New Sensation.

50.-No lo vas a hacer.

Capítulo 50-No lo vas a hacer.

-Venga chicos, ¡bajando del auto todos!-El padre de Álex abrió las puertas automáticamente.

-¡Ueeeeeeeeeeeeeeeeeeeeh!-Chillaron todos los chicos saliendo a tombrones del coche, Álex saltó encima del chaval rubio, los dos cayeron al suelo divertidos, Joel abrió el maletero mientras bailaba, ridículo, Adirán y Dudu se hacían fotos con unas chicas, que nada más salir se abalanzaron sobre ellos (más bien sobre Dudu), poco tardaron en lanzarse unas cuantas más a por Álex, pero estas eran más mayores, en esos momentos deseaba tirarlas del pelo y estamparlas contra la farola.

-Lorena, pichurra, ven a ayudarme.-Dijo Joel meneándose como un imbécil.

-Vuelve a llamarme pichurra y te quedas sin la tuya.-Joel abrió los ojos, dejó de bailar y comenzó a sacar las cosas del maletero, yo hice lo mismo, hasta que sentí una mano en mi hombro.

-Venga chicos, divertíos, esto ya lo hago yo.-Emilio el padre claro está, nos obligó a dejar de ayudar e ir a disfrutar en la playa, ya estaban caminando por la arena todos, Dudu hablaba con Kessylen, ella, babeando, Álex y sus amigos se desvestían quedándose solo y exclusivamente con el bañador, corrimos un poco y logramos alcanzarlos, Joel tiró para adelante con los demás, el paso de quitarse la ropa, Álex ataba el cordón que sujetaba su bañador, para que no se le callera, aunque si eso pasara, creo que a nadie le disgustaría, me quité la ropa y me quedé en bikini, Álex me miró sensual.

-Menuda vergüenza Álex.-Me crucé de brazos y mordí mi labio.

-Ya, esto nos pasa por meterte en mi cama sin permiso.

-Eres más falso que los orgasmos de un puta. ¿Qué yo me meto en tu cama? Quien me dice “Ven, abrázame que lo estás deseando”.-Le miré convencida, con aires de superioridad chinchándole a más no poder.

-¿Y quién engancha de los pelos a todas las chicas que se me acercan? ¿El espíritu santo?-Me dio en la frente, como sabe que me molesta… 

-A mi no me vengas con tonterías… ¡Álex!-Empezó a correr hacia la caseta donde alquilaban tablas de surf, yo le seguí, perdí una chancla por el camino, pero me costaron tres euros, que mas daba, llegamos al fin, un chico joven de al menos veinticinco años daba cera a enormes tablas de surf, una mujer mayor atendía a la ansiosa juventud, deseando hacer surf, había una cola inmensa, pero al ser Álex López, en cuanto llegó pasó el primero a alquilar una.

-Olá jovem, ¿quantas quer? -La mujer esbozó una enorme sonrisa, mientras colocaba las tablas y las apollaba en la esquina delmostrador. 

-Dá-me 3 de tamanho médio e uma grande com borde-los metalizaños-La mujer se dio la vuelta, sus faldas rozaban con la blanca arena, cogió tres tablas verdes de tamaño medio y una roja grande, con los bordes metalizados, se las pasó al chico para que las encerara un poco, nos apartamos y dejamos que los siguientes pidieran sus tablas, Álex se tumbó.

-¿Seguro que no quieres hacer surf?-Añadió, tardé un poco en contestarle ya que el sol estaba iluminando como nunca su impactante y musculoso torso. 

-Paso.-Vi como Kessylen se metía poco a poco en el mar, Dudu e Adrián buscaban a alguien por la playa, supongo que seria a Luizza, Joel escuchaba música en el MP3, aquí cada loco con su tema, de repente, me percaté de que, a unos cuantos metros de donde nos encontrábamos, había un roca enorme, de donde la gente se tiraba y caían al mar, me entraron unas ganas inmensas de hacerlo también.-¿Álex, que es eso?-Miró hacia la roca, después clavó sus ojos en mi rostro y me negó rotundamente con la cabeza.

-Algo que nunca vas a hacer, es demasiado peligroso.

-Vale, <<Que te lo crees tú, guapo>>, voy con Kessylen.-Corrí hacia ella, lo que no sabía Álex, es que iba a subir a esa roca y hacer algo verdaderamente extremo.