Enslaved {KyuSung}

Capítulo 10 "La llegada de la princesa"

El corazón grita "detente" ... M. ft A. L.

Luz.

La primera palabra en la que pensó cuando vio la caravana detenerse en las inmediaciones del palacio y descubrió una silla carruaje decorada detrás de hombres de rostro reacio fue exactamente aquella, especialmente cuando las telas vaporosas en tonos pasteles fluyeron como una pequeña cascada cuando un pequeño pie tocó la tierra de un reino ajeno. Butzina era la tierra del sol, un lugar que no era para todos y a pesar de la crueldad de su entorno, había maravillas entre la arena y estuvo seguro de que la princesa era una de ellas.

El sonido del aliento de los caballos y el murmullo colectivo solo fue interrumpido por el recibimiento del viejo y el nuevo rey y fue entonces que los guardias de Maljut se inclinaron en señal de respeto, aunque quizás pudo deberse también a la presencia misteriosa de una joven que fácilmente podría haber competido con la belleza de la antigua reina si ella se encontrara ahí.

Llevaba un vestido blanco con ligeros toques de un azul casi inexistente y la tela se deslizaba por el viento como si fuera parte de él; tenía el cabello largo de un tono rubio similar a la arena y un par de ojos marrones tan cálidos como el atardecer. Cualquier hombre se habría arrodillado ante ella si con ello pudieran conseguir una sola de sus miradas, pero el rey no tenía misericordia ni siquiera enfrente de una joven que llevaba el título de su prometida y próxima consorte.

Fue presentado con palabras escuetas debido a que su presencia era irrelevante y se sirvió una comida abundante para recibir a los invitados.

Parecía tímida, pero podría tratarse simplemente de la tensión de la atmósfera porque estaba seguro de que, si no fuera por el antiguo rey, aquella bienvenida habría transcurrido entre silencios.

–¿Cuál dijo que era su nombre? –cuestionó Jonghoon mientras cortaba la carne sobre su plato, poniendo más interés en la comida que en ella; su padre se había retirado insinuando tener asuntos que atender para darles privacidad, pero eso solo tuvo el efecto contrario que deseaba ese hombre porque él no tenía interés en conocer a su futura reina.

–Taeyeon, su alteza.

–Um, nunca había escuchado sobre usted –respondió antes de poner la carne en su boca.

–En cambio yo si he escuchado mucho sobre usted –dijo amablemente–. El prín...

–No me interesa escuchar lo que piensa saber sobre mí –le interrumpió–, probablemente esté equivocado de todas formas.

–Lo siento, no quería ofenderlo haciéndole creer que tengo interés en habladurías. –Bajó la mirada y halagó la comida en un intento por cambiar la conversación.

Estaba fuera del comedor debido a que siempre tenía que mantenerse cerca del rey y aunque no pudo ver las expresiones de ninguno de los dos, imaginó cuál sería la expresión de ella; iban a casarse y su esposo parecía odiarla y aunque pensara que sería sencillo que ella se negara a la unión, estaba seguro de que las cosas no funcionaban de una manera tan sencilla cuando ni siquiera en el mundo fuera del palacio lo hacían.

–El rey siempre ha sido un hombre falto de tacto, no se lo tome personal princesa –dijo–. Soy el guardia del rey Jonghoon, Kyuhyun –se presentó cuando notó su sorpresa al saberse acompañada y se inclinó en señal de respeto.

La joven no dijo nada y volvió su vista hacia los jardines del palacio mientras descansaba contra la barandilla con balaústres tallados minuciosamente por las manos hábiles de uno de los hombres del reino.