras y porras a Derpy para que ella recupere su autoestima y comenzara a tomar la decisión.

En cuestión de segundos, Derpy comienza a levantarse y se pone de pie frente al Maestro y frente a Martha, quienes se percataron de que el rostro de Derpy ahora era un rostro de decisión y de valentía.

- Y bien, - dijo la señora Jones - ¿Vas a confiar en el señor Smith? -

- Decídete de una vez, maldita sea - exigió el Maestro - ¿Vas a admitir que el Doctor ha cometido atrocidades? -

- Bien, lo admito - dijo Derpy - Tal vez el Doctor ha realizado numerosos actos criminales y que pueden ser imperdonables, y tal vez lo que el Maestro diga sea verdad... Pero he comprendido que, pese a esos errores, el Doctor también tiene su lado bueno y un gran corazón lleno de nobleza y sinceridad. - continúa - Hay algo que el Doctor no me ha enseñado, pero que lo aprendí de alguien más; he aprendido a perdonar a quienes han cometido agravios y ofensas, incluso si son comparados con lo peor que podría crear el hombre. Y por ello, decidí seguir siendo la leal compañera del Doctor, y lo seguiré acompañando en sus aventuras por ahora. -

Poco a poco, Derpy comienza a caminar hacia Martha, y ella también se acercó a Derpy.

- Felicidades, Ditzy Doo - dijo la señora Jones - Has tomado la decisión correcta.

- Muchas gracias, pero será mejor que me llames Derpy. - 

- Bien hecho... ¡Derpy! -

Derpy finalmente tomó la decisión de su vida. Aquella travesía por la mente del Doctor llevó a Derpy a una especie de juicio hacia el Doctor; el Maestro había sido su fiscal, la señora Jones fungió como la defensora; mientras que Derpy, como juez y jurado, finalmente ha dictado su veredicto final. Derpy estaba feliz y contenta, al saber que tomó la mejor decisión de su vida.

- Bien compañeros. - dice Derpy - Ya me tengo que volver a la realidad. 

- Quizás te hayas salido con la tuya esta vez, niña tonta, pero ni creas que han ganado todavía - exigía el Maestro con enojo - Algún día los encontraré, y la victoria tendré. - el Maestro comenzó a soltar varias risas.

- Nos vemos luego, Derpy. - dice Martha - Si ves al señor Smith, salúdalo de mi parte. - 

Inmediatamente,  Derpy volvió por el gran pasillo de los recuerdos del Doctor, hasta que finalmente dio en el blanco al encontrar aquél sótano por el que había llegado a la mente del Doctor; acto seguido, Derpy vio que habían unas escaleras, a las cuales tomó y luego subió, y de repente, vio una enorme luz que iluminó fuertemente...

Pasan algunos minutos, y de repente, vio que estaba prácticamente en su cuarto; ahí se encontró con el Doctor, quien seguía estando dormido.

Luego, vio al reloj y se percató de que eran las 4:20 de la mañana, por lo que Derpy comenzó a dormir también.

Más tarde, cuando el nuevo día amaneció, el Doctor comenzó a despertar, y en cuestión de minutos, trató de despertar a su amiga.

- Derpy... Derpy... - decía el Doctor - Derpy, despierta. Yo soy tu amigo, el Doctor. -

- Doc... - Derpy comenzaba apenas a despertarse - ¿Hay alguna novedad al respecto? -

- Nada. - contestó el Doctor - Tuve un sueño muy interesante. -

- ¿En serio? -

- Si; soñé que estaba en una especie de juicio, o algo así. -

En cuestión de minutos, Derpy y el Doctor comenzaron a prepararse para un nuevo día en la Escuela Canterlot. ¿Qué nueva aventura acompañará al Doctor y a su asistente?

Equestria Girls: Las Aventuras del Doctor y DerpyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora