Sakura Hyuga

Capítulo 6

Madara Uchiha había nacido en la Guerra. Su alma y cuerpo estaba bañada en sangre sin nombre desde antes de su nacimiento.
Sus hermanos habían perecido en la guerra. La eterna batalla contra los Senju ya había derramado suficiente.
Entonses apareció él. Él chico sin apellido. Con quien se encontró un día en el río.
El chico era Hashirama y el Madara, por primera vez sólo Madara.
Ambos tenían un sueño. crear un lugar donde no importaran los clanes. Dónde no hubiera más sangre derramada.

En Hashirama, Madara encontró compañía. Encontró a alguien con quien compartir sus inquietudes sin que le juzgará.

Lamentablemente todo se vino abajo cuando sus familias descubrieron su amistad.

Los Uchiha y los Senju nunca serían amigos.

Pasaron años en los que ambos clanes combatieron sanguinariamente. Entonses Hashirama le propuso una tregua. Y aunque al principio Madara se negó. El también deseaba que todo acabará. Crearon juntos Konoha , la aldea oculta entre las hojas. Y este modelo fue inspiración para otros países, quienes también sus aldeas. Suna, kumo, Iwa, y otras le siguieron.

Y como en todo pequeño o gran sociedad tenía que existir un representante. Alguien que vigilará y defendiera los intereses de todos.
Necesitaban un Hokage.
Y para ellos existían dos candidatos Madara y Hashirama, para ser más democráticos el pueblo fue quien eligió.

Y el carisma y alegría de Hashirama le brindó el puesto.

Madara se lleno de odio. La envidia corrompió su alma. La maldición de el odio que venia de siglos atrás. ... desde Indra.

Madara sabía que el uso excesivo de el Sharingan conducía a la ceguera al portador. Más aún durante una batalla utilizo el ultimo recurso. El Izanagi. Un jutsu con el cual alteraba sucesos. Pero el costo era la luz de un ojo.

Madara dependía de sus Sharingan y sabía donde obtener unos nuevos. Izuna. Su hermano menor. Lo mató y obtuvo el Mangekyo Sharingan eterno.
Ahora tenía el poder suficiente y la maldición de el odio más fuerte que nunca.... el Senju caería. ...

Se enfrentó a una batalla en la que todos creyeron que  ninguno regreso, sin embargo Madara aunque muy herido sobrevivió.
Y todo gracias a un extraño ser que apareció. Quien se presentó como Zetsu.

Al pasar los años y bajo muchísimo estudio Madara quien de lejos observaba a el legado de los Senju descubrió un jutsu que Mito utilizo. Y este mismo que le fue heredado a la Nieta Tsunade Senju.
Con el desarrollo un jutsu que le permita permanecer joven y sano. Pero tuvo un error. Su chakra se volvió completamente inestable, corriendo el riesgo de morir. Madara decidió sellar su chakra. Pero con toda la inestabilidad el sello resultó tan fuerte que ni el mismo sabía cómo romperle.

Madara sabía que tendría tiempo para vengarse de Konoha y la decendencia Senju. La maldición de el odio caería sobre todos.

Cuando se encontró con un chico Uchiha casi agonizante. Madara vio casi una oportunidad.
Quizá manipularle. Sin embargo el confiarse fue su mayor error. Le envío a liberar al Kyubi quien residía en la esposa del Cuarto Hokage. Pero el mocoso le traicionó. Les dio información de él y al final término arrestado dentro de el templo Nakano.

No le sentenciaron. Gracias a ninjas sensores creían que su chakra estaba extinto. Lo dejaron morir lentamente. Los años pasaron y Madara se la pasaba tratando de romper el sello de su chakra sin embargo todo resultaba inútil.

Habían pasado diez años desde su arresto. Y durante todo ese tiempo Madara no dejo de recordar su pasado.

Y un buen día sintió un chakra entrar al templo. El chakra se acercó hasta donde estaba el. Y Madara se encontró con una niña que al verlo se sonrojo. Y al observarla Madara secretamente la encontró adorable.

La niña se presentó como Sakura Hyuga. Y él lo hizo como Madara. Solo Madara.

Y a pesar de que en reiteradas ocasiones Madara le pedía que se largara la niña siempre volvía. Y con el paso de el tiempo Madara se acostumbro a su presencia.
La niño le hablo acerca de ella. Y Madara descubrió que la mota rosa también tenía sangre Uchiha. Supo que esa niña era un diamante en bruto. Entonses la entreno. Pensó que quizás de esa manera pulir a una arma para un futuro.
En un principio le había parecido deshonroso el que una Uchiha se desposara con un Hyuga sin embargo observó los beneficios en sakura el Sharingan y Byakugan en una sola persona.
Sakura también le contó acerca de sus padres y su muerte. Y como ahora vivía con su tío Shisui y su hermano Neji. Le hablo de la aldea y también del distrito Uchiha y Madara se sorprendió cuando está describió a los Uchiha como cálidos.
Madara pensaba en sakura como una herramienta.

Pero sus planes se vinieron abajo cuando se vio cautivado por la inocencia y perseverancia de la menor. Madara sintió calidez por primera vez. Y pensó que quizás eso hubiera sido el sentimiento de tener una hija.

Madara miro a hacía su pasado.
Miro todos sus errores y se dio cuenta que si el odio nunca hubiera entrado en su vida, él quizás hubiera podido ser feliz.

Madara instruyó a Sakura en diversas técnicas ninja.
La volvió su legado. Esta vez a sin ninguna maldición.

Tres años pasaron desde que conoció a la pequeña.
Ese día ella había ido emocionada a contarle que había aprobado la prueba. Y ahora era oficialmente una gennin. Aunque Madara sabía que el nivel de sakura era superior al de un junnin. La felicito y le dijo que debía traer orgullo al clan ya que el mismo Madara Uchiha le había entrenado.

Sakura se sorprendió por que era la primera vez que escuchaba el apellido de Madara. Ella creía que era una coincidencia que su Sensei Madara compartiera nombre con el fundador de la hoja. Pero Madara le explico del jutsu. Y también le contó que estaba cansado.

Madara decidió entonses que era al fin el momento de partir de este mundo. Al fin se había reconciliado con su pasado gracias a la ojiverde. Y ahora quería descansar.
Después de todo el legado de Madara no se perdería. Había encontrado a una digna sucesora.
Y Madara tenía en mente darle un regalo de despedida. Uno que le sería útil en su futuro. Después de todo Madara sabía que le esperaba un largo camino. En el que tendría que ser fuerte para no caer en la oscuridad.

Madara logró romper su sello. Pero todo el chakra que habitaba en su cuerpo fue concentrado. Madara le dio su chakra a sakura. Lo sello dentro de ella para que este se liberara cuando ella lo necesitase.

El traspaso de chakra hizo que Sakura se desmayara.

Y de las sombras apareció Shisui Uchiha. Quien siempre estuvo enterado de las visitas de Sakura a Madara.

Madara le pidió a Shisui que guiara y protegiera a sakura.
Ademas le dijo que enviaba un mensaje a los ancianos y al clan.
Sakura Hyuga, era la sucesora e hija adoptiva de Madara Uchiha.

Madara dio un beso en la frente a una desmayada sakura. Camino hacia su cama y extinguió lo ultimo de su chakra.

Madara murió una tarde. Lo hizo pacíficamente después de haber cerrado las cicatrices de su pasado. El sabía que había dejado un legado. Pero esta vez no. Cometería los mismos errores que el ni se dejaría llevar por la maldición de el odio.

Madara amo a sakura como una hija y un Uchiha ama como nadie.
Madara murió en paz.