Beautiful Green Eyes

Capítulo 14

Me fijo en los hombros de Michael al bajar las escaleras del hospital. La camiseta se ondula cada vez que baja un escalón y después vuelve a la normalidad, distrayéndome. Agradezco la distracción, no me apetece pensar ahora mismo en nada. Al pensar en distracción, mi mente solo me da una imagen: música demasiado alta como para oír tus propios pensamientos y olor a alcohol.

- Michael, ¿hay alguna fiesta en el internado esta noche?- Mis palabras salen como un torbellino excesivamente rápidas. Me muerdo el labio intentando hacerme invisible, ¿y si me mira mal y me dice que no? Pero conozco demasiado bien a mi hermano, y cuando este se gira para mirarme, está sonriendo.

- ¿Fiesta? No lo sé.- Aparta su mirada de mí y mira a Calum, que está a su lado trasteando con su móvil.- Cal, ¿tienes el número de Alec?

Calum levanta la vista y entrecierra un ojo, pensativo.

- No lo sé. Voy a buscarlo.- Desbloquea su móvil y se pone a teclear desenfrenadamente.

Me deslizo un escalón más hacia abajo y deslizo mi mano en el interior de la mano izquierda de Michael. Me mira con una sonrisita de lado y aprieta las manos.

- Solo me quieres cuando hago lo que quieres, Clifford.

Niego rápidamente y me pongo de puntillas para besar su mejilla; aunque lleve zapatos de plataforma sigo siendo más bajita que todos ellos.

- Es mentira y lo sabes.

Mi voz queda ahogada por el gritito de victoria de Calum, que lo hace quedar como una nena. Giro mi cabeza y le veo con un puño alzado en posición de victoria y la mirada fija en el móvil.

- ¡Michael! Sí, lo tengo. ¿Le pregunto?- Alza una de sus cejas marrones con algo de confusión y Michael le responde con un movimiento despectivo de mano.

- No, siempre tiene una fiesta. Dile que llegaremos a su habitación en...- Me mira, como evaluando cuanto tiempo tardaré en arreglarme y suspira, calculando mentalmente.- A las diez y media o así, ¿vale?

Calum devuelve la vista al móvil y vuelvo a besar la mejilla a Michael.

- ¿Vamos a volver ya?- Ladeo la cabeza, poniendo sonrisa de muñeca de porcelana, que mentalmente espero que sirva para algo.

Él suspira, mirando al suelo, admitiendo que va a hacer lo que yo quiera sin rechistar sin decirlo.

- ¿Qué es lo que quieres, princesa?- Luke me sorprende por detrás, abrazándome por los hombros.

Ladeo la boca en un mohín pensativo, lo que realmente quiero es comprarme un vestido, unas pulseras y unos zapatos.

- Ir de compras.

Veo como Michael deja escapar el aire lentamente en un bufido, aceptando su condena de muerte, y Luke sonríe.

- Vamos, no será tan malo.

Michael le dedica una mirada que si las miradas mataran, Luke ya estaría muerto.