It's a good morning Mr. Garfield

Lo que es tener una vida social

Al fin viernes, y no viernes de quedarse en casa, de aguantarte a tu madre llorar con películas románticas o aburrirse toda la noche. No. Era viernes de ir a una fiesta, de estar con Andrew y de divertirse, o por lo menos intentarlo.

Me vestí con un vestido bastante casual, zapatillas negras (¡sin tacón!) y un abrigo marrón largo por encima.

Cuando estuve lista, no sin antes volver un desastre mi cuarto y el baño, esperé a Andrew sentada en el pasillo, jugando con un mechón de mi cabello.

Minutos después me siento rara, como si alguien estuviese observándome. Luego recuerdo todas las películas de miedo que Juliet me había obligado a ver con ella, y me doy cuenta de que este sería un escenario perfecto para una de esas películas. Temía voltearme y ver a un hombre enmascarado con un hacha en la mano, esperando para asesinarme brutalmente, desmembrarme y colocar mis diferentes partes del cuerpo en su estudio privado.

Y por más estúpido que fuera, no miré hacia el lugar donde sentía que había alguien, sólo eché a correr por el lado opuesto. Siento que ese alguien me sigue y me agarra un brazo. Se me escapa un grito, sin embargo no muy aterrador. Pero luego escucho la risa que me era tan familiar.

Andrew.

Volteé y si era él. Que estúpida soy, joder. Él estaba riendo a carcajadas.

-¿Qué? ¿Qué..Jajajaja... ¿qué pensaste?-Me preguntó entre risas.

-¡No lo sé! ¡Me puse paranoica!-Respondí yo.-Sentí que alguien me estaba mirando y,... ¿tú me estabas mirando?

-Si, yo te estaba mirando, yo, no un monstruo que quería comerte.

-¿¡Y por qué te quedaste ahí mirándome en vez de decirme "hola" o "hey, Isabel, soy Andrew y no un asesino en serie"!?

Sonrió pero luego se puso algo serio y dijo:

-Porque la verdad te veías muy bonita enrollada en tu abrigo y jugando con tu cabello.

Creo que me sonrojé porque sentí mis mejillas calentarse, y a mi estómago dar vueltas de ternura. Si es que las vueltas de ternura existen.

-¿Vamos?-Me preguntó un momento después. Yo asentí. Él me dió un rápido beso en los labios. Me volví a sonrojar.

Llegamos hasta el auto de Andrew y yo me senté en el puesto del conductor antes de que él pudiera hacerlo.

-Yo manejo.-Le dije poniendo la palma de la mano hacia arriba para que me diera las llaves.

-¿Es en serio?-Me preguntó con cara graciosa.

-Si, yo se en donde queda el lugar. Vamos, déjame conducir.

-Pero tu me puedes decir en dónde es...-Respondió con cara de niño pequeño que lo están obligando a ir a la escuela.

-Por favor Andrew.

-Pero, Is, yo quiero conducir...

-Andrew, eres todo un niñito pequeño.

Él sonrió.

-Y luego el pedófilo soy yo.-Dijo, me dió la llave y se sentó sin más que su sonrisa en el asiento del copiloto.

Sonreí y arranqué.

La fiesta era en la casa de un amigo de Matt llamado Edward Stevenson, a unos 20 minutos de donde yo vivía.

Cuando llegamos vimos que habían muchos autos estacionados afuera.

Nosotros también estacionamos y nos bajamos del auto dirigiéndonos hacia la casa de dónde provenía la música a máximo volumen.