"La Marca"

Capítulo 18: "Aprendiendo junto a ti"

Los rayos de sol entraban por la pequeña ventana de la cabaña de madera donde una jovencita pelinegra estaba dormida sobre una manta haciendo que estos al posarse sobre el rostro de la jovencita despertara.

Ya amaneció, dijo Milk mientras estiraba sus brazos al tiempo que miraba a su alrededor.

No está, ¿saldría a buscar algún fruto para comer?, pensó la pelinegra al tiempo que se ponía de pie para salir en busca del joven de cabello alborotado.

Ni pensar que en un principio pensé en escaparme de este lugar pero al darme cuenta de que él no es malo y que además le di mi palabra de ser amigos para conocernos más desistí de esa idea pensaba la pelinegra mientras salía de la pequeña cabaña.

Corporación Capsula:

Un gigantesco rey miraba a las pantallas de un computador junto a un hombre mayor de cabello lavanda.

Como ve, no hay rastro de esa nave en ninguna zona de las que vengo monitoreando, lo más extraño es que incluso no hay rastro de ella desde que ingreso al planeta creo que la nave en la que vino ese joven alienígena cuenta con un sistema que le permite que la señal de la nave no pueda ser monitoreada por nada, dijo el señor Brief.

¿Y ahora que hare?, si tú con tu tecnología no logras detectar esa maldita nave, ¿Cómo encontrare a mi hija?, si los soldados y la policía hasta ahora no la encuentran, dijo el rey preocupado.

Solo se me ocurre algo, dijo el señor Brief.

¿Qué?, dijo el rey.

La señal de la nave se puede captar cuando entra a nuestra orbita, dijo el señor Brief.

¿Y eso de que sirve?, dijo el rey.

De mucho amigo, podrías mandar naves a vigilar el planeta, así cuando yo desde aquí monitorice su salida en la órbita les emitiré una señal para que rodeen a la nave y no permitan que él pueda seguir avanzando, dijo el señor Brief.

Si tienes razón, eso hare y en cuanto tenga a ese infeliz simio frente a mí lo destruiré con mis propias manos por su osadía, dijo el rey mientras en su rostro se plasmaba una sonrisa y el hombre de cabello lavanda lo miraba con preocupación.

Paoz:

Milk caminaba por el bosque tratando de ubicar al jovencito de cabello alborotado mientras pensaba: ¿A dónde pudo haber ido?, lo peor de todo es que no puedo alejarme mucho de la cabaña pues me puedo perder.

El pensamiento de la pelinegra fue interrumpido por un sonido que provenía de la laguna que estaba cerca al lugar donde ella estaba. Milk giro su rostro y al hacerlo vio al jovencito de cabello alborotado con el dorso desnudo mientras se zambullía en la laguna, debido a la distancia y al momento la pelinegra no pudo notar que el jovencito lleva ropa interior. La pelinegra sintió su rostro arder al ver la escena y se cubrió el mismo con sus manos sin notar que el jovencito de cabello alborotado ya había notado su presencia y decidió salir de la laguna para acercarse a ella.

Princesita bella, ¿Por qué ocultas tu rostro?, dijo Gokú al llegar junto a ella mientras con sus humedecidas manos trataba de retirar las manos de la pelinegra de su rostro.

No, no lo hagas, estas desnudo, respondió Milk sonrojándose más.

¿Desnudo?, dijo Gokú mirándose a sí mismo.

Cúbrete, dijo Milk aun con sus manos en su rostro.

No estoy desnudo llevo puesto mi........, decía Gokú.

Vístete, un caballero no debe mostrarse desnudo ante una chica, salvo que estén casados y no es nuestro caso, dijo Milk en tono nervioso.

Pero llevo puesto mi truza, dijo Gokú.