Parte XVI

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Lunes 1:38 pm

Estaba esperando a Ana bajo un árbol en la universidad.
El día anterior no habíamos hablado mucho, sólo por la noche que me pidió que la esperara a la 1:30 pm en el lugar en el que me encontraba. No respondió a los siguientes mensajes que le envié, ni los de hoy por la mañana, no sabía qué era lo que sucedía, me preocupaba ya que ella normalmente no actuaba así, de hecho era la primera vez.

Miré mi reloj 1:45 pm, cerré los ojos y miré hacia en frente, simulé que miraba el teléfono, aunque eso no se notaría por los lentes de sol.
A lo lejos Ana caminaba de prisa, tras ella el chico de barba espesa, Eduardo creo que era su nombre, o realmente no recordaba, parecían discutir, él se miraba molesto y ella irritada.
Su novio la sujetó del brazo, Ana hizo una mueca de dolor, no sabía si ir a su ayuda o esperar, Ana se soltó de su agarre y pude escuchar cómo le dijo fuertemente: "¡dejame!"
Se giró y siguió caminando a mi dirección. Me puse de pie y fui a su encuentro notando cómo aquel chico se marchaba con grandes zancadas.

Me aproximé a mayor velocidad y de inmediato la abracé. Ella apretó mi cuerpo con tanta fuerza que me lastimaba, instintivamente traté de alejarme.

-Lo siento

Dijo soltandome y con su voz rota. No sabía qué decirle, la tomé de la mano, pero ella de inmediato se soltó, la miré seria, el rechazo me molestaba, sin embargo no le dije nada, ella no me miraba.

-Vamos a mi casa

-Sí

Fue sólo un leve susurro. El camino fue en silencio, incómodo para mí.
Entramos y ella se dirigió al sofá dejándose caer con pesadez, fui a sentarme a su lado.

-¿Todo bien?

Su semblante era triste, pensativo. No respondió, por un momento me quedé en silencio, luego dije:

-¿Quieres tomar algo? ¿Comer algo?

-Tomar algo

Por fin me miró.

-¿Café, agua, jugo, refresco de soda?

-Vodka

La miré extrañada, no era como que ella bebiera mucho, no pensé que ella fue quién lo propusiera, pero no estaba segura que fuera buena idea que bebiera en el estado en el que estaba.

-Ana, no creo que sea buena ide…

-¡Por favor, Milo!

Suplicó sosteniendo mis manos con fuerza entre las suyas. No pude resistir esa mirada, fui a mi habitación y traje un vodka que no había abierto, lo había comprado el día anterior a petición de mi prima. Fui a la cocina por dos vasos y volví a la sala junto a ella.

-Ya tienes otro

Parecía alegre por ello.

-Sí, desde ayer

Respondí abriendo la botella, tomé el primer vaso para verter líquido, pero Ana interrumpió.

-Deja de formalismos, no necesitamos vasos

Entonces arrancó la botella de mis manos y le dio un largo trago, me quedé estática, sorprendida de su manera de beber.

-Creí que no tenías mucha experiencia

Recibí el vodka y también le di un trago mientras oía su respuesta.

-Talvez no tenga experiencia, pero puedo probar e intentar

Lo dijo de una manera tan intrigante que me dejó sin palabras, tomé otro trago y volví a ofrecerle, fui al mueble que estaba a un lado para encender un aparato electrónico que me permitía oír música vía bluetooth, la última canción que estuve escuchando comenzó a sonar.

-No sabía que te gusta Cold Play

Dijo como si fuera lo mejor del mundo.

-¿Te gusta?

-Mucho, Trouble es mi favorita

Y la mía igual.

-¿Quieres hablar?

Su semblante cambió, no dijo nada, sólo siguió bebiendo, más que yo, pero sentía el efecto, no había almorzando porque pensé que lo haría en compañía de Ana, pero aquí estábamos, bebiendo, sin comida previa, o al menos yo.

-¿Almorzaste?

Pregunté.

-No, yo quería, pero almorzar contigo, Erik…

¡Ah! ¡Eso! Erik era el nombre, aunque no importaba, y lo que dijo sólo significaba que no había comido.

-…quería que fuera con él, yo… yo le dije que ya tenía planes, pero… él, se molestó, de inmediato supuso que estaría contigo… yo… traté, te juro que traté de explicarle que sólo almorzaríamos, que si quería podía acompañarnos, pero no quiso, él quería que nos fuéramos juntos, que necesitaba tiempo conmigo conmigo, pero, pero él… él sólo quería que… que yo le diera… entonces yo… yo… le dije que me soltara… y tú llegaste…

-¿Porqué se comporta así?

Quise saber.

-Porque es un tonto

Las lágrimas salían con tal fluidez que ya no se notaba cuando una caía. La abracé contra mi pecho, no quería que se sintiera como seguro se sentía en ese momento.

-Eres tan diferente, Emilia. Tan tierna, tan comprensiva y paciente

-Soy así contigo porque te quiero, yo no acostumbro ser así con todos

-También te quiero

Me soltó y volvió a tomar un largo trago, no se veía bien.

-Habla con él

Dije tragandome mis sentimientos y continué.

-Deben solucionar sus problemas, pero cuando ambos estén calmados

Ella me miró, un atisbo de ternura se reflejó en sus ojos, sonrío torpe.

-Milo, eres un amor, preocupándote por mí

Dio otro sorbo y me pasó el vodka para que bebiera y lo hice.
¿Qué hacía dándole consejos? ¿Qué hacía suprimiendo lo que yo sentía? ¿Porqué estaba tan cerca y a la vez tan lejos?
Su voz llamó mi atención.

-Quisiera…

Se interrumpió así misma, la miraba en silencio, luego se sentó más cerca de mí, su muslo junto a mi muslo, me miraba, había un brillo en sus ojos, ese brillo no era de las lágrimas que hacía un momento los inundaron.

-Quisiera… yo…

-Sólo dilo, Ana

No habló, sólo se acercó más, demasiado cerca para mi gusto, no pude evitar cerrar los ojos tratando de controlar mis emociones, porque tenerla así de cerca sólo me hacía querer besarla.

Doble, no sé porqué hubo un problema al subirlo, lo cuál me molesta porque tuve que escribir de nuevo. Y  espero no vuelvo a pasar.
Buenas noches.

Enamorada De Mi AmigaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora